Smile F. Love あ・Kookmin

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⚠️||Puedes saltarte este capítulo, sino es de tu interés.

Besándose sin control, Jimin y Jungkook empezaron a tocarse en cada rincón.

Sus cuerpos ardian de infinito calor y se atrevieron a quedar completamente desnudos en la habitación de aquel bar.

Estando así, en ese lugar tan silencioso sus labios seguían comiéndose hasta crear fuertes chasquidos.

Jimin no tuvo permitido moverse del regazo de Jungkook, estuvo apresado con esos brazos ejecitados alrededor de su cintura, además se sentía tan bien, porque su trasero tocaba el miembro recostado del azabache.

No tardó en moverse he hizo sutiles vaivenes que provocó el jadeo de ambos. Pero Jungkook deseaba más, tocó cada parte del cuerpo del rubio con sus grandes manos y fue tan suave que fue fácil dejar marcado su lechosa piel.

Y gruñendo, atacó el cuello de Jimin con mordidas y succiones, quedando en claro que sólo Jungkook quería ser el único que provocara sus gemidos.

El rubio no se quedó atrás, sus pequeñas y suaves manos acariciaron el torso de Jungkook hasta caer en su cuello porque quiso volver a juntar sus labios.

Sus labios se movieron al mismo ritmo desenfrenado que Jungkook que lo terminó acostando en la cama. Jimin comenzó a moverse encima con sutiles vaivenes, deseando despertar más ese grande y largo falo que al verlo deseó que fuera penetrado, pero para eso, puso las manos en el pecho de Jungkook y así, dar suaves brincos que provocaron un gruñido del mayor.

Eso provocó una sonrisa victoriosa por parte de Jimin, se inclinó para llenar de besos el cuello de Jungkook, aunque sólo soltó un gemido porque sentía las manos del pelinegro en sus glúteos, los apretó y los tocó como ningún otro hombre que mordió con fuerza su piel.

Las palabras sobraron en ese ambiente, no deseaban hablar, sólo seguir con esto hasta que la noche acabara, así que de sorpresa, Jungkook cambió la posición y recostó el cuerpo de Jimin en la cama para quedar en medio de sus piernas.

Y cuando empezó un recorrido de besos en su abdomen plano hasta llegar a uno de sus pezones empezó a morder y a lamerlos.

Jimin se retorció de placer, su espalda se arqueó cuando Jungkook empezó a succionar su pezon provocando que gimiera. Incluso, acomodó sus manos arriba de su cabeza y cerró los ojos para disfrutar como era acariciado de sus muslos con esa manos calientes.

Pero todo terminó, cuando Jungkook se detuvo para besar sus labios, sus lenguas chocaron sin consideración que un hilo de saliva se formó cuando se vieron a los ojos.

-¿Seguro que quieres hacerlo? -Jungkook le preguntó, llevando las manos a sus caderas -Podemos..

-Si -Pero Jimin lo detuvo, tomando sus mejillas -Quiero estar contigo, lo deseo

Y con una suave sonrisa, Jimin volvió a cambiar la posición, uno que estaba seguro que Jungkook le iba a encantar.

Boca abajo, alzó por completo su trasero, se giró a ver sobre sus hombros a Jungkook y se inclinó un poco más para decirle que entrara, lo necesitaba.

Eso provocó más la excitación de Jungkook que no tardó en darle una fuerte nalgada, que marcó la palma de su mano.

Pero antes de iniciar, agarró su trasero con ambas manos y soltando un ronco jadeo, acercó su rostro para lamerlo.

-¡Mghm!

Jimin gimió cuando sintió esa lengua explorar su entrada, se aferró a las sábanas y para provocar más, movía su trasero más adelante para que esa lengua entrara más.

El gruñido de Jungkook se escuchó pero seguía con lo mismo para complacerlo, porque su polla ya estaba en su punto, recto y duro.

La mezcla de estar ebrio llevó a la locura a Jimin, hundía su rostro en la cama y gemía fuerte cuando la glande de Jungkook empezó a rozar su entrada, jugueteaba con esa zona que su calor aumentó.

Hasta que sucedió, Jungkook empezó a invadir el interior de Jimin, escuchando como este se quejaba, quiso detenerse pero el rubio se lo impidió cuando tomó su muñeca, lo miró sobre sus hombros diciendo que siguiera y así lo hizo, metió todo de manera lenta para que no doliera.

-¡Ah, Jungkook!

Jimin se aferró a las sábanas, empezando a sentir como Jungkook entraba y salía de su interior.

Y complaciendolo, el pelinegro llegó hasta el oído del rubio y empezó a mordisquearlo con unos cuantos jadeos porque debido al placer empezó a penetrarlo más constante, aferrándose a sus caderas.

-Joder, Jihon

-N-no, dime Minnie, por favor Jungkook

Jimin no quiso que ese momento fuera pensado en su hermano, quería sentir que Jungkook era suyo, sólo por esa noche.

-Bien, Minnie

Y así, Jungkook comenzó hacer más preciso en la caliente entrada del rubio, dando embestidas más profundas que marcaban el abdomen de Jimin.

El rubio estaba complacido, gemia descontroladamente hasta tener abusos dentro de su ser y es que provocó a Jungkook a ir más rudo.

Sus ojos se nublaron por las lágrimas que soltaba y cuando se giró a verlo sus labios se estamparon los suyos, ahogando cualquier gemido o jadeo.

Jungkook dejó las caderas de su novio y llevó sus manos a las de Jimin para aferrarlos a la cama cuando empezó con las estocadas, logró que Jimin alzara el rostro y su boca se mantuviera abierta, fue tan hermoso para el pelinegro que el calor en la habitación empezó a sentirse más, dejando en claro que en esas cuatros paredes no era una simple cogida, esto, era hacer el amor salvajemente, porque eso es lo que sentían ellos dos, amor.

Pero seguían sin confesarlo.

-¡Mghm! ¡Jungkook!

Jimin se unió a las embestidas he hizo su trasero hacía atrás para rebotarlo en su pelvis, sus mejillas estaban tan enrojecidas que su frente lo sentía algo mojada, también, en su espalda se podía sentir como el cuerpo marcado de Jungkook se tornaban perlas de sudor, su rostro se volvió más sexy, ese cabello negro como la noche estaba alborotado y daba un aspecto tan rudo que quiso más así que, con dificultad tomó las manos de Jungkook y los llevó a su pecho, quiso que atendiera sus pezones y lo hizo, el pelinegro empezó a pellizcarlos y a frotarlos provocando que Jimin ahogara un gemido.

Estaban al borde de la locura que Jungkook volvió a ser rudo y sin permiso, agarró el miembro de Jimin para masturbarlo.

-¡Ah! ¡Bebé no!

Aquel sobrenombre fue lo que llevó a Jimin al punto, empezó a sentir las penetraciones más profundas, al extremo de que la cama empezó a golpear la pared.

Estaba llegando a su límite.

Y lo hizo, se vino antes que Jungkook, manchando por completo su mano.

Para correrse también, Jungkook se sostuvo de cada lado y empezó a golpetear con más fuerza delatando sus gruñidos sobre el cabello rubio hasta que se vino también en gran cantidad, llevando el interior de Jimin que gemía complacido.

Saliendo de su interior, Jungkook cayó a un lado de la cama, agitado.

Jimin también cayó en la cama completamente agotado y con la misma respiración se recostó en el pecho del pelinegro, escuchando sus fuertes latidos que provocaron su sonrisa.

Jungkook se movió y abrazó la cintura del rubio, mirándolo frente a frente. Acarició su mejilla y terminó juntando sus labios, porque lo que pasó en estos momentos, sería por mucho tiempo.

-Minnie -Jungkook se separó, mirando sus hermosos ojos -Yo..

-Shh -pero Jimin lo cayó, poniendo un dedo sobre sus labios -Lo sé

Ambos sonrieron y volvieron a juntar sus labios, escuchando cómo en la otra habitación también se estaban divirtiendo, así que eso les dio más motivación de seguir haciendolo, hasta el amanecer.

Querían y deseaban estar juntos, por siempre, aunque no se podría.

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