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Ya se había hecho de noche, mi tía me invito a comer unas ricas hamburguesas y luego charlamos muy poco, antes hablábamos todo el tiempo, eso es bastante desalentador. Llegue a casa a las once y media, arregle la ropa que debía estar lista para empezar las clases. Tenías que ir de camisa blanca con corbata negra, pantalón negro de vestir, pelo corto y afeitado. Cuidan mucho la presentación personal. Y para los actos debías ir de traje, mi madre me decía que en esa escuela si tenías una mancha o estabas desarreglado no te dejaban entrar. Siempre había alguien que se fijaba de que todos estuvieran bien presentables.

La alarma sonó a las seis y media. Me desperté, me pegue un rico baño caliente, y me fui a desayunar. Siempre por las mañanas soy como un muerto en donde no deben hablarme y en donde no debo hablar, siempre digo cosas estúpidas en la mañana, hasta que se pasa la etapa demuerto. Me vestí y salí rumbo a la escuela. Caroline seguía durmiendo y sentía algo de envidia.

Magnanimidad.(Terminada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora