- ¿Por qué mierdas la cortina está abierta? - Vociferé molesto al no poder seguir durmiendo tranquilamente porque la luz del sol estaba apuntando directamente a mis ojos. Inmediatamente la cortina se cerró y yo me volveé en la cama para ver a mi omega, pero me un terrible dolor me recorrió el cuerpo. - ¡Diablos! Parece que fue a mi el que follaron. - Maldije al sentir el malestar en mis brazos, en mi abdomen y en mis piernas, parecía que había hecho ejercicio durante un mes sin descansar. Y al parecer Steve estaba en el mismo estado, pues permanecia en posición fetal.
- ¿Cómo estás mi lindo rubio? - Pregunté al escuchar un gruñido de su parte ante mis anteriores palabras.
-Me duele todo- Reprochó con la voz rasposa - Y es tu culpa.
- Pues no te quejabas hace unas horas - Respondí y recordé que teníamos días de no comer bien, lo único que habíamos comido eran las barras de avena que habían en la mesita de noche de Steve y algunas botellas de agua con chucherías que había envíado Jarvis con un robot. La IA tuvo que enviar cosas para picar pues la comida sólida había terminado en el piso cuando intente probar algo, pues Steve exigió mi atención no me dejándome ingerir nada del plato. No habíamos logrado separarnos durante mucho tiempo, en realidad no recordaba mucho de estos días, parecía que de igual manera había sido consumido casi por completo, como si yo también hubiese estado en celo.
Llamé mi traje para que cargará a Steve pues estaba seguro de que si yo intentaba cargarlo no llegaríamos hasta el baño y mientras este llegaba quité la sabana que nos cubría y me sorprendí por la cantidad de hematomas que cubrían su lechoza piel, había marcar de mordidas de diferentes tonalidades, marcar de mis dedos y semen seco en su cuerpo. Si alguien lo viera pensaría que estuvo con un desquiciado. Pero segundos después vi las marcas que yo también tenía, en las muñecas tenía marcas de que Steve me sujeto de ellas, tenía hematomas en mis costados y estaba seguro de que mi espalda estaba llena de arañones pues sentía un ligero ardor en ella.
Me moví lentamente para acercarme a la orilla de la cama y me quité algunas plumas que tenía pegadas en el brazo y eso me despertó el recuerdo de que había roto una almohada al morderla cada vez que mi alfa me mandaba marcar al omega, ese maldito impulso casi me vuelve loco, la obligación de no marcarlo hasta que juntos lo acordaramos fue lo único que me mantuvo un poco consiente, de otra forma habría mandado la cordura al carajo y me habría hundido en el mar del placer que me concedía Steve. Aún estaba sorprendido por el control que tenía sobre mi mismo al llevarle la contraria a mi alfa interior y no acatar sus órdenes, no cualquier prime habría ganado una batalla interna de ese calibre, pero yo sí, hasta me sentía orgulloso por mi hazaña, si eso no le probaba a Steve que era digno de su confianza ya nada lo haría.
Mi traje llegó caminando por si mismo sacándome de mis cavilaciones pero cuando pasó el brazo metálico por detrás de las piernas del rubio este se quejó así que detuve el movimiento.
- Me duele el estómago. - Dijo haciéndose una bolita en la cama y soltando varios quejidos, fue ahí cuando lo noté, su vientre estaba abultado, todo el semen de los cinco días de celo estaba ahí acumulado.
- Creo que debimos usar condón. - Proclamé asombrado por la cantidad de semen que había dejado dentro suyo y que le había provocado tal hinchazón.
- ¡Tony no usamos condón! - Dijo alarmado el rubio tomando su estómago nuevamente al haber hecho un movimiento brusco al exaltarse.
- Tenías que ser rubio. - Ironicé moviéndome en la cama para levantarme.
- Tony no quiero tener un bebé.
- Steve yo no te puedo preñar, cree un anticonceptivo para mi antes de nuestra primera vez - Informé al verlo a punto de tener una crisis de nerviosa. - Has memoria y recordarás que nunca hemos usado condón- Pedí revisando si había ropa en el suelo, pero no, yo me había desvestido en el baño y Steve en su habitación - En todos los meses que hemos mantenido relaciones sexuales los evitamos - Destaqué yendome al baño mientras veía las botellas de agua vacías en el suelo. Busqué una toallita y encontré la que había dejado días antes para esta ocasión, la humedecí con agua fría y volví para ayudar a mi omega. - Yo tampoco me siento preparado para ser padre, imagino que tu tampoco.- Mencione con tristeza al imaginar lo mal padre que podría ser, dado al historial que tuvo el mío.
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Otra oportunidad
General FictionLos personajes no me pertenecen. Esta historia es Omegaverse. Si no te gusta esta temática te animo a buscar otra historia, así te evitas traumas y momentos incómodos. Si eres como yo que amas leer a Steve y Tony en diferentes roles esta historia e...