Dʀɪᴀᴅᴇ || Eᴍᴍᴇᴛᴛ Cᴜʟʟᴇɴ

Capitulo 2

Apesar de las insistencias de Bella, no le dí más pistas. Estaba segura de que Edward le diría lo que era en algún momento.

Ahora mismo estaba sentada junto a Bella en la gran mesa redonda, escuchando los discursos.

Me reí bastante con el discurso del chico fortachon, quien me parecía bastante guapo y sexy. Él me sonrió al ver que me estaba riendo.

Luego tuve que taparme la boca para no explotar a carcajadas por el discurso de Charlie.

-Fue el unico discurso normal, sinceramente.- le murmure a Bella cuando Edward termino de hablar.- Aunque el del chico fortachon estubo bueno.- ambas reímos. Desvíe un poco la mirada y vi que el chico me sonreía desde su mesa. Le devolvi la sonrisa.

Para cuando el baile llegó, me aleje un poco y observe a la pareja de recién casados. Debía admitir que hacian una linda pareja.

Sentí como alguien se paraba al lado mio, pero no lo mire.

-Soy Emmett.- mis ojos se desviaron a la persona. Era el chico fortachon.

-Adara.- respondí y estreché la mano que él me extendía.

-¿Quieres bailar?- preguntó derepente. Lo mire sorprendida y dude un poco. Me encogí de hombros.

-Bien.- lo tomé de la mano y lo lleve a la pista de baile, donde la música era un poco movida.

Empezamos a bailar y había veces en las que él me levantaba tomándome de la cintura. Nos reímos mucho y hicimos un par de boberias mientras bailabamos. Como mandarles comentarios a sus hermanos que bailaban cerca.

-¡Esa, Jasper!- el rubio estaba bailando muy pegado a Alice y nos fulminaba con la mirada cuando nos escuchaba.

O como hacer pasos de baile extraños y un poco ridiculos. Luego fuimos a tomar algo porque estaba sedienta. Tenia una gran sonrisa en mi cara, nunca me habia divertido tanto.

-¿Sabes algo? Al principio crei que eras amargado o algo asi. Pero ahora me doy cuenta de que eres todo lo contrario.- le dije.

Él sonrió y contesto:- Edward es el amargado, enana.- lo miré con falsa indignación al escuchar como me llamó.

-¿Como me llamaste?- le pregunté y me acerqué un poco a el, amenazante.

-Enana.- respondió divertido. Levanté mis cejas.

-Yo te mato.- estaba seria pero era una broma. Me acerque lentamente y retrocedió. Hice como si fuera a saltar sobre el y se sobresaltó. Me reí como jamás lo había hecho.- ¿Te asustaste?- le pregunté burlona mientras seguía riendo. El se cruzo de brazos, molesto.- Ay... se enojo.- el se contagió y se rio conmigo.

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Estabamos afuera de la casa Cullen, despidiendo a la pareja para que se vayan a su Luna de Miel.

-Usen condon.- le susurré a Bella cuando me abrazo. Ella se separo y me golpeo en el hombro mientras se sonrojaba.- Lo digo enserio.

-Solo... cierra la boca.- me reí por la verguenza que cubría todo su rostro.

Bella fue a despedirse de sus padres y yo me acerque a Emmett.

-¿Volveras al lugar de donde viniste? Porque se que no eres de Forks.- me dijo cuando llegue a el. Estaba serio.

-Soy de Nueva York y no, no volveré. Pienso quedarme un tiempo aqui en Forks.- contesté. El sonrió y yo le devolví la sonrisa.

-Me alegra que se hayan hecho amigos- escuché la voz de Alice, quien estaba junto a Jasper. Ambos tenian una sonrisa diferente dirigida a Emmett. Yo los mire un poco extrañada, pero me encogí de hombros y observe como Bella y Edward se iban en el auto del cobrizo.

-¿Te quedaras en lo de Charlie?- inquirió Alice. Asentí con la cabeza y bostece.

-Y creo que ya me voy, tengo mucho sueño.- les comente.- Fue un gusto conocerlos, chicos.

-Lo dices como si fuera la ultima vez que nos veremos. Y no lo es.- dijo Emmett.- Me vas a tener que aguantar por mucho tiempo.- lo miré confundida.

-Tengo demasiado sueño para preguntar el porque. Así que solo te diré que: okey.- me encogí de hombros. Me di la vuelta y me dirigí hacia Charlie, que me esperaba junto a su auto.

-Espero que no venga otra boda.-

Tremenda indirecta nos mando.

¡No me digas!

-Si, supongo.- me senté en los asientos de atrás y cerré la puerta.

Cuando llegamos a la casa de mi tío, subí las maletas con ayuda de Charlie al antiguo cuarto de Bella, donde me acosté y me dormí rápidamente.

Emmett llegó tiempo después y se adentró a la habitación sin que yo me diera cuenta, cuidándome mientras dormía.