Un par de días pasaron desde nuestro viaje a la playa y la verdad es que nos sentó bastante bien. Nos relajamos y nos volvimos todavía más cercanos, pero eventualmente tuvimos que regresar a la realidad, es decir a atender el restaurante. Estos últimos días Jimin y yo hemos estado mucho más cariñosos que antes y simplemente me derrite el corazón. El efecto que tiene este hombre en mí es tan extraordinario que a veces hasta yo me sorprendo.
Nuestro día empieza como cualquier otro, nosotros acurrucándonos y robándonos besos de vez en cuando. Me encanta cuando Jimin me pide que nos quedemos un rato más así acurrucados. Luego de un rato, sin muchas ganas nos levantamos y hacemos nuestra rutina de todas las mañanas. Una vez que terminamos de comer y todo eso, Jimin se dirige al granero para preparar los postres de hoy, mientras decido hacer unas tareas en la granja que tengo atrasadas. Sin importar la cantidad de tiempo que le invierto a la granja, siempre tengo tareas atrasadas; se cuenta y no se cree. Vaya que el mantenimiento de este lugar es bastante demandante, incluso pasó por mi mente contratar a alguien más, pero eso sería extremadamente peligroso y caro, así que rápido lo descarté.
Me intento apurar un poco y en más o menos un par de horas ya está terminado. Me dirijo al granero para ver el progreso de Jimin y en realidad me sorprendo cuando veo que ya todos los dulces ya salieron del horno y nada más está esperando a que se enfríen un poco para decorarlos. Qué hombre tan eficiente. Decido bajar a la cocina para hacer la comida del día de hoy y empiezo a cocinar. Nunca había cocinado tanto y tan seguido hasta que me vi obligado por esta experiencia, pero debo admitir que he mejorado muchísimo mis habilidades culinarias. Aunque generalmente hablando, he aprendido bastantes cosas y he desarrollado habilidades que ni siquiera sabía que tenía, así que en realidad esta experiencia ha tenido muchas ventajas. También para Jimin, siempre se emociona con las cosas nuevas que aprende.
Abrimos el restaurante y atendemos a los clientes como normalmente lo hacemos. Cada vez me siento más como parte del pueblo porque ya conozco a casi todas las personas que entran por esas puertas. Aunque varios no son del pueblo, siempre pasan por aquí y como les ha gustado la comida, vuelven. Por eso es que ya los conocemos y siempre entablamos algunas pequeñas conversaciones con ellos. Jimin era un poco tímido al principio, supongo que también se comportaba así porque tenía miedo de que nos descubrieran, pero poco a poco se ha acostumbrado y ahora habla con todo el mundo, hasta con las personas que no conoce. Yo estoy seguro que hay varios hombres que sólo vienen aquí para ver a Jimin porque me he fijado en la forma cómo lo miran, pero a mí me da igual siempre y cuando no se pasen de la raya. Ver, no tocar.
El día transcurre sin ningún acontecimiento inusual y como de costumbre ordenamos todo después de cerrar. Nos dirigimos a la casa donde nos cambiamos a nuestras cómodas pijamas y nos ponemos a ver televisión. Jimin está exhausto, así que rápidamente se queda dormido abrazado a mí, entonces decido apagar la televisión y cargarlo estilo novia. Medio dormido me abraza el cuello y oculta su rostro en mi cuello. Lo subo cuidadosamente por las escaleras hasta llegar a la habitación y suavemente lo acuesto en la cama. Inmediatamente se queja por la falta de calor, pero le susurro que voy a acomodar a Caramel.
Le subo su camita a Caramel al cuarto para que duerma con nosotros, aunque sé muy bien que no la va a usar. Jimin insistió en que le compraramos una "camita" de un metro de largo al perro; de chiquita no tiene nada porque está hasta más grande que Caramel porque cuando se acuesta ahí, se hace bolita. No sé por qué le compramos una "camita" si Jimin siempre lo deja subirse a nuestra cama para dormir con nosotros. En fin, le acomodo su cama en una esquina del cuarto y le hago una seña para que se acueste en ella. Le acaricio un poco la cabeza haciendo que mueva la cola de felicidad. Mentiría si digo que no le he agarrado bastante cariño a este perro. Debo admitir que es bien lindo y muy cariñoso también. Volteo a la cama para ver a Jimin pacíficamente dormido. Diablos, qué hermoso se ve.
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Countryside - Jimin x lector
FanfictionAl ser descubiertos en una misión encubierto, el lector y su compañero Jimin se ven forzados a adaptarse a una nueva vida en una granja a las afueras de un pueblito al tener que pretender que son esposos. ¿Podrán dirigir la granja sin ser descubier...