Tierra y otros elementos [Kookmin]

35 ~Resistencia

Los dolores y golpes que comenzaban a sentir en su cuerpo eran extremadamente repentinos y duros, por lo que los últimos pasos antes de llegar a la sala de terapia intensiva habían sido casi a rastras y con ayuda de Hoseok y Jessica, quien los acompañaba en lugar de Namjoon y Seokjin. A pedido de Hoseok, y viendo que la situación que se avecinaba podía llegar a ser peor que todas la anteriores, ambos elementales se quedaron fuera y con toda su atención puesta en el morado, siendo estos los encargados de comunicarle al doctor todo golpe o ataque que recibiera el elemental fuera. Por su parte, Yoongi y Taehyung también decidieron salir junto a sus compañeros de pelotón con la excusa de que entre más ojos pudiesen observar la situación, mejor sería para Jungkook y su combate. Teniendo a los cuatro elementales con los ojos puestos en el horizonte, el morado podía esquivar mejor los ataques y responder efectivamente a ellos.

-Hoseok, por favor, explícame qué está pasando- rogó Jessica por tercera vez casi consecutiva mientras conectaba a Jimin a la máquina más grande.

La enfermera había sido traída de un tirón en su muñeca y con una sola orden que cumplir: ayudar a Hoseok cada que este se lo pidiese, por lo que las explicaciones habían quedado de lado para ella. La joven intentaba sacar conclusiones y conjeturas por todo lo que llegaba a oír de parte del doctor cada que hablaba por el intercomunicador, pero ninguna de sus frases sueltas había sido suficiente como para que lograra armas una hipótesis que sonara coherente en tu cabeza.

-No hay nada que explicar, Jessica- esta vez, el profesional conectó la intravenosa a la parte superior de la mano derecha del maligno, provocándole a este una nueva mueca de dolor -Solo mantente alerta a lo que te diga o lo que pueda a llegar a decir Jimin y atiéndelo.

-Estoy exhausto- susurró el ex entrenador mientras intentaba no moverse tanto sobre la camilla.

-Jungkook está igual- comentó Namjoon, quien había decidido (a pesar de su cocida y expuesta herida) mantenerse en el aire y, por ende, cerca del morado -Jungkook no para de moverse de una punta a la otra ni de utilizar sus habilidades.

-Suero- ordenó el mayor a lo que Jessica se movió en busca de lo pedido.

Por fuera, y ya totalmente cansado, Jungkook saltaba, corría y se movía con velocidad y destreza por sobre el domo y el suelo, haciendo que el viento lo elevara y lo dejara caer con exactitud cuántos malignos le queda por abatir, pero quería convencerse de que serían pocos; la cantidad de enemigos que se agolpaban y caían rendidos frente a él era realmente alta, por lo que no podían quedar muchos más.

-¡Agh!- gritó Jimin al mismo tiempo que lo hizo el morado por el intercomunicador.

-Golpeó de lleno contra el domo, una piedra le fracturó la mano- informaron.

-Morfina, 10 miligramos- la enfermera se acercó a la aguja del menor y le suministró la dosis indicada.

El ex entrenador quiso mover su mano derecha pero el dolor se lo impidió totalmente, dejándolo completamente inmóvil y con el ceño fruncido por todo el dolor que su cuerpo intentaba resistir. Era evidente que su organismo no estaba ni jamás estaría listo para semejante actividad física y violencia como la que estaba recibiendo el morado fuera, pero aún así intentaba dar lo mejor de sí y resistir hasta el dolor más agudo, consciente de que si caía, Jungkook lo haría con él... y eso era lo último que permitiría.

-Me falta el aire- el maligno respiraba con dificultad, casi al borde del agotamiento, por lo que Hoseok se movió con velocidad por la habitación y volvió a conectar al contrario a la máquina de oxígeno, causándole molestia en la nariz ahora que estaba consciente y podía sentir los pequeños tubos que ingresaban por sus fosas nasales y le suministraban aire fresco.