ᴄᴀÍᴅᴀ

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—¿Para qué vivo? —murmuró en un rincón de los cambiadores mientras se abrazaba a sí mismo y sus compañeros soltaban risas entre dientes, entretenidos viendo a un Atsumu "deprimido" que aún no superaba su primera caída en el evento de fans de hace tres años para que volviera a suceder en la mañana de ese dia.

¿La vida no tenía nada mejor que hacer que joderle la existencia?

Lo peor eran los memes que rondaban el internet en cada uno de sus míseros recónditos y, que sus compañeros de equipo se lo recordaran a cada hora y momento, tampoco ayudaba.

Yaku y Kiyoomi eran los que más se estaban divirtiendo e incluso en ese momento se estaban viendo un loop una hora con el video de él cayendo. Cabe señalar que cada vez se reían más fuerte e incluso Hyakuzawa se les había unido mientras Bokuto y Hinata evitaban que se colgara como Yuki en Given.

Y eso era sin el matoneo perpetuo que Samu le haría, que sería la mierda misma, pero él no le podía reprochar nada a Osamu por una sencilla razón: él también le había hecho muchísimo bullying y aún lo seguía haciendo cada que podía. Sin embargo, ambos sabían cuándo parar antes de que su madre viniera y les metiera un escobazo.

—Fue una caída olímpica. —se oyó decir a alguien y Miya podía jurar que fue Sakusa quien lo dijo, pero sus pensamientos le impedían pensar bien.

¿Que seria mejor? ¿Una soga? ¿Un theraband? Si usa el theraband para colgarse, probablemente no lo logre.

Eso sonaba como un reto.

El asombroso Atsumu, buscaría la manera de atarse usando un elemento deportivo que por años e torturó.

—Los fans disfrutaron esto más que la firma de autógrafos. — continuó Bokuto afirmando un hecho real, seguido por una mala mirada de Tsumu—. ¿Qué? Es verdad—, se defendió.

—¿El suelo besa bien? —cuestionó Yaku con malicia.

—¿Mejor que Sakusa? —Ahora fue Sunarin quien abrió la bocota.

—Al parecer. —río el pelinegro, empero su mueca fue opacada cuando Atsumu le comenzó a seguir para darle un beso mientras le recordaba que aún su boca debía de tener millones de bacterias y quizá más porque no se la había lavado en todo el día.

Kiyoomi maldijo no haber tenido su spray de Lysol a mano.

Empero, Iwaizumi fulminandolos desde la entrada del gimnasio, les hizo frenar en seco—una clara advertencia para que se comportaran y se fueran a descansar; la práctica había terminado.

Últimamente miradas como esas aterrizaban en Kiyoomi, quien desde siempre se había caracterizado por ser un personaje muy serio y respetuoso, así que la situación se le hacía extraña y culpaba a Atsumu.

Cómo de costumbre todos se separaron, aún riendo porque Wakatoshi y Kageyama habían vuelto a reproducir el video otra vez—por supuesto, con influencia de Yaku y Suna.

Tener a esas serpientes en el equipo nacional fue lo mejor y a la vez lo peor que pudieron haber hecho.

Atsumu caminaba intranquilo, habían cosas que había querido saber desde qué Kiyoomi le había contado que había terminado viviendo con su tía por "circunstancias problemáticas" con su madre.

Quería saber qué eran esas "circunstancias" que llevaron a Rei Komori a tomar la custodia de Kiyoomi, parte de él también era consciente de que no debía presionar al pelinegro— este le contaría todo cuando estuviese listo—, pero el deseo era más fuerte que la razón y no podía dejar de maquinar interrogativas en su cabeza, al igual que respuestas basadas en poca evidencia.

ᴋᴀɪʀᴏꜱ [ꜱᴀᴋᴜᴀᴛꜱᴜ] ~ •ʜᴀɪᴋʏᴜᴜ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora