Learning To Love Myself [Yoonmin]

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Tan ligero como hermoso fue aquel sueño que el pequeño de grandes mofletes tuvo esa noche.
Cayó rendido a los brazos de Morfeo luego de ponerse su pijama y abrazar su nuevo oso con aquel perfume exquisito; la sonrisa que tenía pintada en sus labios no se la podía borrar nadie.

Soñar con Yoongi fue algo que no pudo evitar, aún en medio de sus sueños veía aquel hermoso rostro junto con su sonrisita de encías que hacía dar un vuelco a su pobre corazón de pollito, fue de los mejores sueños que pudo haber tenido nunca.

Los ánimos y la alegría tomaban cada parte de su ser al momento que sus ojitos se abrieron luego de oír su alarma, dio un último abrazo a su peluche y corrió a la ducha. Saliendo de ahí buscó sus mejores atuendos y se colocó la parte inferior, pero antes de ponerse su camiseta miró la bolsa que su hyung le había regalado y decidió probar algo nuevo.

Sacó todas las cosas y miró aquella crema inhibidora, nunca la había usado porque era exageradamente costosa pero todos dicen que es muy buena; puso un poco en su mano y se lo esparció por el cuello y parte de su pecho, olía de maravilla y ocultaba su aroma para así no estar preocupado de llamar la atención de más alfas. Luego de que se secara, se vistió completamente.

— Estoy casi seguro que esto se me ve mejor que otras veces cuando me lo ponía

Dijo viéndose al espejo, el día de hoy su entusiasmo estaba al máximo por lo que su autoestima comenzaba a subir poco a poco, se sentía muy feliz.

Alistó su mochila y se aseguró de meter algunos supresores, luego se tomó una pastilla de estos y bajó a desayunar.

— Buenos días Nam hyung.— Saludó alegremente

— Buenos días pequeño, ¿Cómo dormiste?

— De maravilla, me siento como nuevo

— ¿Estas seguro de ir a la escuela hoy? Si quieres puedes faltar

— No, no se preocupe; si puedo ir

— ¿No tienes dolores por tu celo?

— Ninguno, las cosas que me compró Suga hyung son una maravilla, me siento genial y no me duele nada, hasta puedo correr si quiero.— Rió, estaba emocionado, era la primera vez en su corta vida que se sentía cómodo con su celo

— Pues entonces le pediré que me pase los datos de todo para comprarte más

— Ya tengo muchas cosas que me regaló, no tenemos que preocuparnos en ese gasto por mucho tiempo, estoy demasiado feliz y agradecido con él, quiero ir a darle muchos besitos

— ¿Y por qué no lo haces?

— N-No...— De inmediato sus mejillas se encendieron — Lo decía de broma...

— Sé que no es así, es verdad que le quieres besar muchas veces

— Yaaa hyung, no es necesario que lo diga en voz alta.— Lo empujó despacio para luego reír — ¿No se enoja por eso verdad?

— Para nada Jiminnie, sé que Yoongi es un buen chico y que ustedes dos están prácticamente comiéndose con la mirada

— No lo diga como si fuéramos pareja.— Cubrió su rostro con sus manitas debido a la pena de haberse imaginado esa situación — Sería algo hermoso pero no pasará

— Nunca digas nunca.— Nam miró a la tostadora y al notar el humo de inmediato la abrió, dejando a la vista sus dos panes completamente negros — Carajo

— Deje que lo haga yo.— Comentó riendo mientras hacía un nuevo desayuno

Luego de aquel incidente, ambos comieron y fueron a su instituto, el menor entró con una gran sonrisa pero al pasar a su salón escuchó las risas de muchos chicos y chicas, y no era por algo sino por alguien.
Un segundo después de colocar un pie dentro de su salón se oyeron las burlas y gestos "imitándolo".