El lienzo vibraba con delicadeza, a causa de los pequeños toques y sutiles pinceladas.
El pincel se dirigió hacia una tapa en la cual había poca agua. Con cuidado de no inundarlo, metió suavemente el pincel.
Su vista volvió a posarse en el manchado lienzo.
—Manché mucho ahí... —Pensó mordiendo su labio—. Y ahí hay poco sombreado —Suspiró calmado, agarrando un trozo de papel de cocina. Limpió con máximo cuidado el pincel, sin dañar los pelos—. Estoy usando el sintético Teijín... —Murmuró mirando el largo mango que tenía.Su vista se desvió hacia la paleta que tenía agarrada con su mano y su brazo.
Tomó con delicadeza un poco de color negro, manchando un hueco libre en ella. Después, tomó color blanco, muy poco; casi nada. Hizo una mezcla con el negro, quedando un negro ni tan oscuro ni tan claro.—Perfecto —Sonrió. Su vista se dirigió nuevamente hacia el manchado lienzo—. Un poco de sombreado por ahí y ya acabaría —Suspiró con una sonrisa y comenzó con las delicadas pinceladas.
Su mano se dirigía en la misma dirección. Daba pinceladas cortas, largas e inclusive; pequeños toques.
Agarró el pincel con la boca, de manera horizontal. Buscó otro pincel más fino y continuó su sombreado.—Usando este fino me vendrá mejor —Se hablaba así mismo—. Si mancho mucho por aquí quedaría muy cargado y tanto sombreado no es necesario —Agarró el color que estaba usando para las sombras y continuó con su trabajo.
Su vista de vez en cuando se desviaba al reloj de la pared.
—Me van a sobrar veinte minutos —Pensó mientras quitaba el primer pincel de su boca, colocándolo en la mesa.
Dio unos pequeños pasos hacia atrás, observando su obra.
—Terminado —Habló por primera vez en aquellas dos horas. Una sonrisa se formó en su rostro, se sentía orgulloso.
—¡Ya voy, Rintarou! —Habló la profesora con entusiasmo, dirigiéndose al lugar de Suna—. ¡Precioso como siempre! —Sonrió.
—Gracias, profe —La brindó una leve sonrisa—. Aunque mira... —Se acercó con el pincel—, aquí no sé si di el correcto tono.
La profesora observó el lienzo. Sus ojos se dirigían de un lado a otro velozmente, analizando cada pequeño detalle que Rintarou brindó a la obra.
Una sonrisa se formó en el rostro de la anciana mujer.—Tranquilo, solo te diría que intentes darle más luz... siempre das muchas sombras —La anciana profesora rió con delicadeza—. Por lo demás esta perfecto, tienes un diez —Lo miró sonriente.
—Otro diez más... —Sonrió—. Gracias profe.
—Recoge tu material y estate pendiente, voy a dar las pautas de un nuevo trabajo —Sonrió alejándose hasta la pizarra, escribiendo algunas cosas.
—Okey... —Murmuró y comenzó a recoger.
Rintarou se sentó en la silla, agarrando un trozo de papel de cocina. En el trozo de papel, derramó un líquido; aguarrás. El aguarrás es un aceite que se usa para disolver pintura y barniz. Por lo tanto, es recomendable para quitar la pintura sobrante de la paleta —cosa que está haciendo nuestro protagonista—.
—¡Atentos! —Habló la profesora—. Para la semana siguiente, quiero que hagáis otro cuadro —Comenzó explicando—. Esta vez, quiero que uséis la maravillosa mente de artistas que tenéis —Señaló a toda la clase, con una sonrisa—. ¡Sacar vuestra bella imaginación! —Rió leve—. Por lo tanto, tenéis la semana que viene entera para hacer este trabajo. Pero —hizo un leve inciso—, quiero que lo hagáis en casa. En clase no —Negó—. Vamos a empezar tema nuevo —Sonrió—. Bien, subiréis una foto en la tarea que pondré en el aula virtual —Señaló la pizarra digital, mostrando en qué sección se encontraba—. Como indica la tarea, tenéis hasta el domingo a las doce de la noche —Se sentó en su silla—. ¿Alguna duda? Sino... doy por finalizada ya la clase de hoy —Comenzó a guardar su propio material—. Habéis trabajado muy bien todos, sois un amor de niños —Rió leve.
Suna agarró su maletín, guardando las pinturas.
—"Amor de niños" —Rodó sus ojos—. Señora tenemos como veinte años o más —Cerró el maletín y se levantó, colgándose la mochila en el hombro.
—¡Pasar una buena mañana en el resto de clases! —Sonrió animadamente, viendo cómo sus alumnos se iban marchando.
Comenzó a caminar lejos de la enorme clase, dirigiéndose a la cafetería.
—Tengo hambre —Pensó.
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lienzo # osasuna
FanfictionDonde Suna se ha quedado sin lienzos y entra en crisis. i. modismos españoles ii. osamu miya x rintarou suna ;; universitarios iii. ¡no se permiten copias y/o adaptaciones!