TRES CAMINOS UNA LUZ

declaración al alba

- Lux: Sylas, yo no soy buena para decir muchas cosas, aún soy muy joven para entender muchas otras, así que solo busqué la mejor solución, una que podría convertirse en otra prisión  pero que también me daría un poco de libertad.

El seguia con los ojos cerrados mientras fruncia el ceño cada tanto con alguna de mis palabras, y yo seguía sin encontrar el modo de decir lo que tenía adentro, así que seguí mi descurso con la fe de hayar el momento perfecto que daría paso a mi seguridad.

- Lux: cuando la tía Tiana me dijo que debía casarme con el príncipe jarvan no lo pude tolerar, tuve tanta ira y molestia que  casi no logro contenerme.

Cuando pronuncie el nombre de mi tía Tiana, él se crispo apretó sus puños sobre sus brazos cruzados, su seño se frunció tanto que creo que alcance a ver una vena palpitante en su frente y al final solo escupió un "que bonita familia" asqueado, pero no podía reprocharle, yo también me sentí igual en aquella cena con su falsa gala, aún así debía continuar con   lo que tenía que decir, no solo para que las cosas se calmaran sino también para no perder el valor que me estaba dando a mi misma

- Lux: entonces me negué, realmente no quería casarme con el, pero luego comprendí, que yo... Podía...-

'Busca las palabras vamos Lux deja de ser tan cobarde ya no eres una niña'

Sylas abrió los ojos y volteó al verme intrigado con mi silencio.

-Lux: bueno yo.. me... Yo podría hacer algo.... -

Bajé la mirada, apenada y roja, me sentía triste y avergonzada de no poder expresar bien lo que quería decir, me sentía como una quinceañera, pero entonces una mano calló sobre mi hombro, cuando levanté la mirada lo ví ahí sonriendo, dándome ánimos para continuar, aunque no solo hubo silencio, cómo dije el ama las sátiras y realmente necesitaba una de las suyas para relajarme.

-Sylas: si vas a hablar como una tortuga avísame para ir al baño en lo que tú tratas de fomar la siguiente frase.-

-Lux: con ese retrete asqueroso yo creo que preferirías que siguiera hablando como tortuga.-

El se soltó una gran carcajada y yo miré su mano que seguía posada sobre mi hombro y entonces la toqué con delicadeza, él paró de reír y se quedó estático al ver que tomaba su mano entre las mías, me miro con los ojos muy abiertos, parcia nervioso, pero no apartó su mano entoces sentí que era el momento perfecto.

-Lux: Sylas, no le daré más vueltas al asunto y puede incluso que sea un error lo que te diré, pero... Mi motivo para casarme con príncipe jarvan no es uno romántico, yo quiero casarme con el príncipe jarvan porque mientras tú sigas en estas 4 paredes jamás podré ser libre, y eso es lo que quiero, quiero que seas libre.-

El me miro sonrojado levemente con sus manos firmes en las mías, parecía que su respiración se cortaba así como cualquier indicio de palabra en su boca, tenía  mi oportunidad entonces era ahora o nunca.

-Lux: Sylas cuando me case con jarvan, haré todo lo posible para que seas libre, tú y todos los magos y cuando salgas de demacia, quiero que hagas tu vida con libertad, que viajes y vivas el mundo que has perdido por tantos años, y sobre todo no quiero que mires hacía atras con tristeza porque tendrás una vida nueva.-

Tomé un respiro y comprendí que las siguientes palabras serían el final de mis declaraciones y también darían final a todo, así que tomé su mano con firmeza y me lancé.

- Lux: está es la última noche que te veré, la última oportunidad que tengo para decirte todo, y no sabes cuánto te agradezco por ayudarme, eres mi mejor amigo, todo el tiempo que pasé contigo ha sido más feliz que la mayoría de mi vida en demacia, gracias a ti por fin pude ser yo y fui tan feliz a tu lado que no pude evitar que algo más que mi magia creciera.-

-Sylas: Lux  me estás haciendo una broma ¿verdad?-

- Lux: jaja eres tan ocurrente o tan despistado, realmente aún no lo sé, pero aunque creas que es una broma no lo es, yo... Me enamore de ti, y aunque no sintieras lo mismo, mi misión seguiría clara, serás libre, así que se paciente.-

El silencio se posó eternizando los segundos que a mí parecer eran minutos, bueno eso me hacía creer mi corazón al tener tantos latidos por segundo, en mi mente ya no pasaban pensamientos solo estaba en blanco, no tenía idea de lo que pasaba por su cabeza pero mi mente no lo quería imaginar y a mi corazón no le quedaba sino esperar.

