Capitulo 17: La lente del dragon.

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La joven Horrendo continuaba su charla con sus amigos mientras Nuffink intentaba darle los ultimos retoques a la pared arreglada cuando la puerta fue golpeada por una patada por parte de un desconocido que volvio a alertar a todos haciendo que sacaran sus armas y pusieran posturas de pelea ante la amenaza.

-¡Que tal todos!.- Grito Brunilda mientras cargaba una bolsa llena de comida y una enorme sonrisa hacia sus colegas que tenian sus armas apuntando hacia ella.- Wow calma no es como si fuera a morderlos y convertirlos en Torton.

Einar hablo primero con un tono bastante molesto.- La proxima vez podrias tocar sabias.

-Bueno podria haberlo hecho como una persona normal oh mejor entrar con estilo, a eso, que rayos hace ese dragon peculiar aqui.- Apuntando al Pinza mortal que se mantenia al lado de Runa.

-Uh, un dragon que nos siguio sin permiso, de nuestra visita al archipielago.- Respondio Zephyr con un tono bastante molesto.

-¡Es cierto toda esa locura de ir a ver el viejo Berk!.- Grito emocionada recordando toda la situacion pasada.- Tienen que contarme como les fue haya.

Zephyr sonrio para luego volver a la situacion que la tenia molesta.- Lo hare despues de saber que demonios hacer con la perdida de mi arma.- Se destruyo cuando peleamos con un loco que esta tratando de destruir nuestro hogar.

-Vaya, realmente necesito que me cuentes todo para entender.- Respondio Brunilda frotando la parte trasera de su cuello.- Pues solo necesitas volver a poner el mango y aaahh ya veo.- Dijo mientras Zephyr le mostraba que lo unico que quedaba era el mango.

-Perdi el filo entre la pelea.- Dijo Zephyr con algo de desanimo.

Brunilda quien se puso a pensar sobre el asunto se dio cuenta de algo, chasqueando sus dedos miro al mango que tenia Zephyr agarrado.- ¿Vale quieres reparar tu arma favorita no?, pues mientras yo y algunos de mis familiares saliamos de la isla de forma de acuerdo a las "normas", encontramos a una distancia considerable una pequeña isla y digo realmente pequeña.

Nuffink se quedo mirando a la joven Torton.- ¿En esa isla hay un herrero?.

Brunilda volvio a chasquear sus dedos.- ¡Exacto!, uno muy cascarrabias por cierto y de una estatura baja para su edad, creo el podria arreglar tu arma.

Zephyr quien parecia pensativa con la idea respondio con una voz seria.- No podemos irnos, mis padres salieron con mi abuela y Brincanubes, dejar la isla desprotegida siendo los unicos con dragones me parece una accion estupida a tomar.

-Escucha podremos ir alli rapido en los dragones, tardariamos 3 horas en vez de 3 dias de viaje, no creo que nada malo llege a pasar.- Cuando dijo eso la cara de Zephyr mostro una cierta molestia.

-Nunca vuelvas a pronunciar eso, trae mala suerte como una cascada de malos infortunios.- Esas palabras dejaron sorprendida a Brunilda.

-Puedo llegar a esa isla mas rapido que nadie, ¿podemos ir?.- Gruño Runa mirando a la joven quien seguia pensando en la idea.- vamos hermana confia en mi.

-No, podemos dejar eso para despues, la prioridad es quedarnos por si algo sucede.- Respondio con seriedad.

Nuffink levanto la mano y dijo con bastante emocion.- ¿Y si solo Runa y yo vamos mientras nos guia Brunilda?.

Esto llamo la atencion de todos en la sala.- Solo digo que el Pinza, Terror y todos se quedan aqui por si algo sucede mientras yo voy a ese sitio a arreglar tu arma, nos serviria a mi y Runa algo de esto para divertirnos.

Zephyr no era torpe y sabia que su hermano no solo queria hacer esto por arreglar el arma, si no para salir y aventurarse a explorar, ahora que lo recordaba bien, su hermano siempre habia querido aventurarse a cualquier sitio y desde la llegada de Runa habia estado ocultando ese deseo.

DRAGONES: La Nueva Era.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora