Ayúdenme, estoy atrapada en un fanfic de Hogwarts Mystery

Capítulo 8

Summary:

"Hazte a un lado, Jacob. Disfruta tu último capítulo siendo el centro de atención, esta historia se trata sobre mí y yo pienso volver a hacerla mía."

Chapter Text

—¡Baile de máscaras! — Exclamó su hermana; dio un par de vueltas en el lugar y su vestido corto se levantó con gracia, tuvo que desviar la mirada para no ver más piel de la necesaria. No esperaba que, al abrir la puerta de su habitación se encontraría con un torbellino de energía y sonrisas; ella se abalanzó sobre él para abrazarlo, colocándole la elegante máscara, sus narices se rosaron mientras su hermana anudaba el nudo del antifaz. — Perfecto, seremos la pareja más llamativa y mejor vestida.

—Creo que sólo tú serás la mejor vestida. — Apenas logró conseguir una camisa y una corbata viejas, predijo que iba a desentonar con el ambiente de los alumnos más jóvenes. No quería arruinar su noche, pero le era imposible sacar de sus cabezas las preocupaciones que le invadían respecto a "El Autor". — Entonces... ¿La sala de artefactos?

—Por supuesto, se puede convertir en lo que queramos y es ideal para pasarla bien.

—Sé cómo funciona la sala de artefactos, hermanita. — Su risa era contagiosa, no recordaba la última vez que la escuchó carcajearse de esa manera; sus dientes blancos resaltaban en contraste con su elegante antifaz. — No quiero que te enojes, ¿podemos hablar sobre "El Autor"?

—¿Por qué?

—Tengo mis dudas, quisiera aprender un poco más. — Confesó con sinceridad. — Sé que estuviste más expuesta que yo, ¿sientes algo cuando te controla? ¿Alguna señal?

—En un principio sentí como si me sumergiera en una neblina, las sensaciones siempre cambian. Pero logró recuperar la consciencia si me esfuerzo lo suficiente.

—Una neblina... — Repitió pensativo.

—Esta noche tendrás que olvidarte de eso, estamos aquí para divertirnos. — Estaban frente a la sala de artefactos, su hermana se acercó para acomodar su decrepita corbata. Deseó que ella siempre estuviese cuidándolo, que no se alejara más de él.

—Quiero pasarla bien tanto como tú, sólo no quiero verte enloquecer y estar dispuesta a casarte con el primer chico que te cante una canción de amor.

—Eso sólo pasó una vez.

—Y fue una experiencia perturbadora, no sé qué habría pasado si te hubiese dejado ahí más tiempo.

—Parece que los roles se invirtieron. — Ella le ofreció una sonrisa. No podía negarlo, siempre fue ella la que se preocupaba por si algo malo le ocurría a su desastroso hermano.

—Por ahora, cuando esto termine te sacaré de tus casillas por todos los problemas en los que pienso meterme.

La fuerte música se hizo presente, creyó que se quedaría sordo por el volumen; su hermana tomó su mano, llevándolo entre la multitud de personas para buscar a sus amigos. La sensación de sentirse nervioso ante un ambiente desconocido se le hizo extraña, bajo presión sus orejas se volvían rojas y MC lo notaría; intentó tranquilizarse saludando a los compañeros de su hermana. Evitó el contacto visual con ellos, se le complicaría más de lo pensando relajarse; ¿por qué todos estaban tan bien vestidos mientras que él parecía un ermitaño? No era tiempo para salir de la escena, sino para aclarar su mente y divertirse.

Uno de los chicos, ¿Barnaby? Le pasó un vaso con alcohol a MC, ella iba a tomarlo de no ser porque intervino justo a tiempo. Si algo no permitiría esa noche sería ver a su pequeña hermana tomar alcohol por primera vez, la pobre chica no sabría controlar los efectos de la borrachera y podría hacer el ridículo.