- Sylas: *suspiro* hay, que voy a hacer contigo, ¿sabes cuántos años de cárcel me darían por estar con alguien que es 10 años menor que yo?-

El pronunció estás palabra entre risas, yo levanté la mirada y pude ver su sonrisa bondadosa,  me miraba con tal ternura que sentí que mis piernas ya no reaccionaban, que mis manos se volvían una laguna y mi corazón parecía una batería a punto de estallar, sentí honestamente como mi cara enrojeció y terminé riéndome con el de su sátira.

Me tomó entre sus brazos suave y delicadamente y su cara se acercó lentamente a mi tan repentinamente que no pude contener mi emoción  y comencé a temblar, acercó su boca a la mía y finalmente beso mis labios, y yo simplemente floté o así lo sentí, sentí mi alma salir de mi cuerpo y mis labios cosquillear en los suyos con cada rose, cada caricia que contenía el baile de nuestras lenguas era como un corrientazo delicioso lleno de placer y cariño.

-Sylas: (se aparta y posa su frente sobre la de ella) ¿sabes que eres imposible no es así?-

Yo lo mire y sonreí y volvimos a juntar nuestras bocas en una danza perfecta y armoniosa, pero esta vez era más apasionada, como si nos necesitamos, como si en cada desliz de nuestros labios mostracemos ese miedo que teníamos de no volver a estar juntos jamás.

Cuando por fin nos apartamos a causa de nuestra necesidad fisiológica de respirar, nos dejamos caer al suelo y nos abrazamos y allí dormí un tiempo aunque no se exactamente cuánto, caí en su hombro y no noté en qué momento el sueño me acogió, pero mi felicidad se fue pronto al despertar cuando noté la luz del sol asomarse entre los huecos de la mazmorra, era hora de irme.

-Lux: Sylas.... ya es hora, es hora de irme-

El volteó a verme, al parecer me había estado observando mientras dormía pero no tardó en cambiar su cara de calma cuando le comunique que me iba, el frunció el seño y hizo una mueca de desagrado.

-Sylas: Lux , NO, NO QUIERO QUE HAGAS ESTO.-

Yo lo miré enfadada, pero no podía evitar sentirme triste también.

-Lux: ¿se puede saber porque me estas gritando? Sabías que esto pasaría te lo dije.-

-Sylas: que quieres que haga, me siento impotente, te vas con ese imbécil y yo no puedo mover un dedo, NO, NI SE TE OCURRA, ME OYES, Ya encontraremos otra forma, Lux.-

-Lux: Sylas este es el mejor modo, además el compromiso ya está hecho, recuerda lo que te dije, vive tu vida.-

Con estas palabras me levanté y le dí la espalda lista para retirarme, pero el me tomó con fuerza  y me abrazó por la espalda, no pude evitar que la nostalgia volviera a mi y las lagrimas hicieron su aparición de nuevo, seguro que quien no me conociera pensaría que solo se llorar.

- Sylas: Lux, soy mas viejo que tú es cierto, pero he pasado tanto tiempo acá que siento que me quedé en aquella adolecencía y es por esto que no estoy acostumbrado a demostrar mis sentimientos, me hice duro porque verme sufrir les daba placer, por esto ni siquiera se como expresarme, pero... Aunque no sé cómo decirlo, no quiero que te vayas.-

El volteó mi cara para que pudiera  verlo y ahí me dio un beso que sentí como el último, tal desesperación de ambos solo demostraba que ninguno estaría dispuesto a olvidar.

Tristemente a mitad de beso la puerta estalló y mis ojos se abrieron al igual que los suyos, el me volteó hacia el y me abrazó con fuerza, usando su cuerpo como una barrera protectora.

- vaya, vaya pero miren nada más que rata tan grande-

Bueno chicos espero les haya gustado, disculpen la demora, gracias por su apoyo y no olviden que si tienen algún consejo o sugerencia  será bien recibida.

Espero estén todos muy bien, cuídense del covid.