RAMA KHAN

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Narra William:

Han pasado dos semanas desde que Karen está inconsciente. Nos turnamos con el equipo para cuidarla, nadie sabe el origen de su desmayo, y tampoco sabemos como resolverlo. J'onn ha intentando entrar en su mente, pero pareciera que tiene su propia fortaleza, un escudo mental. Hoy me ha tocado cuidar a Karen. Está con una ropa blanca y hemos usado kriptonita en un 25% para debilitar su tejido y poder introducir una jeringa con suplementos alimenticios para que al despertar no tenga ningún problema. Le estoy leyendo Bajo el Cielo Púrpura de Roma.

En medio de la calma se escucha una alarma sonar, baje junto con el equipo para ver que pasaba. Había un señor calvo vestido de manera ridícula.

 
—Es Rama Khan—dijo Kara. —Hará estallar ese volcán y toda National City morirá si no nos damos prisa.
—Prepárense—dijo mi padre y los héroes fueron por sus trajes.
—¿En qué ayudo?—le dije a Alex.
—Ve con el equipo nerd—dijo refiriéndose a Felicity, Cisco y Winn. Karen era la responsable de ese nombre. —Mira en que puedes ayudarles.
—Estoy en eso—dije corriendo hacia donde los chicos estaban, dejando a Karen sola.

Narra Karen:

Mi cuerpo parece que está en llamas, intenté abrir los ojos e incluso consideré que mis ojos estaban pegados. Finalmente, los abrí. Estaba en la enfermería de la DEO, estaba sola y afuera había un gran alboroto. Estaba vestida con un camisón blanco, no tenía idea de donde estaba mi ropa; sin dudarlo, retiré los cables que tenía y las jeringas. Miré el reloj electrónico de enfermería, había pasado semanas inconsciente. Mi cabeza no dejaba de dar vueltas y la imagen de Non estaba en ella. Aproveche la confusión y el caos que reinaba en la DEO para hacerme invisible e ir hasta la celda de mi supuesto padre. Lo vi atado y golpeado, sonreí.

—¿Sabes que puedo verte, cierto?—dijo Non incorporándose.
—Esperaba que lo hicieras—dije haciéndome visible.
—Te ves mal, Kaur—dijo Non, lo miré sorprendida.
—Veo que Rao te reveló mi nombre—dije sorprendida.
—Al final del día, también eres mi hija.
—¿Una diosa, hija de un mortal? Es irónico—dije sarcástica.
—De manera física, tienes mi sangre y la de mis antepasados.
—No me hagas perder mi tiempo, Non.
—No lo hago. Eres producto de una inseminación artificial, Krypton necesitaba un salvador. Rao se compadeció y nos envió a su única hija.
—Veo que eres todo un religioso.
—Es real, Kaur. Por algo fuiste modificada genéticamente en la Galaxia Espiral ESO 269-57.
—Veo que tus espías te informaron bien—dije sin preámbulo.
—No, no fueron ellos, Kaur. Yo organicé tu escape. Si fuera por tu madre, Alura, tu jamás hubieras venido al mundo en forma humana. Para ella no eras nadie.
—Hace una semana aún creía que mi madre era Astra, y estaba avergonzada de que tú fueras mi padre. ¿Qué crees? Sigue igual, para mí no existes—dije fría.
—¿Les has dicho la verdad a Kara y Kal-El? ¿O quieres que lo haga por ti?
—Una palabra, Non; una palabra y finalmente lograrás ver a Rao—dije encendiendo mis ojos y haciendo brotar fuego de mis manos.
—¡Karen!—dijo Diana entrando en la habitación.
—¡Oh, llego la Mujer Maravilla!—dijo Non en tono de burla.
—Estás advertido—dije para luego retirarme se la celda. Diana me siguió.
—Por Zeus, ¿qué acaba de pasar? ¿Y desde cuando estás despierta?
—Una charla amistosa entre padre e hija; y recién desperté. Necesito golpear a alguien, dime dónde está Rama Khan.
—En el centro, sígueme—dijo Diana.

