Stephen nunca espero que María Stark le pidiera aquello. Tenía 25 y el cachorro solo 10 años, era ilógico, pero firmo por la seguridad de aquel omega. Nadie imaginaria que algo hizo María Stark aquella vez en la cafetería y cuando su hijo tuvo su primer celo siendo ya un omega. Con el tiempo y teniendo 11 años para él, se olvido de aquel contrato, pero la realidad lo golpeo al ver un omega malherido en urgencias, alguien que estaba tan mal que no creían que pasaría la noche. En aquella camilla estaba Anthony Stark, su omega. ¦¦Completa¦¦