Zombie Attack|| My Chemical Romance||

Capítulo 7

Los chicos se encontraban acondicionando el sótano. Intentaban no pensar en el tema de la enfermedad y actuar como si nada, por eso intentaron ponerse cómodos.

Ellos realmente pensaron que sería cuestión de tiempo a que todo esto se solucionara, ya que los padres de los Way y de las hermanas estaban trabajando en ello.

El ambiente mejoró entre todos, ya no se sentía esa tensión que Gerard siempre ponía. Aunque no todo era diversion, Frank intentaba conversar con todos pero no lo lograba.

-Mikey... ¿aun tienes los videojuegos que jugábamos cuando éramos niños?. -Preguntó la pelinegra al de lentes quien asentía antes de que terminara la oración.- ¿Juguemos?

Melina presentía que Frank aun no se sentía tan bien, por ende quería alegrarlo de una forma más disimulada. Odiaba ver a la gente sentirse miserable por lo que siempre daba lo mejor de sí para alegrarlos. Ella tomó un juego al azar y lo puso en la consola antigua de los chicos, para finalizar entregándole un control a Frank, quien la observó con una pequeña sonrisa curva.

Así fue como todo se distrajeron jugando videojuegos y comiendo algunas frituras que quedaban.

El sótano era un lugar bastante agradable ya que los Ways lo utilizaban como una especie de búnker para cualquier emergencia. Tenían televisor, algunos sofás, un refrigerador y un lavaplatos, tenían absolutamente todo para sobrevivir, a excepción de un baño, en el cual acordaron ir en parejas para no correr ningún riesgo.

Hannah estaba sentada en el sofá viendo como todos jugaban sentados en el suelo frente a la Tv, ya que ella jamás fue una gran fan de esas cosas.

-¿Qué haces? .-Preguntó Gerard sentándose al lado de la rubia.

-Nada especial. -Rió nerviosa- Pienso en que puedo comer. -Eran las 22pm y nadie había comido nada durante el día, a excepción de las frituras pero Hannah no las quería, ya que prefería llevar una vida más sana que comer porquerías durante todo el día. El refrigerador estaba repleto de sodas, agua y cervezas; y los estantes estaban llenos de comida en conserva y las sopas que había comprado Frank hace un rato.- Ya sabes... no me gusta mucho lo que hay acá.

-Sígueme .-Contestó el Gerard tomando la mano de su nueva amiga y camino en silencio hasta la primera planta de la casa.

Apenas subieron, pusieron percibir ruidos de sirenas de la policía, bomberos y ambulacias. Ambos agradecían que en el sótano no se escuchara nada de eso porque solo los pondría más nervioso de lo que estaban.

En el poco silencio y con las luces apagadas, Gerard tomó unas fresas y un plátano, los cuales corto y le agregó yogurt natural. A pesar de que siempre odio a las chicas, era muy observador y veía que Mikey le preparaba eso apenas llegaba.

-¿Cómo lo supiste? .-Preguntó sorprendida. Gerard solo se encogió de hombros, pues no le quería dar el crédito a su hermano menor.

-Secretos del chef. -Guiñó su ojo y soltó una pequeña risa, contagiando a la de ojos azules.- ¿Me acompañas a buscar almohadas y algunas mantas para que podamos dormir?

-Claro, pero... ¿no crees que deberíamos avisar?

Gerard negó con su cabeza y siguió su camino hasta su habitación que estaba en el segundo piso. Hannah lo siguió mientras comía con gusto lo que le preparó el pelinegro y al llegar al cuarto de este, se sentó en su cama.

-Creo que nunca había estado acá. -Rió observando minuciosamente cada cosa que tenía pero se enfocó en los dibujos que estaban pegados en las murallas y los que estaban sobre el escritorio.- Y eso que te conozco desde que nací.