Volamos hasta el centro de la ciudad, era un desastre. Vi como Barry y Oliver ayudaban a las personas a buscar refugio y a Kara y J'onn están tratando de detener a Rama Khan. No vi a Bruce por ningún lado.

—Ayudaré a los civiles, sé que puedes con él, Steel—dijo Diana para cambiar la dirección de su vuelo, vi como el transportador de Bruce se había visible.

Aterricé en medio del combate creando una ola de aire tan grande que Rama Khan, Kara y J'onn salieron disparados en diferentes direcciones.

—¡Hey, calvito! ¿Ya calentaste? Porque ahora viene el verdadero baile—dije gritando para que él me escuchará.
—Kaur—dijo apareciendo frente a mi. —Al fin una oponente digna.
—Bájate de esa nube, anciano—dije aplaudiendo tan fuerte que lo dejé aturdido por unos segundos, el tiempo necesario para lanzar una ola de tierra sobre su cabeza. Él quedó sumergido, pero salió a los pocos segundos.
—No sabía que la hija de Rao tuviera poderes de este estilo—dijo lanzando lava sobre mi, la logré dominar, mi cabello y puños empezaron a arder y todo el fuego fue regresado a su dueño.
—No sabes nada de mí—dije creando puños de tierra, más parecidos al cemento y así golpearlo. 

Lo golpeaba con agua, tierra, aire y fuego; lanzaba mis rayos más poderosos y creaba las tormentas más fuertes, pero él seguía en pie. Nunca había peleado con alguien casi igual de poderoso que yo. Con la ayuda de Kara y Diana logramos quitar su báculo, dejándolo sin poder alguno. Cree un campo de fuerza alrededor de su cuerpo y comencé a aturdirlo mentalmente, sin contar el huracán de elementos que estaba adentro del campo, éramos él y yo.

—¡Steel, detente!—ordeno Oliver.
—¡Steel, no lo hagas!—grito J'onn.
—Debe pagar por sus crímenes—dije comenzando a hacer crecer una llama de fuego.
—No eres igual que él—dijo Bruce refiriéndose a Non. —No dejes que tus emociones te dominen—recordé los entrenamientos, la casa de campo, recordé que soy amada por mis amigos y familia.

Las palabras de Bruce sonaban en mi cabeza. Comencé disipar las llamas; todo mi odio y miedo estaban concentrados en ellas. Rama Khan había perdido el conocimiento. Finalmente, logré apagar el fuego en mí.

—Lo llevaré con las amazonas, no podrá escapar de ahí—dijo Diana.
—Necesitas transporte—dijo Cisco apareciendo vestido como Vibe. Y se fue con Diana y Rama Khan por el mismo lugar por donde entró.
—Lo pude haber matado—dije sin aliento, Bruce colocó su mano en mi hombro.
—Lo sé, pero no lo hiciste—dijo él, su voz me transmitía orgullo.
—¿Kar, estás bien?—dijo Kara abrazándome preocupada.
—No, no lo estoy—dije con un hilo de voz.
—¿Qué puedo hacer?—dijo Kara pasando mi mechón detrás de la oreja.
—Merecen saber la verdad, ya no puedo ocultarlo—dije conteniendo el aliento.
—Si es difícil contarla, puedo decirla por ti—dijo J'onn poniendo sus ojos rojos.
—No, deben enterarse por mi boca—dije secando mis lágrimas.
—Vamos a la DEO—dijo Oliver.
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¡Hola! Muchísimas gracias por el apoyo que le han dado a las novelas. Tengo muchas ideas para la novela, y estoy pensando en hacer una tercera para que no queden tan largas, ¿qué opinan ustedes? Los leo. Y nuevamente, muchísimas gracias, les mando un abrazo ❤️

Las últimas hijas de Krypton: La favorita de Rao. [P.2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora