La magia del amor ~ Chriserick~

CAPÍTULO 17

-¡Usted engaño a mi hijo, nos engañó a todos! - el coraje que sentía era inigualable.

-Deberían agradecerme, su hijo ya tiene mas que asegurado su futuro al igual que ustedes- respondió irónicamente- tienes mas dinero de lo que alguna vez imaginaron.

-Si, pero... ¿usted cómo sabía que ese hombre iba a morir? Digo el verdadero Christopher Vélez.

-El tenía muchos enemigos que tarde o temprano lo iban a matar y yo solo... aproveche la situación. - dijo sínicamente

-Que casualidad que lo mataron en un momento tan oportuno ¿verdad? -insistió el hombre

-No, su muerte solo fue algo...precipitada.

-pero ¿y si alguien se da cuenta?

-No, nadie lo hará, mi familia ya está convencida de que Erick se casó con él.

- ¿Pero él ya lo sabe?

-No, pero lo voy a convencer y usted debe estar de mi lado. - indico, dándole leves palmadas en el rostro.

-Pero lo que usted me esta proponiendo es algo deshonesto- se justificó el hombre

- ¡Por favor! Hace años que usted viene haciendo cosas deshonestas y por unos cuantos dólares, haga otra, pero por muchos millones. Don Erito hable que no tengo tiempo que perder usted decide si de ahora en adelante vive como un REY o como una rata – sentencio- usted sabe que con una simple llamada a las autoridades usted pasaría sus ultimo años en la cárcel. – advirtió el rizado.

-M...Me está amenazando?

-Si- dijo con total descaro.

Erito se encontraba entre la espada y la pared, por una parte, estaba el bienestar de sus hijos y por otro el terminar en una celda por el resto de su vida.

-E-Esta bien, acepto

-Muy bien- el rizado orgulloso de la respuesta se acerco al hombre y le puso algo en sus manos- Esto es para que empiece a Disfrutar de su vida como suegro de Christopher Vélez.

El hombre se sorprendió al ver la enorme cantidad de dinero que el rizado le había dado.

- ¿Cuándo se tomó esa foto mi hijo? -pregunto al ver la foto que estaba colocando el rizado en uno de los cuadros...donde se encontraba Christopher abrazando a Erick muy felices los dos.

-Es una foto falta, mejor dicho, es un foto montaje, esta arreglada, pero procure que cuando vengan vean esta foto en especial los periodistas que no tardan en aparecer por aquí. - Anuncio el rizado

- Ahora veamos que le dirá a los periodistas o personas que le pregunten.

Joel empezó a indicarle que debía contestar y que no a las personas pues para el todo está más que arreglado.

-Tío ¿cómo sigues?

-Estoy bien gracias, aunque con hambre. -Dijo el señor mientras veía como el chico traía grandes valdes de comida para sus animales que tenía en la cabaña.

-No me refiero a usted tío me refiero al señor que se encuentra adentro.

- ¡Ah! ese güero, se la pasada quejándose seguro se rompió algo y no se puede levantar.

-Tío, ¿y si se da cuenta que le robaste su reloj?

- ¡SHHH! Cállate wey.

-Mmm, ¡A-Ah! -las quejas del castaño eran fuertes pero entendibles.

-No pues, es que usted tiene una buena cantidad de golpes. ¿Qué le paso eh?

-N...No lose, mmjm

-Para mi que lo asaltaron por que lo dejaron tirado y no tenia ni dinero ni identificación alguna.

-E-Estaba en m-mi casaca, seguramente mmm se quedaron en la camioneta. - El castaño apenas podía hablar, sentía dolor y le costaba respirar.

- ¿Una camioneta? ¿suya? -intervino el muchacho.

-S...Si

- ¡Ah! ¿La que se desbarranco? - comento el anciano.

-S-Si iba con una señora y su esposo. ¿Qué les paso? - pregunto el castaño.

- ¿Una mujer y un hombre?, no señor solo lo encontramos a usted. -menciono el muchacho con cierta duda.

-No había nadie más, ni siquiera su coche. - continuo el anciano.

-A lo mejor camino herido hasta donde lo encontramos y ahí se desmayó.

-Si, si camine mucho, mmm -dijo Christopher intentando acomodarse sobre aquella cama , pero el dolor era insoportable. - ¿Y ustedes quiénes son?

-Mi nombre es Jesús y el es mi sobrino Javier.

-Mmm necesito-necesito atención medica ahh -el castaño intentaba moverse, pero el dolor era insoportable- ¿hay alguna ciudad cerca?

-No, sólo Saquí, pero está bien lejos.

-Vayan a buscar ayuda po-por favor-dijo mirando al hombre- puedo darles todo el dinero que quieran, pero por favor vayan-Christopher intentaba sentarse, pero no lo lograba, apenas se movía el dolor lo invadía.

La mirada de los dos hombres demostraba sorpresa pues no sabían si el hombre les decía la verdad y si fuera el caso que dijera la verdad como y quien iría por ayuda, las fuerzas del castaño se agotaban.

-Acaba de llamar el Joven Joel señora

- ¿Y que decía, Charlie?

-Que llegaba en la noche

-Mamá ¿Por qué Joel no estuvo con nosotros en el entierro? -Interrumpió Camile.

-Erick deberías descansar, fue un día muy duro y te vez agotado, si deseas ve a la habitación-propuso Paty.

-Si señora, gracias, con permiso- el ojiverde dio la vuelta y se encamino a la habitación que le correspondía, pues por ser una mansión tan grande como esa había habitaciones de más.

-Charlie por favor acompáñalos, ve con ellos Yanelis yo al rato iré a verlos y conversar con ustedes.

-Si señora.

Yanelis con la mirada gacha solo siguió al hombre pues su hermano ya no estaba a la vista de ellos.

- ¿Qué horas son?

-Uy deben ser como las 9

- ¿Y mi reloj? -pregunto el castaño al ver que no estaba.

- ¿su reloj?

-Tranquilo hombre, te lo puedes quedar.

-No no es eso, yo lo guarde, que pasa si alguien viene y por quitártelo te hace daño.

El castaño se rio ante la ocurrencia de aquel hombre.

- ¿En cuánto llegara tu sobrino?

-Depende si tiene suerte y encuentra una camioneta que lo lleve y si los médicos acceden a venir seria como a las 11.

A Christopher no le quedaba más que esperar.

-Pero Christopher era millonario, ¿Por qué no te dijo nada?