IX

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La noche cayó rápidamente, en un cuarto oscuro en donde corría la brisa que ingresaba por la ventana. Se encontraba la joven castaña tumbada en la cama intentando conciliar el sueño, pero era muy difícil con los ruidos que venían de la habitación de Thomas, había venido otra chica después de la que ella vio al llegar de la universidad, los gemidos y gruñidos provenientes de la habitación ajena, inundaban los oídos de Jessamine que, además de sentirte incómoda algo dentro de ella le molestaba.

Dejo escapar un suspiro mientras tomaba una almohada y se tapaba la cara con ella, dejo escapar un gruñido de frustración, el idiota traía a mujeres todos los días siendo que ella estaba ahí, le parecía una falta de respeto, pero al mismo tiempo pensaba que ella no tenía por qué interesarse en eso.

Se levantó despacio de la cama y salió de su cuarto, bajo las escaleras y camino por toda la casa, no sabía que hacer y no tenía sueño. Se acercó a un gran ventanal que había cerca de la puerta y observó todo atentamente, lo pensó dos veces para salir despacio por la puerta sin hacer ruido, comenzó a caminar y rápidamente sintió el frío del césped sobre sus pies descalzos, se río de ella misma al ver cómo se encontraba, tenía un short de pijama, una camiseta y se encontraba descalza. Camino con cuidado hacia el establo que hace días tenía en vista, se encontraba lleno de caballos, no podía explicar cuántos, incluso eran más de los que había en su casa, siendo que su padre trabajaba con los caballos. Camino lentamente entre ellos y los observaba atentamente. Se paró en seco al llegar al que le interesaba, era el caballo negro que conoció cuando vino a esta casa por primera vez, el mismo que siempre le recordaba a Colly, se notaba que era un caballo joven y por lo que le había dicho Thomas, todavía no estaba domado.

Hola pequeño.-murmuró la joven con voz suave, no quería ponerlo nervioso.- ¿Me recuerdas?-susurró esta vez mientras lentamente estiraba una mano para poder acariciar la cabeza del caballo.-

Si bien este se corrió para atrás y se movió algo nervioso, se dejó tocar al tacto de la joven.

Eres un buen muchacho.-sonrió mientras seguía acariciandolo.- Tengo una idea.-dijo divertida mientras iba hacia donde se encontraban las sillas para montar, tomó una y volvió hacia el caballo.- Pero debes ayudarme, esto es nuevo para mi.

Aunque suene raro, era la primera vez que iba a estar con un caballo sin domar, y era la primera vez desde que murió Colly que ella iba a montar otro caballo, aunque también suene loco, ella sentía en parte como que era una traición a su caballo. Pero en este caballo podía ver a su Colly.

Seguro nos vamos a meter en problemas.-habló nuevamente mientras abría la puerta del corral en donde estaba.- No me lastimes, no te haré daño.-dijo algo nerviosa mientras lentamente ponía la silla de montar sobre el lomo del caballo.- Buen chico.- dijo terminando de ajustar la misma.-

Si bien el caballo a veces retrocedía y bufaba, seguía a la joven a donde lo estaba llevando, la pista que había aquí era el triple que la que ella tenía en su casa, estaba impresionada.

Quien diría que intentaría montar a un caballo salvaje en pijama y descalza.-dijó riendo con ella misma.-

Lo guio hasta la pista y lo acerco a las barandas, se trepó de las barandas y con esfuerzo logró subirse al caballo, el cual se movió inquieto al sentir como lo montaban, relincho un poco pero Jessamine logró sujetarse y tranquilizar al caballo con caricias en su cabeza.

Mi cuerpo me pasará factura de esto.-dijó al recordar como se encontraba su cuerpo debido a la golpiza que le habían dado.-

Tomo las riendas para guiar al caballo y tomó una gran bocanada de aire, jalo un poco de estas para que el caballo comience a caminar, lo hizo, y lo hacía, pero cada tanto se movía nuevamente inquieto como intentando tirarla. No le costaba mucho tranquilizarlo cuando hacía eso, luego de un par de vueltas caminando, logró hacer que el caballo ahora esté más tranquilo, ahora se encontraba galopando a una velocidad considerable, ya casi no intentaba tirar a Jessamine de su lomo, eso era un gran paso para un caballo que no es dócil.

