Dʀɪᴀᴅᴇ || Eᴍᴍᴇᴛᴛ Cᴜʟʟᴇɴ

Capitulo 11

Los días pasaron normales despues de aquello, todo parecía volver a la normalidad.

Los Vulturi no tardaron en enterarse sobre la transformación de Bella.

Lo raro era la extraña forma en la que se estaba comportando Emmett. Si antes pasábamos mucho tiempo juntos, imagínense ahora. No me quejaba, pero me parecía inusual.

Al menos hasta que el se dignó en aclarar mis dudas.

-Luego de que los vampiros tenemos relaciones sexuales con nuestra compañera, nos sentimos incapaces de separarnos de ella. Es como si hubiera formado una unión más fuerte y resistente contigo.- esas fueron exactamente sus palabras.

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Parecía que solo nos quedaba un enemigo: el tiempo.

Renesme crecía a una velocidad realmente avanzada y eso nos preocupaba a todos. ¿Cuanto tiempo tendríamos con ella antes de que muriera por la rapidez de su crecimiento? Pero eso hacía que cada momento con ella fuera aún más preciado.

Estabamos Bella, Emmett, Jake, Nessie y yo en un claro en el bosque. Todo a nuestro alrededor se teñia de blanco por la gran cantidad de nieve.

Emmett me abrazaba por la espalda y sus brazos rodeaban mi cintura. Tenía mi espalda apoyada en su pecho y su cabeza reposando en mi hombro.
Yo estaba transformada en driade luego de la carrera que hicimos por el bosque. La niña jugaba a atrapar los copos de nieve mientras los demás la observabamos.

-Edward cree que la respuesta esta en Brasil.- comentó Bella luego de reincoporarse. Voltee a mirarla.- Hay tribus ahí que podrían saber algo.- cuando termino de hablar, Nessie saltó a la distancia y agarro un copo de nieve en el aire.

Sentí como Emmett se tensaba a mis espaldas y Bella y Jake hicieron lo mismo a mi lado.

-¿Que pasa?- pregunté con tono preocupado. Ahora mismo odiaba no tener una vista mejorada como ellos. Nessie volvió con nosotros rápidamente y se abrazo a la pata de Jake, quien gruñia.

-Creo que es nuestra prima de Denali.- respondió Bella.

-Es Irina.- afirmó Emmett con el ceño fruncido y separándose un poco de mi para pararse al lado mio.

-¡Irina!- gritó Bella. Después empezó a correr con su velocidad mejorada de vampiro, siendo seguida por Emmett y por mi. Jake se quedó con Nessie.

Pero, apesar de que corrimos lo más rápido que pudimos, al llegar no había nadie. Nos acercamos al precipicio, donde abajo se podía ver la marca que había dejado Irina al saltar al agua.

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-Tanya convencio a Irina de que viniera a reconciliarse.- nos dijo Carlisle ya en la casa Cullen y despues de que les dijimos lo que pasó con la chica Denali.

-Tal vez cambió de opinion.- Edward estaba sentado en el banco del piano con Nessie a su lado y Bella parada junto a ellos.

Emmett me mantenía en su regazo y él estaba sentado en uno de los sillones.

-Ver a Jacob debió haber sido demasiado.- comentó Esme.

Yo me mantenía callada y con la mirada perdida. Había tenido un mal presentimiento desde hace días y ahora, con la visita inesperada de Irina, este había incrementado.

-Hubiera querido hablar con ella.- contestó Bella, sacandome de mis pensamientos al escuchar su voz.

-Es familia. Ya volvera.- Carlisle tenía un tono tranquilo y despreocupado, pero algo me decía que los problemas no tardarían en llegar.

Suspire y me recosté en el pecho de Emmett, quién escondió su cabeza en mi cuello y dejo un par de besos allí.

Los demás se habían ido hace un rato de la sala, por lo que estábamos solos.

-¿Estas bien?- preguntó y se separo de mi cuello para, esta vez, besar mi mejilla.

-Tengo un mal presentimiento.- mi cara expresaba completa preocupación y el se dió cuenta de aquello.

-Mirame, Ada. Mirame.- le hice caso y lo mire, perdiendome en sus ojos dorados.- Todo estará bien, ¿Si?

-¿Y si no lo esta? ¿Y si ese mal presentimiento se cumple y alguno de nosotros termina herido?¿O...muerto?- nunca me había sentido tan preocupada por alguien en toda mi vida. Los Cullen se habían vuelto personas especiales en este corto tiempo que había compartido con ellos.

-Si eso llegase a ocurrir...- empezó a hablar el pelinegro.- ...tu seguirás con tu vida, incluso si yo muriera.- negué con la cabeza, no queriendo hacer eso.- Si, lo harás. Y tendrás una larga y feliz vida.

-Emmett, ya basta.- le pedí y me levanté de sus piernas, alejándome de él con los brazos cruzados.

-Adara..- me llamó y se acercó a mi.

-¡Tu no lo entiendes!- espete y me voltee repentinamente hacia el.- ¡Si tu murieras, yo seria capaz de cualquier cosa!- el me observaba completamente serio, pero no estaba molesto, solo no sabía que decir.- Nunca te lo dije, pero las driades tambien tenemos algo a lo que llamamos almas gemelas. Si tu mueres, Emmett, yo moriré contigo y no lo digo en broma.- me aproximé a el, quien acarició mi mejilla cuando estube lo suficientemente cerca.

Me agarró por las piernas en un rápido movimiento y las enrolló en su cintura.

Le encantaba hacer eso.

Despues apoyó su frente en la mía mientras caminaba al sillón y se sentaba conmigo aún encima.

-Te amo.- me dijo mirándome con detenimiento, como si quisiera guardar cada detalle de mi rostro con fuego en su cabeza.

-Te amo.- respondí con la misma mirada. Hasta que no pude aguantarlo más y me acerqué a él para besarlo.

El beso fue lento, aunque profundo, y al separarnos le mordi el labio inferior. El sonrió por mi gesto y volvió a besarme, esta vez con rapidez y lujuria contenida.

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Importante: A lo que se referia Adara sobre si los Cullen terminaban heridos o muertos es por la vision que Alice le mostro a Aro. La cual, gracias a Dios, no se cumplio, pero era una de las posibilidades del futuro.