Magnanimidad.(Terminada).

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Apenas termine de leer el capítulo llegaron mi padres haciendo alboroto. Gritando mi nombre y exigiendo que bajara, Alize lo trataba de calmar pero era inútil. Yo baje para no meter a nadie más en problemas y Cillian me agarro del brazo y me metió al auto. Alize trato de detenerlo pero yo le dije.

_Tranquila Alize, ya volvere.

Me llevaron de nuevo a mi casa y al llegar, me sentaron, empezaron a regañarme mientras mi padre totalmente sacado me decía una y mil veces que era un desastre que lo había decepcionado y todo eso que me dolía mucho escuchar. Mi madre llorando y mi padre repitiendo otra de sus estúpidas frase.

_Ya te pareces a Antonio.

Cuando me dijeron lo de Antonio fue el momento en que estalle y dije.

_Yo sé que no creen lo que digo, pero es verdad, quiero hacer algo por todos, no solo por mí y no me comparen con Antonio porque aunque ustedes lo crea un fracaso, no lo es. Él está mal y ustedes no lo ayudan, es mi hermano y daría todo por él, dejen de pensar en el futuro y empiecen a creer que soy alguien valioso, necesito que confíen en mi por favor.

Mi padre se puso rojo de la furia y gritando me dijo.

¡Basta!, ¡no saldrá más de la casa hasta que te recompongas, este año perderás estudiar y trabajaras en la construcción para ganar tu dinero, me canse de mantener irrespetuosos!.¡ Largo de aquí!.

Me fui a mi habitación enfurecido pero controlándome lo mejor que podía, me acosté en mi cama y pensaba que iba hacer, mientras reflexionaba en las palabras de mi abuela, ya todo se va calmar, ya todo se va a calmar. Y trataba de darme fuerzas con esas palabras pero aun no tenía éxito. En ese momento tocan la puerta y grito, ¿¡Qué quieren!?. Era Antonio.

El pasa a mi habitación y dice.

_Escuche todo lo que paso.

_¿Y qué?, ¿Vienes a burlarte de mí?.

_No.

_¿Entonces qué quieres?.

_Ayudarte.

_¿Por qué debería creerte?.

_Está bien, lo siento Cormac, sé que he sido una basura contigo, te he tratado mal, te he menospreciado, subestimado, lastimado, he sido el peor hermano. Sin embargo quiero pedirte perdón, desde que naciste sentí miedo de que mis padres ya no me quisieran y cuando empezaste a conseguir cosas y ser el mejor en toda la familia yo me sentía un perdedor al lado tuyo, sentía que nadie me quería y deje la escuela para demostrar de que ¡Si lo soy! ¡Soy un perdedor!, ¿Contento?.

_ No eres un perdedor Antonio, solo estas lastimado y ya no tienes fuerza para nada.

Antonio empezó a lagrimear y fui lo abrace. El me agarro fuerte y me dijo.

_Perdon Cormac, después de escucharte defenderme me di cuenta que a pesar de que te lastime, aun me quieres y tienes fe en mí.

_Claro que te quiero imbécil, pero me tuviste que haber dicho.

_¿Pero acaso no soy yo el que debe guiarte?.

_¿Y que tiene con que a veces sea al revés?.

_Que me hace sentir más fracasado y cobarde.

_Fracasado hubiese sido que no te animaras a decir y querer cambiar, cobarde hubiese sido que siguieras con el mismo comportamiento.

Antonio se secó las lágrimas y respondió.

_¿Por qué eres tan bueno con gente tan mierda?.

_Porqué sé que ellos están más lastimados que yo.

Antonio me volvió a abrazar y nos sentamos en la cama.

_¿En qué te puedo ayudar Cormac?.

_Necesito volver a Daplen.

_¿Porque?.

_Es importante para mí.

_¿Una chica no?.

_Es una razón.

_¿Y cuál es la otra razón?.

_ Llegar al fin de esta mentira que les han vendido a este pueblo.

_Lo hare Cormac, lo haremos.

_¿Pero cómo?.

_Aunque no lo creas soy mejor mintiendo que tú.

_Perfecto entonces.