Rio Hermoso - Wos

Q U I N C E

Lucía

Miré a Valentín sin saber que decir.

-Y-yo..

El ruido de la campana de la puerta hizo que nos sobresaltemos y cuando él miró para atras como acto reflejo yo lo empujé lejos mío.

Suspiré cuando ví a Ámbar y a Sofi.

Sofi nos miraba extrañada y Ámbar me miraba con una sonrisa pícara en su cara.

-¿Todo bie..-Sofi fue interrumpida por la puerta volviendo a abrirse atrás de su espalda.

Marcos.

Automáticamente me di vuelta y empecé a juntar todo y llevarlo a la cocina.

El ambiente ya era bastante tenso y no tenía ganas de pelear con Marcos.

Mientras lavaba el plato que usé con Valentín escuché como cerraban la puerta y los pasos de Marcos hacía a mi.

-¿Qué excusa vas a inventar?.-pregunté sin mirarlo cuando apareció a mi lado.

Ví como se cruzó de brazos suspirando y apoyó su cadera en la mesada mirándome de costado.

-Ninguna, sinceramente me olvidé.-soltó y yo hice un gesto con mi boca.

-Ah mirá vos.-dije cerrando el agua.-Te mandé como cinco mensajes, ¿te olvidaste de leerlos?.

-Se me quedo sin bateria el celular.

-¿No te pareció raro no ver a tu novia en la cena?.-pregunté incrédula.

-No cené, estoy mal de la panza y me fui a acostar. Cuando me levanté después de un rato para bañarme me acordé, perdón Lu.

No le contesté nada y empecé a buscar un repasador o algo para secar los pocos utensillos que había usado.

-¿Qué buscas?.-preguntó sin siquiera moverse mientras yo daba vueltas por la cocina.-Acá tenes.-dijo estirandome el que tenía atras suyo.

Lo agarré de mala manera para que pueda notar mi enojo y cuando casi se me resbala el plato a la mierda me lo sacó de las manos y se puso a secar las cosas él.

-Perdoname Lu, enserio.-dijo mientras guardaba los cubiertos.-Soy un salame y se me re pasó.

-Va a ser mejor que no se te empiecen a pasar las cosas, Marcos.-dije.-Te había preparado algo re lindo que lo tuve que tirar. Lo primero que pensé cuando no venías es que no querías arreglar un carajo.

Solté copiando su posicion anterior para apoyar mis manos en la mesada y ví como él me abrazó por los hombros y dejó un beso en mi cabeza pero yo no me moví.

Sabía que yo estaba enojada asi que prefirio no decir nada y terminó de secar lo que yo había lavado.

Guardó todo y cuando se estiró para guardar los platos en las repisas mas altas su remera se subió un poco y ví algo me llamó la atención en la parte baja de su abdomen.

-¿Qué te pasó ahí?.-pregunté señalando mientras me acercaba a él.

-Ah nada.-dijo desinteresado mientras tomaba mis manos y yo subí mis cejas.

-Tenes lastimado.

-Me caí el otro día jugando al voley con los pibes.

Lo miré cruzándome de brazos.

-Enserio, el día que te llamé al hospital.-dijo muy seguro.

-¿No habían jugado al fútbol?.-lo miré.