S I E T E

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Lucía

2 semanas después

-¡Salí de acá!.-dije mientras me tapaba con las manos.-Alejá esa cosa mi.

-¿Que cosa?.-se hizo el tonto mientras se acercaba a mi despacio, pero yo había visto el pincel que lleno de pintura que tenía atrás de su espalda.

-Eso que tenés ahí escondido.-dije, haciendo referencia al pincel.

-¿La pija?.-preguntó riendo, se estaba haciendo el boludo.-¿Qué cosa Lu? Decime.-preguntó mirándome sin borrar la sonrisa burlona que tenía de su cara.

-El pincel, Valentín.-dije sacando mi vista de sus ojos.

Hasta recién me había estado persiguiendo con ese coso intentando mancharme.

Con el pincel.

-Bueno esta bien, sigamos porque no terminamos más sino.-de repente se dió vuelta y siguió con lo suyo pintando la pared de madera.

Fina nos había encargado a cada uno arreglar algo del campamento mientras ellos se iban de excursión con los chicos.

Con Valentín teníamos que pintar un cuartito para guardar cosas que estaba echo mierda.

Al principio lo miré dudosa pero cuando ví que siguió pintando tranquilo me acerqué de nuevo.

Me agaché a mojar el rodillo en la pintura cuando sentí como un chorro de pintura caía por mi espalda.

-¡Valentín!.-grité levantandome mientras sacaba la pintura que había caído en mi cara. Pude ver como se reía a carcajadas.-Ahora si te la buscaste nene.

Agarré un pincel y le di una pincelada de pintura roja en la cara.

Me miró sorprendido mientras reía y empezó a salpicarme con pintura.

-No sabes con quien te metiste chiquita.-dijo salpicándome pintura con sus manos.

Empecé a correr y se desató una guerra de pintura entre nosotros.

-Ba-basta, basta. Un descanso.-dije intentando recuperar el aire que había perdido por reirme.

Valentín se apoyó en la mesa de madera donde teníamos la pintura también intentando recuperar el aire.

Estabamos llenos de pintura, y no solo nosotros, había pintura en el piso, en los árboles, en todos lados menos en las paredes del cuartito que teníamos que pintar.

-Mira que linda que sos llena de pintura.-soltó mirándome y yo mordí sutilmente mi labio.

-Yo tengo que admitir que el rojo te queda bastante bien.-contesté riendo y me senté en la mesa a su lado.

-Todo me queda bien a mí.-dijo agrandándose mientras se acomodaba el pelo.

Pa q' te wa decir q' no si sí.

-A ver mirame.-ví que tenia unas gotitas de pintura en el párpado que si le llegaban a entrar en el ojo le iba a hacer mal.-Cerra.-dije y pasé con cuidado la yema de mi pulgar para limpiarlas.-Listo, tenías pintura.

Rio Hermoso - WosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora