Molly Mcgee es estudiante de una secundaria en un pequeño pueblo llamado Brighton, en el que allí convive con su familia y un gruñon fantasma carismático llamado Scratch. En aquella escuela Molly tiene a una mejor amiga llamada Libby y a unos cuantos compañeros más, de entre ellos destaca Andrea Davenport, una joven chica influencer, actriz, cantante y futura embajadora de buena voluntad de la secundaria Brighton. A pesar de los anteriores encuentros entre Molly y Andrea algo sucederá aquí que hará que ambas se relacionen y formen una bonita conexión.