Los Asuntos de Natsu y Juvia

Capítulo 10. El Cuarto de Baño

Después de aquel extraño comentario por parte de la maga de agua, los espías de la biblioteca comenzaron a murmurar, aunque fueron interrumpidos al oir el comentario de la rubia.

-Así que has enseñado a Juvia a usar magia de fuego, ¡qué interesante! Pensé que, al ser de magias opuestas, no podríais complementaros, la verdad.

-¿Enseñar a Jushi? -se sorprendió el mago de fuego- ¡Qué va! Yo también me sorprendí cuando dijo que me iba a cocinar algo rico y lo que me dió fue una llama dorada... -comentó con brillos en los ojos- Ne, Jushi... ¿me cocinas otra llamita? -pidió como si no hubiese roto un plato en su vida.

-¿Quién puede negarse a esa carita de niño bueno? -suspiró Juvia entrecerrando los ojos -Está bieeeeeeeeen... -se rindió la maga.

Acto seguido, alzó un brazo, su cuerpo brilló y en la palma de su mano apareció una pequeña llama de color dorado. Se acercó cautelosa a su compañero y éste la recibió con una enorme sonrisa.

-Tus llamas saben deliciosas Jushi -alabó Natsu tras, literalmente, engullir el fuego de su amiga.

Con esa ardiente comida, la sensación de resaca del dragon slayer de fuego desapareció, pero la mujer de la lluvia parecía aún tener indicios de estar algo afectada.

-Mooo... -se apretó y juntó las piernas- Juvia tiene que ir al baño... -comentó con un deje infantil en su voz.

-Creo que al fondo de esta sala hay un cuarto de baño -informó Lucy.

-¿Quieres que te acompañe, Jushi? -se preocupó el Salamander viendo con la chica parecía tambalearse un poco.

-No, no hace falta Nashu –le sonrió- Juvia puede ir solita... -se marchó cual cervatillo con una sonrisa tonta en la cara.

Como la chica tardaba un rato, Lucy decidió entrar, eso sí, avisando primero que iba a adentrarse en el baño.

-¿Y bien, Luigi? ¿cómo está mi Jushi?

-¡¡¡Maldita sea, Natsu, es LUCY: LU-CY!!!

-Caray, sí que está de mal humor la rubia -susurró entre burlón y sarcástico Gray.

-Lucy-san... -le llamó la maga de agua, pareciera estar al borde del llanto.

-Tranquila Juvia, ya voy... -dijo un poco más calmada la maga celestial.

Natsu se impacientaba y, sin que Gray pudiera impedírselo mucho, abrió la puerta del cuarto de baño bruscamente. Provocando de este modo que Lucy cayera encima de Juvia y que ambas, por inercia de la caida y el golpe, juntaran sus labios.

El sonrojo de las chicas era tal, que apenas se dirigieron la palabra en lo que quedaba de tarde, tan solo se miraban de reojo y, cuando sus miradas se cruzaban, se sonrojaban nuevamente y dirigían sus ojos a otro sitio rápidamente. Poco importó el regaño del alquimista de hielo al Salamander...

-Esto sí que no me lo esperaba Jushi... si todavía estuviéramos cumpliendo el reto del matrimonio, estarías teniendo una aventura con mi amante... -comenzó a alucinar e imaginarse historias dramáticas como ocurrían en las novelas que leía de cuando en cuando.

-¿Eh? Espera... ¿tu amante? ¿qué? ¿yo? ¿en qué momento? ¿y por qué no me entero de nada? ¿qué está pasando?-se alteró Lucy.

En ese momento Juvia tuvo otra loca idea y se acercó abrazando por la espalda a la rubia, haciendo que se sobresaltara un poco más.

-Es que Nashu no dijo quién sería el amante de cada uno... y como llamas "princesa" a Gray... -ocultó su risa escondiendo el rostro tras el cuello de la maga celestial.

-¿Es una broma, no? -preguntó molesto el moreno.

-¿Ese reto no lo habíais acabado ya? -preguntó dudosa la maga celestial.

-Rayos, es cierto -sonrió la maga de agua con su rostro todavía pegado al cuerpo de Lucy- aunque a Juvia no le importaría repetir lo del baño...

-¿Eh? Ju-Juvia... eres mi amiga... mi compañera... te... te quiero mucho, pero... -empezó a hiperventilar la rubia- pero... no, creo... que tú y yo... quiero decir... que... -el nerviosismo apenas la dejaba pensar con claridad lo que quería decir- que tú y yo... no podemos... no sé... digo, no... no... yo... lo siento, pero... esto es muy complicado... difícil, porque no quiero hacerte llorar como Gray... pero... tengo... tengo que serte sincera...

-Ja, ja, ja, ja –la mujer de la lluvia soltaba una carcajada estruendosa mientras colocaba una mano en su boca, aunque no le sirvió de mucho- la cara de Lucy-san es tremenda, es maravillosa, te ves muy tierna así, ja, ja, ja, ja, eres increíble -terminó tratando de secar las lágrimas que salían de sus ojos provocadas por el terrible ataque de risa que estaba sufriendo.

-Joder Juvia, casi consigues que me de un ataque a mí también- respiró aliviado Gray.

-¿Oh? ¿y quién dice que no me haya dado a mí un ataque? -dijo estupefacto Natsu con los ojos completamente abiertos.

-Oh, vamos... -comentó burlesca y sensual el hada de agua- ¿Quiere hacer lo del baño con Lucy-san, Nashu?

-¿Con Luce? -su rotro seguía demostrando confusión- No, yo quería hacerlo contigo...