Ayúdenme, estoy atrapada en un fanfic de Hogwarts Mystery

Capítulo 12

Summary:

Huyen como si alguien los persiguiera, recorrer la carretera resulta ser más divertido de lo que planearon.
El problema es el destino, la llegada. El viaje tiene que acabar en algún momento y no será algo agradable.

Chapter Text

Los Weasley disfrutaron de sobrevolar a gran velocidad en el cielo sabiendo que ninguna carta aulladora podría llegar hasta ellos para explotar en sus caras, cierto pensamiento que compartían con Barnaby.

—Si esto es real nuestros padres nos van a asesinar. —Resopló Jacob. Miró por el espejo retrovisor a los estudiantes que parecían ocupados en su búsqueda de provisiones. — Aunque es difícil decirle que no a la aventura.

—¡Viaje en coche! — Festejó Bill sin levantar la vista de su mapa.

Su viaje se convirtió en algo fluido, el viento era suave y disfrutaban elevarse por sobre los demás. Por supuesto que pronto deberían bajar para continuar su trayecto, precisamente para recargar gasolina y atender cuestiones de higiene.

A unos kilómetros del pueblo muggle más cercano, decidieron que viajarían por tierra. Félix conducía por encima del límite de velocidad, despreocupado por si algún policía decidía detenerlos.

Ben y Rowan demostraron su liderazgo al repartir las funciones de cada uno.

Charlie, quien descansaba en el fondo de su expandido auto, se convirtió en el encargado del abastecimiento. Con voz perezosa se puso a repasar cada uno de los elementos que sus amigos trajeron en la prisa del momento: La reserva de caramelos de Tonks; cinco botellas de vodka que Jae guardó para el final de la fiesta; el mapa que Bill robó de la biblioteca y los siguientes artículos que metieron en el bolso expansivo: útiles escolares, libros de hechizos para recompensar el tiempo que perderían al no ir a clases, tampones, una cantidad especial de gafas de sol, quinientos dólares muggles y ropa adecuada para la aventura.

—¿El dinero será suficiente? — Preguntó Penny.

—Por supuesto que sí. — Respondió Jae.

—¿De dónde sacaste tanto dinero? — Inquirió MC con una sonrisa traviesa.

—Puedo darte la respuesta legal o puedo decirte la verdad. — Dijo el contrabandista.

—Mejor hay que dejarlo así.

—Pararemos un par de veces para recargar gasolina. — Anunció Murphy, anotando y haciendo cálculos en una pequeña libreta. — Paradas cortas para no llamar la atención, ¿les parece bien hacer todo en diez minutos? Si queremos llegar al refugio de Bill tendremos que acelerar.

—Vamos a buena velocidad. — Dijo Félix. — La idea no es matarnos en el camino.

A pesar de sus propias palabras, Rosier decide que es una buena idea acelerar un poco más. Pisa a fondo el acelerador, ese Ford Anglia alterado puede resistir un poco de fuerza. Su papel consiste en algo tan simple como conducir e ignorar las probabilidades de Murphy.

A tan solo una hora de viaje surge la frase que todos temían.

—Necesito ir al baño. — Dijo Tulip.

—Irás dentro de dos horas más. — Murphy no parecía percibir la urgencia en la voz de la chica.

—Oh, ¿dos horas? Seguro aguantaré. — Respondió la pelirroja con cierto tono de sarcasmo en su voz. — Sólo pensaré en... Cascadas, ríos, y la playa.

Aproximadamente quince minutos después, Karasu vuelve a atacar.

—¿Ya pasaron dos horas?

—Aguanta, no es tan complicado. — Contestó Barnaby. Su cabeza estaba apoyada en el hombro de Charlie, ambos parecían entretenidos con un libro de criaturas mágicas.