Trece

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Dos días después

Eran las 6:15 de la mañana cuando Mew llegó al aeropuerto por fin, todos los de la agencia ya estaban allí, así que rápidamente facturó y luego se reunió con ellos en la cafetería para esperar su vuelo.

—¿Has terminado ya, cupido?, por lo que veo fue larga la despedida ¿no?—habló Tay riendo.

—Pobrecito, seguro que su novio se agarró a su pene y no le dejaba irse de la cama—dijo entonces Off riendo también.

Mew les dio una mirada de furia.

—Vaya, parece que no estás de muy buen humor—habló Gun.

—Gulf no me coge el teléfono y no sé que pasa... Él sabe lo importante que es esto, mi trabajo es mi pasión—gruñó molesto.

—Bueno, yo lo entiendo—dijo New entonces.

Todos lo miraron.

—Buah, a ver, si es un chasco.... lo cierto es que acabais de reencontraros y ya lo estás decepcionando de nuevo—habló Gun nuevamente... Que faltes a su concierto benéfico no le habrá gustado, para él también será muy important...

Mew se levantó rápidamente de la silla, abriendo mucho sus hermosos ojos y a continuación empezó a moverse de un lado para el otro.

—¡Joder!, ¡mierda!, ¡me cago en la puta!, ¡El concierto!...¡menudo gilipollas que soy!.

—Pero, ¿qué coño te ocurre?, ¿Estás loco?—preguntó Tay mirándolo con asombro al igual que los otros y la mitad de la cafetería.

—Soy un imbécil, ahora entiendo lo que me dijo...yo tan solo hablé de mí, de este viaje y de lo mucho que me gustaba Milán y lo que me apetecía ir....Ni siquiera recordé su concierto, ni le pedí disculpas por no poder ir a verlo, no mostré nada de consideración.

—Venga, ¿en serio?, el pobre te dio las entradas con mucha ilusión, ¿Y ni siquiera le pediste disculpas, ni tampoco mostraste pena por no poder ir?—habló New de nuevo.

Este negó.

—Que va... estaba tan eufórico por el viaje que ni siquiera pensé en ello...¡joder!, ¡a la mierda mi segunda oportunidad!, ya me he cargado la relación—dijo el modelo sentándose en la silla de nuevo—…y yo creyendo que tan solo actuaba como una Dama Queen.

El más bajo le puso la mano en el hombro.

—Bueno, tranquilo, a la vuelta ya lo habrá entendido y te lo perdone, entonces lo arreglais en la cama y listo.

Mew volvió a negar.

—No, no habrá cama.

—Que fatalista eres, amigo—dijo riendo Tay.

—No, lo cierto es que Gulf no se va ha volver a acostar conmigo mientras no esté seguro de que yo voy en serio y  no lo vuelva a decepcionar.

—Buah... pues entonces date por soltero, amigo—dijo el moreno palmeándole la espalda.

—Joder, menuda mierda.

(....)

Durante los primeros cuatro días en el que el trabajo en Milán no era tan ajetreado, el modelo estuvo intentando comunicarse con su novio para así poder disculparse y evitar que lo dejase pero éste siguió sin cogerle las llamadas, ni tampoco abrió ninguno de sus mensajes.

Ni siquiera las flores, ni los chocolates, ni el perfume o la pulsera de oro que le envió, surtieron efecto alguno pues el moreno no aceptó ninguno de esos regalos.

2. Dentro de ti- Mewgulf TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora