El final de la apuesta

Ni Ella Ni Tu

Adrián miró a su madre muy enojado, estaba bastante molesto por el comportamiento de la mujer ¿como lo encontro? Se preguntó antes de responder a la petición de su madre

-No, no tenemos nada de que hablar--le respondió mirandola enojado

-Claro que si, tienes que ayudar a tu hermana-gruñó la mujer

-Mi hermana es mayor de edad, sabe lo que está haciendo y se atiene a las consecuencias--le asegura el Alfa logrando que Liduna se enfureciera mas

-Es tu familia-gruñó-tu deber es ayudarla

-Hace cuatro años te dije que ya no tenías hijo el día que me fui de la manada-Respondío molesto-eso significa que no tengo hermana porque tu no eres mi madre-Esa palabra hicieron enojar aún más a la mujer

-¿Y tu padre? ¿El no es tu familia?-preguntó con sus ojos amararillos

-El es mi padre, pero para mí Lira y tu no existen-le aseguro logrando hacer enojar aún más a la mujer.

La mujer gruñó despertado a Apolo quien grito asustado, todos en la planta alta salieron de sus habitaciones para ver que pasaba

-Te pido que te retires, estas molestando a mi Omega y nesecita descansar-gruño Adrián entrando a la habitación para consolar a Apolo

-Es tu harmana-dice nuevamente Liduna

-Que comparta sangre con ella no quiere decir que me haga responsable de sus actos-fue lo último que dijo el Alfa antes de que dos Betas se llevarán a su madre a la fuerza

El cerro la puerta y se acomodo en la cama nuevamente con su chico, solo faltaba una hora para que la comida estuviera lista, después hablara con su papá para retomar el puesto de heredero Alfa de los Leopardo

Ese día no paso nada mas, Liduna no comió nada ni ceno, Adrián hablo con su padre, Apolo, Dante, Guillermo y Mimir pasaron un rato juntos, al igual que Orion con el que fue su novio, Conor también pasó tiempo con Adrián, ambos hablaron de Orion, el Alfa jaguar le contó a Adrián como conoció al Omega y el como se fueron enamorando, también le contó del cortejo, y como planea pedirle matrimonio.

Adrián estaba feliz por su amigo, encontró alguien que lo quería y lo trataba como se merecía, Orion estaba muy contento, con su cachorro en camino y con el Alfa que constantemente le recuerda loucho que lo ama.

Dante se encontraba con su hermano, Apolo leía un libro en voz alta para el, con los minutos de lectura en la habitación fueron entrando más y más personas, entre ella Liotari quien se acomodo en la piernas de Mimir, Adrián se acomodo detrás de Apolo quedando este entre sus piernas, asi llegaron también Orion, Conor, Guillermo y uno que otro niño de los trabajadores de la casa.

Ese era uno de los poderes de Apolo, su voz tranquilizaba a las personas, podían escucharlo leer el resto de su vida, incluso cantar pero como siempre la paz no dura, un grito se escucho desde las celdas y todos se pusieron alerta.

De repente los gritos de Lira se escucharon por toda la casa, era como si la estuvieran matando, la mayoría de los presentes en la sala, sentados en el piso y el sofa gruñeron por la interrupción

–Continuamos mañana por la mañana–Aseguró al Omega con una sonrisa

Coloco el listón de separador del libro y lo cerró todos estaban molesto, los gemelos, Mimir y Adrián viajaron a ver que pasaba

–Teo entró en paro y quedó en coma–Les anunció Deimos cuando estuvieron frente a la entrada de las celdas

–Quiere decir que si Lira lo sintió ella era su alma gemela–dijo Adrián tomando de la sintura a su chico

–Es así, pero eso no cambia nada–Les aseguro la pantera–la sentencia sigue tal cual se palneo–con eso dicho mando a todos a dormir que mañana seria un día muy largo

Apolo y Adrián entraron a su habitación en cuanto el mayor cerró la puerta cargo al Omega para que este rodeara su cadera con sus finas piernas, le quito el collar y undio su nariz en el cuello de este.

Apolo rio ante las cosquillas y la clara nesecidad de su Alfa por su olor, se dejó hacer hasta que llegaron a la cama donde el mayor se acomodo con Apolo sobre su regazo y aun respirando su aroma a tierra mojada y café dulce, amaba ese olor

–Te amo–dijo en un susurro Adrián–eres el ser más perfecto que conosco–siguió susurrando

Apolo comenzo a llorar, sabía que esas palabras eran ciertas, lo sentía en su corazón, Adrián lo ama a pesar de lo que pasó, Apolo suspiro, era hora de enseñarle a su Alfa lo que en verdad podía hacer, todo su poder completo. No podía seguir oculatandolo, despues de todo para el la confianza es lo más importante.

–Tengo algo que enseñarte–dijo Apolo en medio de los mimos que reciba

–¿Ahora?–preguntó el Alfa dejando un beso en su hombro

–Sí, vamos al jardín–respondió el Omega levantándose y acomodando su ropa

Adrián tomó el collar y se lo puso  nuevamente, aun tenía miedo de que algo pasara si no lo tenía puesto y Apolo entendía eso así que dejo con paciencia que se lo colocará, salieron tomados de la mano.

Al salir Apolo tomó su forma animal, pero de repente una especie de luz lo cubrió, cuando está se desvaneció frente al Alfa estaba un Tigre del sobre de tamaño que uno normal con los ojos grises quine lo miraba como pidiendo permiso

–Eres hermos, eres tan hermos–dijo Adrián acariciando la mejilla del animal–agradezco a la diosa Luna por darme tan extraordinario ser como pareja–aseguró juntando sus frentes.

El Omega estaba feliz, Adrián no le tenía miedo, nada de miedo, no se alejo de él como muchos lo hacían al ver su verdadera forma, el Alfa lo acariciaba con cariño mientras este ronroneaba.

–Regresemos a dormir un rato–dijo separándose un poco del Tigre.

Apolo tomó su forma humana y rápidamente fue cubierto por la chamarra de Adrián quien lo tomó en brazo y lo llevó hasta la hibitacion. Donde después de que se colocará un pantalón para dormir y una sudadera el doble de su tamaño el menor entró a la cama. Adrián lo recibió en sus brazos y ambos se fueron al mundo de morfeo.

En un par de días los gemelos regresan clases, Apolo con los Tigres y Dante con los lobos, no quieren irse pero sus padres piensan que es lo mejor, alejarse un tiempo de lo que pasó, además Apolo tomaría terapia, no querían que si flor tuviera elgun tipo de trauma.

Por otro lado el juicio de Lira se retraso ya que no encontraban un Alfa que quisiera sacrificarse y enlazarse con esa Alfa, aunque siempre está la opción de marcar aun Omega si ya no soporta estar con ella, pero eso solo sería posible si el Omega en cuastion es la o el destinado de dicho Alfa, de no ser así, tendrá que continuar unido a Lira.

A simple vista pareciera una condena absurda pero la realidad era otra, al sacarla de la familia líder Adrián quedaba como único heredero aunque renunció a este cargo, además de una u otra manera Lira morirá si se separa demaciado del Alfa que la marque o que esté marque a alguien más, además de degradar su estado de Alfa grado 1 a Alfa grado 5, (parecido a un omaga joven) su sentencia pues la muerte a largo plazo.

Liduna le suplico a su esposo que salvará a su hija, pero el hombre se negó a mover un solo dedo, ella no paraba de llorar solo pedía que no se encontrara a ningún Alfa dispuesto a eso pero cuando estaba por cumplirse su petición una camioneta nargra aparco frente a la casa de las Panteras.