T R E C E

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Lucía

Giré mi cabeza a ver si era verdad, y sí, era verdad.

Por fin volvía a ver esos ojitos.

Valentín tenía los ojos un poco abiertos, intentando adaptandose a la luz del lugar y una sonrisa chiquita en sus labios.

-Valentín.-dije sin poder creerlo todavía.-¡Valentín!.

Me lancé a abrazarlo pero me separé cuando largó un quejido de dolor que largó.

-Perdón, perdón.-dije sonriendo mientras secaba mis lagrimas.-¡Estas bien!.

Mi corazón se había acelerado como por la vez número cien en lo que van de estos tres días.

Pero esta vez era de felicidad.

-¿Cómo te sentís?¿Necesitas algo? Ya llamo al médico.-pregunté sentandome de nuevo y agarrando su mano. Mientras buscaba con la mirada el botón que me había dicho Marta.

-Me duele la cabeza.-dijo intentando acomodarse en la cama pero largó un quejido de dolor.-Y el cuerpo también.

Cuando ví que no pudo moverse me levanté rápido y lo ayudé a ponerse cómodo.

-No te muevas mucho por las dudas.-dije acomodando su almohada.

-¿Qué pasó?.-dijo todavía un poco confundido.

Se le notaba en la cara que se sentía mal y estaba un poco aturdido todavía, le dolía la cabeza y apenas podía abrir sus ojos.

-Sinceramente no estaba con vos, pero te caíste de la escalera y hace tres días que estabas inconsciente.-dije y ví como abrió de golpe sus ojos.

-¿Tres días?.-repitió mientras llevaba una de sus manos a su frente y yo asentí con la cabeza.-¿Y Beto y Fina?. Deben estar re preocupados.

-Tranquilo, lo importante es que ahora estas bien.-dije apretando su mano y él me miró sonriendo.

Algo fue más fuerte que yo y me levanté y dejé un beso en su frente y lo abracé haciendo que él ria.

Por primera vez en tres días sentí paz.

Tener a Valentín hablándome me daba paz.

No lo voy a negar, en un momento yo también pensé lo peor.

No me di cuenta y algunas lagrimas empezaron a caer por mis mejillas.

-Hey no llores.-dijo Valen sacudiendo mi mano.-¿Que pasa?.

-Es que. Tenía mucho miedo de que te pase algo.-solté llorando.

-¿Estuviste los tres días acá?.-asentí volviendome a sentar.

-Lucas, Fina y Beto también.

Ví como cerró los ojos y se quedó en silencio, para después abrirlos y mirarme mientras sonreía.

-¿Qué?.-subí mis cejas.

-No me iba a ir de este mundo sin antes haberte dado un segundo beso.-soltó y ahí estaba el Valentín que conocía.

No podía creer que recién se había levantado de estar inconsciente por tres días y ya me estaba molestando de nuevo.

-¡Valentín!.-este chico me hace reir sin ganas. Ví como sonrió mirándome.

-Como si no tuvieses ganas, yo sentí el besito que me diste.-dijo haciendo boca de pato y pude sentir como mis cachetes tomaban color.

-Era una situación extrema, ¿ok?.-dije jodiéndolo y él rió.

Rio Hermoso - WosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora