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XXXI - Primera carta

Primera carta

CAPITULO XXXI

Departamento de Park Jimin

Povs Jimin

Junto al tercer mes de embarazo, llegó una carta que me hizo creer en el amor.

Taehyung me miraba sentado sobre la encimera de mi departamento, con su vientre super abultado y un pote de helado inmenso que robaba todos sus suspiros.

Mi amigo estaba cursando el tercer trimestre y aún así, seguía ayudando a Jungkook con todo lo que podía, a pesar de no decirme exactamente en que consistía su macchiavellico plan para regresar a mí.

"¿Has leído la carta?" - le pregunté, pero negó frenéticamente.

"El idiota me mataría si hurgara en sus poemas, solo estoy aquí para garantizarle que estás bien y que la piedra junto a la carta llegue en optimas condiciones"

"¿Piedra?"

"Jimin... hay una cajita dentro del envoltorio. ¡Por dios! Una cajita de casi diez mil dólares"

Tapé mi boca sorprendido y encontré la aclamada cajita.

Una piedra, estaba casi seguro de ello. Preferí leer la carta y no dejarme llevar por los encantos de las gemas favoritas de Jungkook.

Para tu primer mes sin realizar guardias debido al embarazo, te envío un lapislázuli*. Una de mis favoritas en el mundo entero. Es la piedra de la comunicación, y fue considerada como sagrada en la antigüedad. Es una piedra que nos ayuda a liberar nuestras emociones y sopesar la excitación con la realidad, para que nuestros nervios no cubran nuestras buenas intenciones, especialmente cuando nos comunicamos. Algunos la consideran la piedra preciosa de la realeza, el poder y la sabiduría, y es además nuestra ayuda para estrechar los vínculos con nuestra pareja y amistades. Si tienes miedos y fantasías perturbadoras, esta piedra también te puede ayudar a alejarlos.

Ahora bien, ya no uses la Taaffeita, no la necesitas. Nadie de hecho... solo Soobin.

Pero no me gustaría solo ser técnico y no decirte que te anhelo ¿sabes?

No soy bueno enviando mensajes por la noche porque mi lobo se echa a llorar porque te extraña... pero me haces sonreír cuando me escribes y me cuentas que Taehyung ha ido a verte con comida y algunos juegos. También me alegra que nuestro cachorro no te esté trayendo problemas. ¿Reconoce tu voz? ¿Patea tu vientre? ¿Te has levantado en medio de la noche queriendo comer chocolate? Mierda Jimin, si estuviera a tu lado cumpliría cada uno de tus deseos.

Te enviaré más de estos paquetes. Mantén las piedras contigo.

Te extraño, cariño, mi pequeño omega, mi pequeña gema.

"Es un desalmado" - sollocé frente a la atenta mirada de Taehyung.

"Toma la piedra, vamos, no llores" - se acercó a mí y tomó la pequeña caja - "es maravillosa, es realmente maravillosa, de las más puras que he visto"

Como Taehyung dijo, el lapislázuli poseía una belleza descomunal y Jungkook lo quería para mi, para ayudarme y para nuestro vínculo.

Tomé un poco del helado de mi amigo intentando no pensar en que extrañaba a mi alfa y en lo mucho que mi cachorro lo necesitaba. En días fríos, donde ni siquiera los pájaros se atrevían a salir, deseaba tanto estar entre sus brazos que quise morirme ahí mismo.