"Nunca antes había sido testigo de una barbarie tan enfermiza infligida a una persona. El cuerpo apenas era reconocible como humano. Si un animal lo hubiera destrozado el resultado habría sido más placentero a la vista. Y menos cruel. No podía imaginar qué clase de horror había experimentado antes de morir. La muerte debió haber sido su amiga bienvenida. Me alegré de no haber acompañado a Tío a la escena, cuando apenas podía soportar eso. Al llegar al final de la angosta escalera, recobré la compostura antes de girar el pomo y volver a entrar en la pesadilla. Lo haría por todas las mujeres que habían sido asesinadas, me recordé."
—Kerri Maniscalco, A la caza de Jack el Destripador.
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Cómo ellas se conocieron
Ficção GeralMiranda, Juliana, Rocío, Abigail, Carmen, Celia... son sólo algunas de las mujeres que forman parte de este gran libro con quince relatos. Cómo ellas se conocieron abarca desde historia argentina, hasta el terror sobrenatural y la fantasía, aunque t...