Todos han escuchado acerca del amor entre amigos; el típico cliché donde dos mejores amigos caen ante las garras del amor. Tampoco puede faltar el "reemplazo" al no recibir la respuesta esperada por alguno de los dos. Sin embargo, ¿alguna vez nos he...
Ignoré la presión en mi pecho al verla caminar al otro lado de la calle, entrando a la tienda de conveniencia siguiendo a aquel pequeño grupo de chicas. Minhee siempre fue social, sin importar los escándalos que tuvo en su primer año ella sobresalió por ser una buena persona que no debió pasar por aquella mala relación que mantuvo con aquel chico.
Mi espalda se posó en la pared, cruzando mis brazos sobre mi pecho y esperando a que Haechan llegará. Miré con disimulo como mi amiga reía con esas jóvenes, luciendo fresca y feliz como si no hubiera pasado nada.
"Tal vez solo tu exageraste la situación", pensé.
Mi cabeza giró al inició de la calle, encontrándome con Donghyuck con su común uniforme desarreglado. Sonreí levemente al encontrarlo más cerca de mí, esto no duró mucho ya que Haechan pasó a mi lado, ignorándome y sin mirarme.
Al parecer Kim no es la única en estar enojada conmigo.
Seguí sus pasos, encarando una vez llegando al semáforo peatonal en rojo. — ¿Por qué me ignoras?
— Dijiste ayer que no hablarías con nosotros, ¿Ya te has arrepentido?
— Se lo dije a Minhee, no a ti. — Haechan se encogió de hombros, su mirada nunca estuvo sobre mí y eso era desesperante.
— Bueno, no quiero que ella piense que estoy de tu lado. Tampoco estoy en el de ella, cuando soluciones sus problemas las dos búsquenme. — habló dispuesto a seguir su caminata hacia el instituto.
Bufé, indispuesta en seguir el mismo camino que él y marcando una nueva ruta ya que el enojo pudo más conmigo. Llegaría tarde, era algo obvio pero no me importaba, mis ánimos estaban por el suelo y lo último que quería era llegar a ese lugar.
Abrí los ojos totalmente asustada cuando sentí un par de manos en mi cintura acercándome al cuerpo contrario, teniendo la respiración del contrario en mi cuello y con mi corazón a punto de salir por mi boca. Paralizada, así me encontraba.
— Nunca te he visto venir por aquí, ¿experimentamos en busca de nuevos caminos? — mi respiración se reguló al reconocer la voz, volteando y encontrándome con su bonita sonrisa. Llevó su mano a su cabello y peinar este hacia atrás.
Jaemin se quejó al recibir un manotazo en su pecho, reemplazando su sonrisa por una mirada preocupada al mirarme.
— No vuelvas hacer eso, se siente horrible — él asintió, tomando mi mano para después besarla.
— Perdón, fue idiota de mi parte. ¿Vamos? — con su cabeza apuntó la calle frente a nosotros, asentí y me dejé guiar por la mano del chico.
Sin embargo, a pocos pasos detuvo nuestro andar. — No te saludé como debía, ¿me permites, bella dama? — confundida y enternecida dije un pequeño 'si'.
Cerré los ojos cuando Jaemin acercó su rostro, juntando suavemente sus labios a los míos y posando sus manos en mi cintura. Reí al finalizar esto a causa de la sensación en mi vientre.
— ¡Ustedes no saben que para eso existen habitaciones! — los dos miramos en dirección de quien gritó aquello, siendo Yangyang el culpable y caminando hacia nosotros junto con los otros dos amigos de Jaemin, Renjun y Jeno.
— No fastidies, Yangyang. Deja a los Tortolitos vivir su vida — Jaemin sonrió a Jeno, quien nos guiñó el ojo.
— Por supuesto que no hay nada de malo pero, por favor, no coman delante de los pobres— asentí como si hubiera entendido las palabras de Renjun, provocando la risa de Jaemin. Pronto estábamos los cinco caminando en dirección de la escuela entre anécdotas y empujones. No podía evitar pensar que se comportan como niños de primaria.
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Minhee cerró fuertemente su casillero, ocasionando que pegara un pequeño salto y varias miradas se encontraran sobre ella. Evité mirarle, sintiendo su penetrante mirada sobre mí.
— No hablaremos sobre eso en medio del pasillo, sígueme. — mi mirada cayó en la suya, encontrándome su entrecejo arrugado y unas notorias ojeras bajo sus ojos. Asentí cerrando la puerta del pequeño cubículo y acomodé mi bolso, empezando a caminar tras de ella.
No me negué porqué sé que Kim es una persona orgullosa y testaruda, si ella desea hablar conmigo un día después de nuestro altercado es de aprovechar la oportunidad. Ella no es de rogar y yo tampoco no la haría esperar, mi mente me está carcomiendo ñ
Comprendí a dónde íbamos, subiendo escalón por escalón hasta llegar a la azotea. Salté del susto de nuevo cuando la gran puerta a nuestra espalda se cerró.
— Deja tu bolso ahí. — tiré la mochila en donde apuntó, esperando a que iniciara la conversación esperada.
— No tengo toda la tarde, Kim. — no lo decía por desesperación, esta tarde papá y yo conoceríamos a Minhyuck.
— Tu relación con Na, no funcionará Seokjoon — rodé los ojos, en espera a que siguiera — Toda la maldita escuela sabe que está colado por Kang, hace menos de un mes se les veía como si ellos fueran la pareja. Odio, odio demasiado que todos hablen sobre ti como si fueras el impedimento a que estén juntos. — Minhee pateó su mochila, totalmente furiosa y maldiciendo. — Na Jaemin no te merece, es un tonto que no sabe lo que quiere y juega con los sentimientos de las personas; es igual que Kyung, Seokjoon.
Negué, ahora soy yo la que está furiosa ante la mención de su ex — ¿Jaemin es igual que Kyung? Estás demente, Minhee.
— Kyung, él empezó siendo dulce y atento. Después todo fue horrible, Joonie. No te dejes engañar por Na. — negué de nuevo, soltando una carcajada incrédula.
— ¿Sabes? Tú deberías dejar de comparar mi relación con la tuya. Que Kyung haya sido un hijo de puta no quiere decir que todos lo serán — caminé unos pasos hacia ella, acortando muestra distancia. — O, ¿Irás también con la pareja de Haechan a decirle que todos empiezan con bonitas palabras?
Minhee gruñó, acercándose igual que yo. — No estoy mintiendo, Choi. Jaemin te dejará hecha mierda y, te afirmo que no estaré ahí para decirte "te lo dije" — mi pecho dolió, entendiendo a lo que se refería.
— ¿Me haces elegir? Estás cayendo tan bajo, Minhee.
— Tú decides, Choi — tomó su bolso, dejándome parada en medio del lugar y al pasar se detuvo a mi lado — y te recuerdo que solo mis amigos pueden decirme Minhee, Choi.
Ella salió del lugar, dejándome sola y herida; a punto de derramar todo lo que no dejé salir durante el día de ayer.
Haechan tendría que esperar para que lo busquemos, si no es que en definitiva ésta amistad se fue por el caño.
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Este capítulo fue editado para una mejor y satisfactoria lectura (no se cambió la trama, solo se corrigieron las oraciones sin sentido y la ortografía)
