Capitulo 12

486 25 1
                                    

   Había decidido a quien contestaría primero aun con el teléfono en mano, esperaba que el príncipe Nicolás me esperara.

— Príncipe puede ir al jardín, al lugar de siempre. Necesito atender mi teléfono.

—De acuerdo.

—Gracias en tres minutos le alcanzo— exclamé poniendo el teléfono en mi oído.

—Hola.

—Mía hola, tengo grandes noticias— grito en el oído que retorcí un poco, pero igual sonreí.

—Si quedo sorda me ibas a pagar el doctor.

—Ja, ja, ja no exageres.

—Bueno, ¿Cuál será noticia que me darás?

—Voy a vivir en Dinamarca un Mes por allá —ahora si yo era la que iba a gritar, pero no lo hice porque alguien puede venir.

— ¡Qué bueno!, estoy feliz —no dejaba de sonreír, ¿pero recordé algo ¿En dónde se iba a quedar?, le preguntaré— sabes en donde te vas a alojar.

—Si sobre eso Mario tiene una casa por ahí en la ciudad, pero a las afuera de la ciudad creo que 45 minutos en auto para llegar.

—Mario Riwender es el quién te va a prestar, no sabía que tenía una casa en este país.

—Sí, pero sabes que ya haces como 6 años atrás tomo el control de las empresas KN tiene un negocio por este país, además de que va a abrir su línea nueva de cosmético en una tienda por la capital eso es lo que me comento. Luego vendrá a Dinamarca en una semana y media, ya que tenía que acordar unos temas que tiene pendiente acá.

—Vaya, eso sabía, pero me alegro de que vengas haces meses que no lo veo, hace tiempo que no veía a Mario.

—Si bueno él dijo que cuando venga te iba a invitar un café...

—... pasajeros a su vuelo de Dinamarca por abordar su vuelo.

—Bueno, ese es mi vuelo.

— ¡Estás en el aeropuerto! —exclamé sorprendida.

—Si mañana llego al medio día, no sé si me podrás recibir.

—Claro lo haré, suerte.

—Adiós—cortó el teléfono.

Estaba muy feliz porque voy a ver a Charlie mañana, pero durante toda esa felicidad me acordé de un pequeño detalle.

El príncipe Nicolás.

Así que me fui volando hasta donde él me había esperado, lo vi que estaba parado con intenciones de irse llegue hasta él tomando bocadas de aire por carrera que hice.

—Disculpa la demora.

—Ya iba a buscarte... el que te llamo era tu novio.

—Que no —negué con la cabeza—, es mi amigo que va a venir acá al país, se quedara un mes.

—Es una buena noticia para ti

—Sí... bueno, ¿Para qué me llamaste?—pregunte

—Quería agradecerte por lo que estás haciendo por mí —hablo algo apenado.

—No hay de que, tu novia no ha hecho algo sospechoso estos días.

—Aparte de comprar y estar quejándose todo este tiempo, no nada que reportar.

—Esa mujer a veces siento que es un peligro.

—Si bueno, lo que venía decirte es que, ya que todo este tiempo por ayudarme quería saber si en dos días quieres salir conmigo a tomar algo—dijo sonriendo quedandome muda 

Stay with meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora