Manson© ✅

CAPITULO 32

Narra Voiello

Hace unos meses recibí una llamada de Travella, Su preocupación por Manson estaba incrementando y me habló sobre tratos que podrían quedar mal y harían que la vida del chico paguen las consecuencias, Travella necesitaba crear un plan b, Un haz bajo la manga si las cosas resultaban mal, Y yo era ese plan.

Tiempo después de la llamada el me llamó por medio de un numero privado y me contó sobre las cosas que Manson estaba haciendo, Al ser yo su amigo de confianza prometí mantenerlo todo en secreto, investigue un poco sobre el pueblo en el que residen los dos y al encontrar los hechos que estan aconteciendo actualmente, Sabia que de alguna forma esto pasaría.

Una clave, un solo numero en un mensaje de emergencia me haria saber si las cosas resultaron mal.

Y como era de esperarse, hace dos días recibí ese Mensaje.

Travella es astuto, sabe que yo soy lo único que puede salvarlos y que ellos no lo sepan, profundice mi investigación y entre de incógnito a los datos de la policía local, encontré registro de Manson hospedado en el hospital de Santa Ana, ahora esta en la lista de sospechosos y se encuentra a la espera de ser interrogado si logra recuperarse.

Ahora me encuentro infiltrado en el hospital, con una bata de estudiante de la fácultad y un permiso falso, una mascaria que cubre mi rostro, una camilla y guantes.

Manson se encuentra en la sala de emergencias, En la sección A, está custodiado y protegido por dos oficiales, no se le ha permitido visita alguna, salvo de los medicos que checan su salud y su estado.

Tengo entendido que hay una hora específica para asear a los pacientes, los llevan a la zona de los baños especiales o los asean ahi mismo.

En este momento es la hora y tengo que llegar antes que los verdaderos médicos.

Me acerco cautelosamente y actuo lo menos nervioso posible.

Los oficiales me observon, sus miradas atentas que checaron y bloquearon la entrada.

—No tiene permitido estar aqui—habló uno de ellos.

—Es un pasante—dijo el otro observando mi carnet.

—¿Que haces aqui?—Preguntó el primero.

—Me asignaron a este paciente para la limpieza matutina y el chequeo obligatorio.

Trate de no respirar, de actuar de forma calmada.

—¿Permiso?—preguntó frunciendo el seño.

Yo le mostré el papel enseguida.

El me lo devolvió.

Abrieron el paso y me dejaron entrar.

Lo vi entonces, al chico de veinte años que se encontraba en la cama, su cara estaba tan palida que parecia estar muerto, una bata azul de paciencia cubria su cuerpo golpeado.

¿Que hiciste querido amigo?

Me apresure a preparar la salida.

Pero, ¿Como iba a salir sin que los oficiales me detuvieran?

Ya lo tenia planeado...

Soborné a un señor que estaba por ahi, para que armara un escandalo y llamara la atención de los oficiales.

Mientras tanto cuidadosamente cargué a Manson a la camilla y lo cubri con una sábana, para que pensaran que era un cuerpo ingresado a la morgue.

Escuché la llamada de atención de los oficiales y al señor diciendo cosas que yo entendí, uno de los oficiales se acercó al señor, luego el otro se apresuró.