Yummy!; UsArg🔞

❛12;; Blow job❜

— itu ide yang sangat buruk, Filipina (esa es una muy mala idea, Filipinas)—. murmuraba Indonesia en un intento por detener a su amigo, pero el filipino estaba más que decidido en ir a hablar con el norteamericano (y ex pareja). —Fili... Filipina!—. llamó pero él ya se alejaba en dirección a ese lugar.

Hace tiempo que está así, demasiado interesado en hablar con USA e ignorando lo que hace Malasia por él. Era triste ver como uno de sus mejores amigos se esforzaba por agradarle y recibir sólo el desinterés de ese alguien especial.

Como le gustaría darle una cachetada a Filipinas, quizás así se le acomoden las ideas. 

En cuanto a Estados Unidos, él estaba muy agusto conversando con Australia, al parecer el australiano quería prepararle una sorpresa muy especial para su esposo pero necesitaba consejos de su hermano mayor. El de tonos azules notó primero la presencia del asiático y le indicó a USA que tenían compañía.

— hi, Ame, how are you?—. sonrió amable, el de procedencia americana estaba un poco sorprendido ya que no hablaban mucho.

— oh... hello Philippines, I'm fine, and you?—. quiso, aunque sea, entablar una corta conversación con el filipino (para no quedar mal).

Por otra parte, Argentina venía de afuera siendo cargado por Bolivia ya que supuestamente se sentía “muy cansado” como para caminar. Le pidió ayuda a México para bajar ahora estando en los brazos de él, debo admitir que es muy consentido por sus amigos. Sin embargo su sonrisa desapareció cuando Uruguay se acercó para cuchichear de los movimientos de Filipinas, no es que a Argentina le caiga mal el asiático pero tampoco le cae bien. Ha visto cómo lo mira, su mirada llena de envidia o algo así.

— míralo nomás al pirobo ese, se anda haciendo el no sé qué y el yo ni enterado—. decía Colombia, mirando desde la distancia como Filipinas coqueteaba con Estados Unidos pero éste no captaba ni “A”. —mira nomás a ese malparido, no es que yo me crea muy chimba pero ese... uhg, ni culo tiene comparado al suyo, parce—.

— wey, la neta la neta, eres como esas señoras bien lenguas largas—. comentó México mirando también en la dirección de aquellos dos, pero le parecía raro que su mejor amigo no dijo nada todavía. —¿Arge? ¿'tas bien?—.

— ¿yo? eh... sí—. esa respuesta no le convencía, para ser su compadre y mejor amigo conocía cada gesto del argentino. Le estaba molestando mucho esa escena.

— yo que usted, voy y lo mando a volar a ese perro hijueputa—. Colombia recibió un zape en la cabeza de parte del mexicano, siempre incentivando a hacer malas acciones.

La gota que rebasó el vaso fué ver a Filipinas acercarse mucho al norteamericano, eso hizo que Argentina apretara los puños y tronando éstos, lo que preocupó a México. No creo que Filipinas sepa esquivar un buen golpe de un boxeador. Escuchó el respirar profundo del sudaca, quizás él buscaba su manera de controlarse. Luego el mexicano se alarmó al verlo avanzar hacia ellos, pero Colombia lo paró para evitar que lo detuviera, si algo también sabía del colombiano es que adora ver el mundo arder pero no arder con él.