☪🌨️;; 𝙄𝙡𝙪𝙨𝙤

1.9K 235 14
                                    

𝑳

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝑳.𝑴.𝑯

Me encontraba caminando por los pasillos del instituto, no tenía idea de donde se encontraba la cafetería y moría de hambre. Lastimosamente antes de poder preguntarle a alguien todos se alejaron de mí.

Bastante triste la verdad.

Me sentía como si fuese una plaga o bueno, así me hacían sentir. Llegué hasta el patio por lo que di media vuelta y tomé otro pasillo, esperaba encontrar la cafetería antes de entrar nuevamente a clases, no soportaría tener hambre en inglés.

Observé como los pasillos estaban en su mayoría vacíos por que no me preocupe de tener que salir huyendo de cualquier alfa que se me acercará, si, tenía que trabajar en no comparar a los alfas pero no era fácil, ni siquiera con JiSung quien cada vez que sonreía me hacía sentir algo extraño en mi estómago.

De solo imaginar su tierna sonrisa siento que moriré.

¿Qué estaba mal conmigo?

Seguramente sería el hambre, sip, era solamente hambre, suspiré frustrado cuando en vez de llegar a la cafetería llegué a los baños, quise pucherear y simplemente esconderme bajo un árbol pero no, SeungMin debería estarme esperando.

Sentí que alguien tocó mi hombro por lo que volteé rápidamente, el olor a alfa invadió mis fosas nasales por lo que retrocedí bastante, el chico de cabello rubio que acosaba a SeungMin se encontraba allí mirándome extrañado.

– Y-Yo uhm... —observé como rascó su sien incómodo. — Q-Quería preguntarte si sabías donde estaba SeungMin.

Retrocedí un poco cuando el avanzó hacía mi, mordí mi labio inferior sintiendo mareo, demonios, no ahora, negué con mi cabeza apretando mi suéter con nerviosismo, noté como en los ojos del chico se notaba su tristeza ante mi respuesta.

— ¿P-Podrí-a-as... —Me mordí la lengua y una bofetada mental para poder hablar correctamente. — ¿M-Me ayudarías a llegar a la c-cafetería? –Logré preguntar, para mi suerte el chico asintió por lo que se dió media vuelta y con su cabeza me indicó que le siguiera.

Lo hice, pero dejando una segura distancia, aunque su olor siguiese entrando en mis fosas nasales no me llegaba a inquietar al punto de querer vomitar por lo que lo seguí confiando en que me guiaría, por suerte fue así.

— Es aquí, ¿Estás bien? —Preguntó el alfa al ver como seguía inquieto ante su presencia.

— S-Si, gracias... —Me incliné un poco. —¿Por qué quieres encontrar a SeungMin? él dijo que no quería hablar contigo. —Hablé un poco inseguro.

— Oh... Solo quiero arreglar las cosas pero su omega está muy resentido conmigo —Hizo un puchero con sus labios, arqueé una de mis cejas al ver aquello.

«¿No se supone que los alfas no debían hacer eso?»

— Ya veo, te agradezco que me hayas guiado aquí y-y bueno, dale un tiempo a Min, seguro después te deja hablar —Intenté subir los ánimos del chico, creo que funciono pues me regaló una tímida sonrisa.

El alfa se despidió y se fue por donde venimos, en cambio yo me dirigí a pedir algo a la cafetería. Cuando tuve mi malteada de fresa en manos comencé a buscar a SeungMin poniéndome de puntitas, por fin lo divisé en las últimas mesas, me acerqué lo más rápido que pude a él.

— ¿SeungMin?—Pregunté al verlo tan callado, su comida también estaba intacta.

Se sobresaltó haciéndome quedar más confundido, algo andaba mal con él, me senté en frente suyo y cuando observé su rostro me atragante con la malteada.

— ¿Qué te pasó? —Pregunté acercándome a él para así poder tocar su rostro pues, su labio inferior estaba roto y un moretón yacía en su mejilla.

— Oh, solo me cai de la escalera —Me respondió con una sonrisa comenzando a comer por fin.

— ¿Tu crees qué yo naci ayer? —Pregunté incrédulo ante su respuesta.

Él me miro con nerviosismo a lo que me mantuve lo más serio que pude, suspiró y jugó con sus dedos encima de la mesa.

— S-Solo... Un alfa se molestó conmigo y bueno... —Señaló su rostro con una sonrisa, se notaba que estaba avergonzado, pues a pesar de lo mal que tratasen a los omegas hombres, SeungMin sabía que era una persona que cuidaba mucho su imagen.

Verlo así dolía.

— ¿Quién fue? —pregunté en un suave gruñido, sabía que no podría hacer mucho contra el alfa, pues mis miedos me detenían pero por lo menos podría avisarle a alguien y eso era mejor que quedarse callado, ¿No?

— No te diré Hyung, no quiero meterte en problemas, además ahora estoy bien —Siguió comiendo dando por finalizado el tema, lo miré con reproche pero él solo levantó sus hombros con una sonrisa.

Negué con mi cabeza y suspiré. — Ese alfa te estaba buscando, ¿No le quieres ver?

— Ah... —Su sonrisa desapareció al instante cuando supo de qué hablaba. — No, él me lastimo. Hyung, probablemente usted no lo sepa pero cuando un omega encuentra a su alfa y este comienza a cortejarlo es lo mejor del mundo —Dijo mirando fijamente a la mesa.

— Pero cuando el alfa... engaña a ese omega... el omega se siente insuficiente, herido, triste. —Realizó un leve puchero pero siguió hablando. — La relación no vuelve a ser lo mismo, hay desconfianza e inseguridad, con el tiempo se va volviendo algo tóxico y no... no es lo que busco.

Asentí aún si no comprendía lo que quería decirme, ¿Tan fuerte era qué tu pareja te engañara? Bueno, no lo sabría, nunca había tenido pareja y por mi estado mental no creo que lo tenga pero en definitiva si SeungMin se sentía de esa manera debía ser una horrible experiencia.

— Pero SeungMin —Llamé su atención mientras revolvía mi malteada. — ¿Por qué sentirse insuficiente si eres una belleza? —pregunté ahora mirándole con una sonrisa.

Sus ojos brillaron y su rostro se puso completamente rojo.

— ¡Exacto! ¡Es estúpido! —Río echándose para atrás. SeungMin terminó de reír y después de comer siguió hablando. —Por cierto Hyung, ¿Te has enamorado alguna vez? —Preguntó.

Pensé un poco antes de contestar, si bien mi vida se había basado en estar encerrado y "complacer" a otros nunca me había enamorado, inflé mi mejilla y arrugué mi nariz intentando recordar lo bueno, mi boca se abrió y sonreí un poco.

— Pues, no sé si enamorar, pero cuando era niño un chico me empujó en el columpio, cuando le miré y este sonrió creo que sentí como mi corazón salía de su lugar —Reí ante el tierno recuerdo.

— ¿Oh? ¿Y sucedió algo? —Preguntó tomando de su bebida mirándome con atención.

— Claro que no, éramos niños y además de eso mi padre llegó y... me alejó de allí —Sonreí aún si el recuerdo de como todo empezó a irse cuesta abajo se sentía tan vivo que aterraba.

— Que lastima, hubiese sido un lindo amor infantil —Murmuró y asentí de acuerdo.

Si tan solo hubiese tenido la oportunidad...

Si tan solo hubiese tenido la oportunidad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ʀᴜᴍᴘɪᴛᴜʀ / ᚒ໑᮫۫ຳེ᳕ʜᴀɴᴋɴᴏᴡ༣᮫ࣤᤳᚒ  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora