Un día de suerte. [SeokMuel]

15

Había llegado el lunes y eso significaba volver a las tontas clases.

Pasó el fin de semana en casa de Jaehyun junto a Jisung para llevar a cabo su plan de "conquista", le parecía muy cliché –y algo absurdo–, se había divertido los dos días con ambos.

Ahora llegaba a la escuela con un Jaehyun sonriente, no sabía como el mayor hacía para verse tan bien en cinco minutos, parecía un completo dios griego con los dos primeros botones del uniforme desabrochados, su cabello castaño bailando al ritmo del aire y un lindo brillo en sus ojos. Jisung se encontraba a su lado, con sus hebras azules totalmente desordenadas, las mejillas sonrojadas por el frío y un puchero mientras intentaba verse lo más despierto posible.

Caminó a paso lento hacia su casillero y miró al de su lado, el cual era de Lee Jeno, uno de los amigos de Jisung y Jaehyun, el mencionado le sonrió mostrando su linda eyesmile. —Buenos días, Sammy.

—Buenos días, Jeno.

—Jeno, ¿pensaste lo de ayer? —escuchó decir a Jisung detrás suyo, el pelinegro asintió. Hizo una mueca al no entender lo que hablaban— ¡Genial! ¡Eres el mejor, Jeno-ah!

—¿Pensar qué? ¿De qué hablan?

—Jenito será tu pretendiente falso. —contestó Jaehyun apenas llegando, el castaño menor lo miró con el ceño fruncido— Sé que quedamos en no dar celos, pero Jisung y yo lo pensamos mejor, creo que será divertido hacerlo.

Samuel negó. —Hyung, les dije que–

—Muy tarde, ahí viene SeokMin.

Y eso fue lo último que escuchó cuando de pronto, Jaehyun lo empujó hacia Jeno, quién atinó a tomarlo de la cintura antes de que cayera al suelo. El pelinegro volvió a sonreírle pero está vez, guiñándole un ojo, Samuel rió nervioso alejándose del más alto. —Sam, ¿estás libre hoy en la tarde?

Samuel sintió su mundo derrumbarse cuando escuchó a SeokMin ahí, frente a él, aclaró su garganta y quiso aceptar, pero al ver las señas tontas y exageradas que hacían el castaño y el peliazul, negó. —No, lo siento.

—¿Estarás ocupado? —preguntó levantado una ceja, el castaño asintió— ¿En qué? Di-Digo, si se puede saber, claro.

—Iré con Jeno hyung al parque.

SeokMin mordió su labio para no soltar alguna grosería hacia el pelinegro, este solo asintió un tanto confundido y tomó la mano de Samuel. El más pequeño se despidió para empezar a ser arrastrado por Jeno con Jisung y Jaehyun tras ellos, este último despidiéndose un tanto exagerado del castaño más alto.

—Yo digo que se la creyó.

—Ustedes son malos, pobre hyung. —rió Jeno soltando la mano de Samuel— Debo irme, nos vemos a las tres Sammy.

Samuel asintió cuando Jaehyun tomó el brazo del pelinegro. —¿Para dónde vas mocoso?

—¿A mi clase? —levantó una ceja confundido— ¿Por qué? ¿Necesitan algo más?

—No, pero sí. —Jisung y Jaehyun sonrieron cómplices, Jeno llevó su mirada hacia Samuel y este solo se encogió de hombros— ¿Te gusta Jaemin o RenJun?

Jeno rió nervioso. —¿Sería raro responder que me gustan los dos?

—¡Lo sabía! —exclamó Jaehyun haciendo un baile extraño— Felicidades, hacen bonito poliamir, ojalá su relación dure muchos años más.

—Gracias, supongo. —sonrió— Espera, ¿cómo sabes sobre nuestra relación?

—¡Ya es tarde para ir a clases, adiós! —el castaño mayor salió corriendo en dirección al gimnasio—

—¡Hyung, su salón está del otro lado!

Y así fue como Jaehyun paso corriendo al lado contrario al que iba, sin antes gritarle un gracias demasiado fuerte a Samuel.

—Lastima que lo guapo no le quita lo pendejo. —una cuarta voz se escuchó y los tres jóvenes casi mueren del susto— Buenos días, niños.

—Buenos días, JeongHan hyung. —musitaron los tres en coro, el mayor los miró con ternura y apretó las mejillas de cada uno—

—¿No deberían entrar a clases ya?

—¡Oh Dios, la tarea de matemáticas! —exclamó Jisung con terror—

—Park Jisung, ¿por qué no la hiciste?

—Luego de hacer el jueguito ese con Jaehyun me quedé dormido y la olvide, ¡debes salvarme, Samuel! —zarandeó al pobre castaño que seguía asintiendo frenéticamente, el mayor de los cuatro solo se dedicaba a reír junto al pelinegro— ¡No se rían que es importante!

—Santo Dios, ¿ya vieron la página del colegio?

—¿La original o la de chismes?

—La segunda. —el pelinegro mostró su celular— ¡La profesora Park y el profesor Kang terminaron!

JeongHan hizo un puchero. —¡Noooo! ¡Eran mi pareja ideal a seguir!

—Solo espero que los profesores Kim no piensen en terminar porque dejó de creer en el amor. —dijo el pollito dramatizando el momento— Tengo que copiar la tarea de matemáticas, ¡adiós Jeno, adiós Hannie hyung!

↓

—Bro, deja de aplastar la pobre lata.

SoonYoung tenía una mirada llena de miedo cuando SeokMin lo miró molesto, cosa que no era de siempre, el castaño siempre estaba feliz y soltando brillitos por dónde quiera que vaya, podían describir a Lee SeokMin como un sol que alegra los corazones de cualquier persona, enamora a cada chico o chica con su sonrisa y su energizante risa, era su naturaleza ser de aquella peculiar manera.

—¿Te pasa algo? Estás raro desde la mañana, y no me mires de esa manera si no quieres que tu brazo conozca las puntas de este tenedor. —escuchó a SeungKwan que se encontraba enmedio de los dos—

SeokMin dejó de aplastar la lata lanzándola lejos. —Creo que a Jeno le gusta Samuel.

El rubio se atragantó escupiendo su jugó para empezar a reír. —¿Qué tontería es esa?

—Me dijo que iba estar ocupado en la tarde porque iba ir con Jeno al parque. —dijo en un tono chillón— ¡Van a tener una cita!

El pelirrojo negó mientras comía su sandwich. —Tal vez solo es una salida de amigos y tú estás exagerando todo esto.

—¿¡Entonces como explican que lo haya tomado de la cintura en pleno pasillo!?

—Ah. —musitaron los dos chicos—

—¿Ah? ¡¿Solo van a decir un simple y tonto "ah"?! —lloriqueó viendo la mesa de los más pequeños, viendo como Jeno y Samuel reían juntos— Véanlos, le gusta Sam, además de que lo llama "Sammy", ¡le guiñó el ojo! Chicos, ¿Por qué no dicen algo?

—Deja de ser tan dramático, ya ni SeungKwan. —el mencionado le lanzó una papa directo a su rostro, el rubio simplemente rió burlón— Vamos a descubrir que sea traer Jeno con Samuel, de esos no hay problema, ¡pero ahora déjame comer mi almuerzo en paz!

SeokMin asintió feliz. —¿Dónde están los demás?

—No lo sé, JeongHan tenía reunión con los de la directiva, los demás quien sabe que estarán haciendo y Vernon viene hacia acá. —el pelirrojo señaló a un castaño que se acercaba hasta la mesa donde el trío se encontraba— ¡Ay! ¡Vernon viene hacia acá! ¡¿Me veo bien?! ¿¡No tengo nada en la cara!?

—Ustedes son un caso.