˗ˏˋ 𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐂𝐚𝐭𝐨𝐫𝐜𝐞 ˎˊ˗

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Estuvieron metidos en la habitación durante todo el día.

España sacaba temas de conversación totalmente absurdos con tal de continuar aquella hermosa charla, teniendo al italiano sentado frente a él en la cama.──No, realmente no sabía que Francia era de esa manera.──soltó unas pequeñas carcajadas el tricolor, limpiando unas lágrimas en sus ojos. Llevaba bastante rato riendo.

El español sonreía muy alegre al verlo de esa forma, su sonrisa era tan preciosa, su voz la adoraba. En verdad era tan magnífico. Sus orbes conectaron en un momento dado, ámbar y verde. Sin siquiera pensarlo, ampliaron aún más sus sonrisas, desviando sus rostros luego. No sabían qué les estaba pasando, más esa era una sensación tan hermosa, hacía ya rato que no reían y sonreían tanto, hasta que sus rostros dolieran de tanto hacerlo.

──Eres muy divertido, España.──el italiano se acercó un poco más hacia el español, extendiendo su mano para así acariciar su mejilla. Eso claramente provocó un fuerte sonrojo en las mejillas del menor, quien se acarició con la mano del otro.──Aún no puedo creer que Portugal se haya atrevido a dañar a un ser tan precioso como tú.

──¿E-eso crees?──España lo miró a los ojos con una preciosa sonrisa. Se sentía tan único en ese momento, siendo acariciado y mimado, con aquellas palabras tan preciosas y sorprendentes.──Claro que si, España... Eres precioso, magnífico...──cada vez se acercaba más a su rostro, a su cuerpo.──Guapo, adorable...──el corazón del español comenzaba a acelararse al sentir la respiración del mayor contra su rostro.──Encantador, lindo...

Llegaba el punto en el que sus narices rozaban.

Ambos sabían que era lo que seguía luego de esa distancia, más no se atrevían a hacerlo. Fue un momento dado en el que estaban apunto de conectar sus labios, pero fueron interrumpidos por una llamada al teléfono de baquelita de la habitación.

Se separaron rápidamente al escuchar el escandaloso ruido. Reino Italia se sentó en el lugar en el que estaba antes, desviando su mirada. España se hayaba bastante confundido ante aquella llamada, no esperaba llamadas de nadie y menos en la hora que era, pues ya la luna estaba en el puesto alto.

Curioso ante quién era, elevó el teléfono hacia su oído, preguntando:──¿Hola? ¿Quién es?──ladeó su cabeza, curvando sus cejas en señal de confusión. Del otro lado de la línea se lograron escuchar unas risas cada vez más fuertes, las cuales espantaron de más al español. Reconocía muy bien esas risas.

« ¡¿Qué rayos te pasa, pedazo de imbecil?! ¡¿Te atreves a cortar la llamada mientras te hablo?! Te crees muy valiente, eh! »

Reino Italia lograba escuchar una voz en alto, más no entendía lo que decía.──¿España? ¿Quién es?──cuestionó, ahora preocupado. La cara del bicolor lucía muy asustada, su piel se tornó pálida, sintió sus manos apretando las sábanas.

« ¡¿No vas a contestarme?! »

──¿España?

──E-e-es Portugal...──España dijo finalmente. Portugal se confundió al escuchar aquello, luego enfadadose casi al instante. ¿Estaba hablando con aquel estúpido italiano?

Ese sentimiento fue correspondido.

El ceño del tricolor se frunció al escuchar al español tartamudear ese nombre. Era un sentimiento de rabia que hacía mucho no sentía, tenía tantas ganas de ahorcar al portugués.──R-Reino Italia, esper-──el teléfono fue arrancado de las manos de España, este nisiquiera tuvo tiempo de reaccionar.

𝐀𝐠𝐠𝐢𝐮𝐬𝐭𝐚𝐦𝐢  ᯽ EspañaxItaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora