Nisha es una universitaria de diecinueve años fanática de las novelas románticas. Cuando su compañero de clases, Max Stuart, aparece muerto en una habitación sombría con una bala en su frente, todo empieza a empeorar. Había sido un suicidio ya que se encontró una carta en su mano derecha y una pistola en la izquierda. Sin embargo, Max no parecía del chico que sufría de alguna depresión o de problemas. Todo lo contrario. Pero ¿quién podría saber realmente la verdad? Solo el mismísimo Max. Nisha empieza a sentir cosas sobrenaturales a su alrededor, cosas que la aterran, pero cuando se aparece el mismísimo Max en su habitación como si no estuviera muerto las cosas cambian. Max es un espíritu que aún no se atreve a irse de este mundo sin antes saber qué fue lo que le pasó. Nisha no tiene otra opción que ayudarlo. Demasiadas pistas y cabos sueltos encontrarán en el camino, tantos escenarios y varios sospechosos los harán entrar en duda. Pero cuando los sentimientos entre ellos empiezan a crecer con forme pasa el tiempo, uno de los dos tiene que parar, porque sino Nisha será quién sufra de más cuando Max se vaya definitivamente de este mundo.