Mi ídolo, el de los tatuajes infinitos, por el que hubiese dado todo para poder conocerlo y el que era la persona que veía imposible... Hasta que un día todo cambió. Me hizo ver qué los sueños si se cumplen, que el destino existe y que todos somos partes de un plan perfecto. Podrán existir mil problemas y obstáculos, pero ya llegamos hasta aquí, así que ¿Y si lo intentamos?.