Las costillas de la joven comenzaron a doler por lo que decidió parar, además de que eran altas horas de la madrugada y tenía que ir a la universidad mañana.
Saco al caballo de la pista aún subida a su lomo, al llegar a la entrada del establo, se bajó con cuidado y lo entro, le sacó la silla y la dejó en su lugar, se despidió de él y salió del establo rumbo a la casa otra vez.

Al entrar todas las luces estaban apagadas, le pareció bastante raro, estaban prendidas cuando ella salió de la casa hace no más de una hora. Lo malo de no ser su casa es que no sabia donde estaba el interruptor de la luz y realmente no se veía nada. Caminaba con cuidado mientras se iba agarrando de las paredes, caminaba lentamente con cuidado de no tropezarse con nada.

Cuando imaginaba que estaba llegando a la escalera, sintió como la tomaban fuerte del brazo y la pegaban fuerte contra la pared mientras que un cuerpo del doble de su tamaño se pegaba al de ella, se alarmó y tenía ganas de gritar hasta que un olor a tabaco y a Whisky se apoderó de sus fosas nasales. Era el.

Tendrías que tener cuidado con andar a la madrugada paseando, podría confundirte y terminar matándote.-dijó con voz ronca Thomas contra su oreja.-

Lo....lo siento.-tartamudeo al sentir la respiración del contrario sobre su oreja y cuello.- No podía dormir.-explicó intentando sonar más segura ahora.-

Lo se, te estuve observando por la ventana como montabas aquel caballo.-dijó sin despegarse un solo centímetro de ella.-

También lo siento por e....-no pudo terminar la oración que sintió como Thomas la tomaba de la nuca y pegaba salvajemente sus labios contra los de ella.-

La joven se sobresaltó y se quedo petrificada al sentir los labios del mayor contra los suyos, Thomas sin pedir permiso introducido su lengua dentro de la boca de la joven, esta respondió el beso torpemente. Thomas la apretaba tanto contra su cuerpo como se podía, la tomo de la cintura y la subió arriba de al haciendo que ella entrelazara sus piernas en sus caderas. Camino sin cortar el beso hacia el sillón que se encontraba en la sala, dejo a la joven sobre el sillón y se subió arriba de ella sin dejar de besarla, abandono su boca para atacar son la misma violencia el cuello ajeno.

Thomas....¿que haces?-preguntó la joven con la respiración entrecortada y con su cara completamente roja.-

No obtuvo respuesta por parte del contrario , solo sintió como este metía la mano debajo de su camiseta mientras acariciaba su estomago. La joven dejó escapar un gemido, el tacto de sus grandes manos en su piel sumándose a los besos humedos que dejaba sobre su cuello la estaban volviendo loca.

Thomas se separo de ella luego de unos segundos para observarla atentamente, la joven podía distinguir el rostro de Thomas en la oscuridad gracias a la luz de la luna que ingresaba por la ventana de la casa. El mayor se acercó nuevamente hacia el rostro de la joven, paso su lengua por los labios ajenos y la observo por unos segundos más, se acercó a su oreja.

Así sientes lo que es que te dejen con las ganas.-susurró Thomas en tono divertido mientras salía de arriba de la joven y se perdió en la oscuridad sin decir más.-

La joven se quedó dura al oír eso, sabía a lo que se refería, la vez que ella lo provoco estando ebria y el no accedió a estar con ella por estar ebria, vio como se perdía en la oscuridad y se quedo acostada en el sillón mirando el techo. No podía creer que había caído en su juego y mucho menos que la haya humillado de esa forma, era una estúpida venganza.

Después de todo por que se fijaría en ti, eres una niña Jessamine, el es un hombre grande.-se dijo a si misma mientras se sentaba en el sillón.- Idiota.

Ahora estaba furiosa, la había humillado y había jugado con ella, ese hombre definitivamente era un idiota, ahora sabía que tendría que alejarse de él sea como sea.

《Born To Die》 Thomas ShelbyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora