Bloodbell - despise me- en búsqueda de lo perdido

CAPÍTULO 12

UN POCO DEL PASADO

{UN VISTAZO AL PASADO, UN GRAN REVUELO AL FUTURO}

Reiven:

Los ojos azules de una niña de sangre-pura me observan con timidez. Al ver que la observo, sus mejillas se llenan de sangre y sus labios tiemblan, sus delgadas manos juegan con nerviosismo entre los pliegues de su elegante vestido, su cabello rubio miel le llega hasta el hombro, sus ojos azul celeste un distintivo de la casa Hemsworth evaden mi mirada. Con un cuerpo frágil y temerosa, me pregunté ¿si de verdad era una de sangre-pura?

Los cabellos castaños de mi madre acaparan mi atención, ella se inclina hasta mi altura y con sus suaves manos arreglar mi pelo alborotado, una dulce sonrisa nace en sus labios rojos al ver que era casi imposible alisarlos. La belleza de mi madre era indiscutible y hasta ahora no vi a otra mujer que la igualara.

_ Mi niño, ¡deberías sonreír más! _ acaricia mi rostro _ deja que esta madre vea la dulce sonrisa que puedes mostrar.

_ Madre _ mi tono neutral la desalientan un poco _ veo la sed en tus ojos, más tu paciencia por arreglarme parece prioridad. Están también aquellos que nos rodean con esas sonrisas desagradables y por último _ giro mi vista hacia la niña y ella se cohíbe _ ¿Por qué? _ parpadea un par de veces y suelta una risita.

_ Enseguida lo sabrás _ se incorpora _ ¡pero te diré esto a cambio! Si hay algo que debas decir dilo, no temas a las represalias, eres fuerte, así que muéstralo _ sus ojos se oscurecen ya no me mira a mi sino a alguien más.

_ ¡Porque siempre estarás de mi lado! _ pronunció y antes de que ella respondiese mi padre sujeta mi mano y me lleva al centro de la sala.

Nadie en esta sala era de otra especie que no fuese un de sangre-pura, ni siquiera un vampiro, los susurros no se hicieron esperar y la habitación se llenó de ojos rojos, después de todo, para un de sangre-pura hay pocas cosas apetitosas y entre ellas está la sangre de un infante de sangre-pura. Supongo que dos niños causaban mucha sed.

Mi padre se detiene en cuanto el otro hombre que trae a la niña esta frente a nosotros. El hombre era delgado y de apariencia débil, aunque mis instintos me advertían que no lo era.

_ Kress Hemsworth... _ una voz gruesa y ronca se escucha en toda la habitación, antes de que pudiésemos pensar en donde se encuentra, un cuerpo grande desciende junto a nosotros.

Las caras pálidas no se hacen esperar y casi como acto reflejo todos intentan inclinarse, pero él nos detiene. Nos habíamos equivocado. No era nuestro rey, sino el favorecido de los reyes, nunca tuve la oportunidad de conocer a los reyes padres, pero este de sangre-pura frente a mí, tenía algo que nos aterrorizaba a todos nosotros. Por sus venas corre la sangre de los que nos dieron vida. Mi padre lo había comentado antes, de que en poco menos de tiempo, él recibiría sangre de los reyes padres, porque ellos lo querían mucho al igual que...fijo mi vista en Dorian, su rechoncho y alto cuerpo mi pilla observando y me sonríe. Muchas caras están emocionadas, yo no. Tenía la apariencia de un guerrero entrenado, sus cabellos negros y largos, sus ojos rojos como la sangre, alto e imponente, esa fue la primera vez que entendí la diferencia de poderes en los de sangre-puras. Mira en mi dirección _ Reiven Bloodbelle _ mi padre me suelta _ está bien, solo soy un espectador de parte de los reyes ¡¡continúen!! _ dice y mi padre se inclina hasta mi altura. Sus ojos oscuros con apenas un atisbo de rojo lucen confiados.

_ ¡Escucha Reiven! Sé que aún eres un niño y no entiendes lo que sucede..._ decía, ese era su problema. No importa lo que haga o cuanto lo demuestra, él siempre me ve como un niño que no comprende nada, la sangre de la niña aún corría como fuego por mis venas, su último aliento aún se reproduce en mi oído una y otra vez. Doy un paso atrás.