¡𝗦𝗮𝘃𝗲 𝗠𝗲!... [𝗠𝗶𝗻 𝗬𝗼𝗼𝗻𝗴𝗶 𝘆 𝗧𝗻]

Capítulo 8

Después de una pesada mañana de clases, salí de la universidad y me senté en una pequeña banca para esperar por Yoongi.

Habíamos quedado en que él pasaría por mi para llevarme a no sé dónde. Un sitio muy importante que quería mostrarme, algo así.

Pasaron unos cuantos minutos y escuché el claxon de un auto sonar, dándome a entender que había llegado ya.

Entramos al lugar y mire cada rincón de este. Dando vueltas en mi puesto.

-¡Que maravilloso!, Nostálgico y relajante al mismo tiempo-- dije envuelta en una sonrisa dando leves saltitos de emoción.

-Nena, te gustan estos tipos de lugares, ¿verdad?-- preguntó y asentí.

-La casa de mis padres estaba en los suburbios y se parece mucho a este hermoso lugar.-- dije posando mi vista al jardín.

-Siempre me sentaba en el tatami y miraba por la ventana.

[Tatami= piso tradicional japonés]

-Por eso siempre pensé que seria bueno tener un lugar aquí, después de mudarme-- dije sonriente.

-Este es nuestro café-- dijo y yo fruncí el ceño.

-Ven, siéntate-- dijo señalando el tatami que estaba en le centro.

-La apertura al público será mañana-- dijo

-Queria que fueras la primera en verlo.

Él puso un vaso de café frío en el tatami y yo lo miré confundida.

-Por favor-- dijo y se inclinó a un lado de mi, indicándome que probara de este.

Posicione mi mano en mi boca, por lo que recordé.

Y al  parecer lo notó.

-¿Recuerdas eso ahora?-- dijo y yo lo miré.

-Creé este café sólo para ti-- entre abri mis labios pero decidí dejarlo hablar aún más.

-El café donde nos conocimos es administrado por mi compañía.

-Fingí ser uno de los miembros del personal para observar mejor a los clientes.

-En ese momento, tu...-- hizo una leve pausa mientras que yo lo miraba y escuchaba detalladamente.

-Estabas en una de las mesas, con tus manos reposando en la taza de café, y con un semblante tenso. Ahí es donde me detuve, y me dediqué a observarte solo a ti.
Era cómo si solo estuvieras tu en ese lugar.

-Me preguntaba el porqué te encontrabas tan tensa en tomar una taza de café, cuando finalmente lo probaste y miré tu expresión... Sentí algo especial en ti.-- soltó.

-Es por eso que decidí preparar un vaso igual de este-- señaló el recipiente sobre el tatami-- Exclusivamente para ti.

- Y así, lo llevé a tu mesa con la excusa de que era un nuevo producto, con la intención de que lo probaras.

-Luego de verte sonreír por haber tomado de este, sentí la curiosidad de preguntarte si realmente tomabas café a diario. Me dijiste que no te gustaba en lo absoluto, pero querías intentar beberlo.

-Pero que no cambiaste de parecer-- dijo en una sonrisa.

-Después de eso, me interesé en esa chica..., pero casi nunca venía a ese café.

-Entonces...- cortó sus palabras para sacar una pequeña nota y dejarla encima de la mesa.

La tomé débilmente y la leí: