algo más que un grammy.

Capítulo XIII

18 de marzo del 2020

Billie

- ¿Hola?

- Acabo de recibir una llamada bastante intrigante de parte de nuestra madre.

- ¿Finneas? - Ariana y Billie compartieron una mirada de confusión.

- ¿Acaso compartes madre con otra persona? - Rio agriamente. - En fin, también me comentó acerca de ciertas sospechas que tiene acerca de Ariana y de ti.

- ¿Qué tipo de sospechas? - Al decir esto, Ariana le pidió que pusiera la llamada en altavoz, pero se negó, no podía hacer eso, su hermano era especialista en decir el peor tipo de cosas.

Como si fuera lo más obvio del mundo, Finneas respondió. - Tú sabes qué tipo de sospechas. ¿Sabes lo que algo así le haría a la prensa? Todos se volverían locos. - A Billie le sorprendía la emoción con la que su hermano hablaba, como si no existiera un problema con lo que estaba diciendo.

- Espero que no estés tratando de amenazarme, ya sabemos cómo terminó la última vez. – Un veneno impropio de ella se adueñó de sus cuerdas vocales.

- Dime, Billie, ¿cuáles crees que son mis planes? – Cuestionó, con engreimiento en su voz. – Porque esta vez va a ser muy diferente, no tengo nada que perder.

- Dame un minuto. - Se separó del regazo de Ariana y a pesar de los gestos de la misma para que se quedara, Billie le explicó con las manos de que regresaría en un momento, y yendo lo más rápido que pudo, llegó a la terraza del edificio. - Antes de nada, creo que deberías verificar mejor la información que recibes.

- ¿Cómo no podría confiar en mi propia madre? A ti te miente muy seguido, es verdad, pero conmigo es diferente.

- Aunque seas su niño dorado y su intención no fuera mentirte, los dos sabemos que mi mamá es el tipo de persona que asume cosas por asumirlas, casi como tú, ahora que lo pienso.

- Lo que mamá dice que estás haciendo con esa chica, tiene bastante sentido, así que no necesito dudarlo demasiado. - Burlonamente continuó. - Y aunque estuviéramos equivocados, algo así sería tan característico de alguien como tú. Estoy seguro de que te diste cuenta de que ningún hombre te vería como algo más que un simple juguete, así que te pareció que podrías llegar a tener un poco más de suerte con mujeres. Patético, si me lo preguntas.

- ¿Esa es la impresión que doy según tú? ¿En el caso de ser lesbiana, crees que sería por eso? ¿De verdad? - Billie rio secamente - Lamentable, si me lo preguntas.

- Cien por ciento. Eres ese tipo de persona que necesita todo el amor que pueda conseguir para no sentirse como un estorbo. Eres un parásito que tiene que vivir a cuesta del resto para poder sobrevivir.

- No lo soy, Finneas, te equivocas, no soy nada de lo que estás diciendo.

- No me hagas reír. Te conozco mejor de lo que te conoces a ti misma.

- Eso era lo que yo pensaba acerca de ti, hasta que engañaste a Claudia. Supongo que no nos conocemos tan bien como creíamos.

- ¿Sabes qué? Te voy a dar un punto. - Billie casi podía sentir la sonrisa arrogante en la cara de su hermano. - Tengo que admitir que fue bastante sorprendente enterarme de que no te tomó ni un solo mes empezar a escribir canciones con otras personas.

Billie emitió un sonido de tristeza condescendiente. - Espero que no sobrevaloraras tu importancia en mi vida y en mi carrera.

- Sé a qué intentas jugar, pero quiero que sepas que por mucho que estés intentando engañarte a ti misma, sin la ayuda de Ariana, toda la música que saques sola de hoy en adelante será un chiste comparado a la que hacíamos juntos, o más bien, a lo que yo hacía y tú sólo te dabas el trabajo de poner tu nombre.