No, Tú No Vas A Ser Padre ||| YoonTae ||| Yaoi

Capitulo 10

Taehyung

Los golpes se vuelven más fuertes casi haciéndome estremecer, continuo contra la puerta, una de mis manos sigue en el pomo y otra en mi vientre.

― ¡vete! – suplico ― ¡no tienes nada que hacer aquí!

― ¡abre! ¡tenemos que dejar las cosas en claro! – grita furioso ― ¡si no abres tiraré la puerta!

Tengo mucho miedo, no solo por mi, por mi bebé, no quiero que le hagan daño. Escucho como un auto frena y un poco de alivio me invade.

― ¡aléjate de ahí! – la voz de Jin es tan profunda que me hace temblar.

― Este no es tu asunto – gruñe Yoongi – así que lárgate.

― mi hermano está ahí, así que si es mi problema.

― él no es tu hermano – sisea Yoongi ― su hermano es Namjoon.

― Como si lo fuera – la voz de Jin nunca se escuchó tan amenazante – largo de aquí.

Las voces de ambos se escuchan frente a la puerta, me alejo un poco de la puerta, pero aún me mantengo atento a ella, como si en algún momento Yoongi pudiera pasar por ella. Todo se escucha tan claro que no hay necesidad de estar cerca de la puerta.

― no creo que quieras un enfrentamiento – dice Yoongi con burla – saldrás perdiendo.

El gruñido de Jin se hace más fuerte, tanto que instintivamente me doy dos pasos hacía atrás. Yoongi también gruñe, su gruñido es aun mas amenazante, creo que es momento de salir, abro la puerta y salgo, los encuentro mirándose de forma retadora.

― Jin Hyung – digo su nombre con miedo.

― entra al auto – sus ojos no se apartan de Yoongi – ahora.

― Hyung, vámonos los dos – me acerco un poco a él pasando de largo a Yoongi – no se rebaje al mismo nivel que él.

― debemos hablar, Taehyung – siento como Yoongi se acerca a mi – no me obligues a...

― ¡al auto, Taehyung! ¡ahora!

Automáticamente bajo la mirada y camino al auto. Mi cuerpo se mueve con rapidez al escuchar su voz, no volteo en ningún momento, llego al auto y me adentro en el con la mirada baja.

― Taehyung – escucho a Jungkook junto a mi ― ¿qué ocurre?

― dijo que entrara al auto – siento mi cuerpo temblar.

Jungkook me abraza un poco y observa por la ventana del auto.

― ¿Por qué esta ese tipo aquí? – suena asustado – Jin esta furioso.

― es el padre de mi bebé – sollozo – en la fiesta... Mi celo... Yo...

No puedo continuar hablando, rompo en llanto y me cubro el rostro con mis manos. Todo esto es tan jodido, ¿por qué me pasa esto a mí? Yo solo quiero estar en paz, junto a mi bebé.

― Me contaras todo después – acaricia mi espalda – Jin esta de regreso.

La puerta del auto se abre y se cierra de golpe, la ira de Jin hace que baje aun mas la mirada, arranca el auto y empieza a conducir rumbo a su casa.

― ¿es el padre? – sisea.

― Si – digo en voz baja – el día de la fiesta, mi celo se adelantó y él...

― Entiendo – gruñe ― ¿Por qué no dijiste la verdad?

― No quería que mi hermano ni tú se mancharan las manos – sollozo – pero jodí todo, es mi culpa, lo siento, los metí en problemas, pero no sabía a quién llamar, Hoseok no podría contra él y...

― Taehyung – Jin intenta sonar calmado – te dije que eres como mi hermano, no voy a dejarte solo, pero debiste decirnos la verdad.

El auto se detiene, miro por la ventana, hemos llegado, todos bajamos del auto y vamos directo a la casa de ellos. Una vez sentados en la sala Jin es el primero en hablar.

― Habla ahora, Taehyung – Jin suena mas calmado.

― basta, Seokjin – reprocha Jungkook – Taehyung esta muy alterado, le puede hacer daño al cachorro.

― Esta bien, les dire la verdad – miro a Jin ― el día de la fiesta yo...

Yoongi

― ¡no! – golpeo otra vez la pared.

Mi respiración esta agitada, mis nudillos están ensangrentados y mi lobo esta intentando salir y buscar a Taehyung, pero no puedo permitirlo.

― Ese cachorro es mío – gruño y vuelvo a dar otro golpe a la pared.

Tal vez suene bipolar, pero el que ese idiota beta se haya apoderado de mi cachorro sobre paso los límites. Preferiría mil veces que se hubiera deshecho de el en vez de dárselo al jodido beta, no puede tenerlo, ¡no puede tener a ninguno!

― ¡me hubiera exigido hacerme cargo! – golpeo de nuevo la pared.

Mis garras aparecen al igual que mis colmillos. No, debo tranquilizarme, debo aclarar mi mente. Dirijo mi vista a mi mesa de noche y veo la gorra. La tomo y la llevo a mi nariz, aun conserva su aroma.

― Frutos rojos – susurro.

Me siento en la cama aún con la gorra entre mis manos y cerca de mi cara. Absorbo lo más que puedo su aroma mientras cierro los ojos, siento que mi ira baja lentamente, es como un sedante.

― ¿qué hice? – es lo único que sale de mi boca.

Siento que me estoy volviendo loco, a mi no debería importarme lo que pase con Taehyung y esa cosa. No debería importarme, sin embargo cada que pienso eso algo en mi pecho se comprime y no me dejo respirar, una parte de mi me grita que es un error no tomarle importancia, pero solo fue uno más, era una noche de sexo, nada podía salir mal, sin embargo, todo salió mal, el esta embarazado.

Vuelvo a cerrar los ojos y me concentro en su aroma.

¿por qué me sigue atrayendo su aroma?

Debería aborrecerlo, debería odiarlo, pero no, estoy aquí, con su gorra, tranquilizando me con su jodido aroma.

― No está bien – alejo la gorra – no deben estar en mi vida, ni yo en la suya.

Eso es, no debo estar en la vida de Taehyung, no esta bien, no es bueno para mi, solo debo ver por mi.

No necesito estar con ese Omega, ni con esa cosa.

"Bebé"

No, no, no es un bebé, es una cosa.

Taehyung y esa cosa no son más que una mala jugada que me hizo el destino, debo eliminarlo de mi sistema, de mi vida. Solo debo cambiar de pagina a esto, continuar con mi vida como él hará con la suya.

Me dejo caer en mi cama con mi brazo tapando mis ojos.

― ¿por qué cada palabra suena como una mentira? – susurro ― ¿por qué siento que trato de engañarme?