Todos han escuchado acerca del amor entre amigos; el típico cliché donde dos mejores amigos caen ante las garras del amor. Tampoco puede faltar el "reemplazo" al no recibir la respuesta esperada por alguno de los dos. Sin embargo, ¿alguna vez nos he...
Yangyang y Renjun reían más adelantados que nosotros, empujándolo levemente y pateando las pequeñas y pocas piedras que había en la calle. Jeno hablaba con Byulmi acerca de una nueva película que me tenía sin cuidado, alegando que personaje era mejor y quién el peor y que pasaría en la secuela que estaba pronta a estrenar.
Asentía pocas veces a sus preguntas, pretendiendo que conocía el tema de la conversación pero eso era totalmente falso.
En mi mente solo tenía las cortantes palabras de Seokjoon y su mirada decepcionada.
¿Realmente parecía que la había dejado de lado? Siempre que salíamos en grupo ninguno de los chicos se quejaba que quisiera cuidar a Mimi.
"Pero ella no es un chico y tampoco tu amigo, era tu cita". Me recordé.
Detuve mi caminar cuando ellos hicieron lo mismo, llegando a un restaurante familiar que no se veía exactamente lleno.
— Comeremos aquí, su ramen es exquisito — habló Yangyang, más bien ordenó que nos metiéramos al lugar.
Parecía un Zombie siguiéndoles sin hablar y sin quitar mi cara de pocos amigos, el hecho de saber que hice sentir mal a Joonie me hacía tener mal humor.
Al llegar a la mesa me senté a un lado de Jeno, con la vista de la calle a mi disposición. Byulmi se sentó a mi lado, dejándome en medio de ella y mi amigo, me sonrió tímidamente y no sentí culpabilidad cuando corrí mi vista hasta el menú, evitando su bonita mirada.
Todos teníamos ya en mente lo que pediríamos y fue rápido el proceso de que el mesero se llevará nuestros pedidos, para matar el tiempo, les pareció prudente hablar sobre Seokjoon.
— ¿Desde cuándo la conoces? — preguntó Yangyang, quién era nuevo en el tema de Choi.
— Hace varias semanas — contesté, peinando con mi mano mi cabello hacia atrás.
— ¿Cuándo le pediste la primera cita? — Yang lucía emocionado por saber sobre ella, y yo solo pensaba en cómo la trate por la tarde.
— Ella me la pidió.
— ¿qué ella qué? — habla esta vez Renjun, riéndose a la vez.
— Yo estaba con él ese día, Seokjoon se miraba tan segura pero cuando llegó con Jaemin parecía un pequeño perrito asustado.
— Dios, Jeno. No la compares con un perro — defendí, riendo un poco al recordar ese momento.
— ¿Y cuándo será tu novia? — miré a Renjun, quien jugaba con una servilleta desechable.
Sentí a Byulmi moverse, pero no la miré.
— No lo sé.
—Bueno a como se fue esta tarde, te deseo suerte amigo — Jeno me palmeó la espalda, y por un momento sentí pánico.
— Iré al baño, ya regreso — los cuatro aceptamos sin mucha importancia a la única mujer entre nosotros.
¿Sería correcto dejar de ser el perro faldero de Byulmi y darle una oportunidad verdadera a Seokjoon?
Byulmi es realmente indecisa, me rechaza porque no quiere arruinar nuestra amistad, pero cuando Seokjoon está cerca o le hablo de ella se comporta como los gatos cuando están en guardia. Casi observó cómo su pelo se esponja.
Mientras que con Seokjoon me siento querido, siento que alguien se preocupa realmente por mí.
Levanté mi cuerpo, llamando la atención de mis amigos y mirando a través del cristal del establecimiento.
— Deseen me suerte, y recen para que no sea un soldado caído esta noche.
Después de mirar cómo se quedaban confundidos dejé el dinero de lo que sería mi comida, saliendo del asiento y en pocos segundos del lugar.
Caminando pocos metros y en dirección del otro lado de la calle, donde la misma tienda de flores de nuestra primera cita se encontraba.
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Este capítulo fue editado para una mejor y satisfactoria lectura (no se cambió la trama, solo se corrigieron las oraciones sin sentido y la ortografía)
