˗ˏˋ 𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐢𝐞𝐜𝐢𝐬𝐢𝐞𝐭𝐞 ˎˊ˗

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Fue luego de un rato más que se separaron, comenzando a preparar las cosas para poder desayunar y ya salir de ahí.

El reino italiano observaba de reojo a España en todos los movimientos que hacía, como si quisiera preguntarle la razón de todo lo que acababa de suceder. No obstante, prefirió guardarse sus palabras y terminar de vestirse. España estaba de espaldas a él, no sentía su mirada en lo más mínimo, se notaba que era muy respetuoso en ese sentido; y en todos, probablemente. Pero, él no tenía tanto autocontrol como quizás el otro pensaba.

Me giré y ahí estaba. El ser más hermoso que jamás haya visto. Aquel ser que no me atrevería a llamar como humano, más bien como dios, como algo sobrenatural, un acto divino el cual fue traído hacia mí por la gracia del señor. Lo rayos del sol pegaban contra su rostro, dejándome ver a la perfección sus bellas facciones, pero puedo decir que veía más que eso. Veía, a través de sus cabellos y lunares, las hermosas experiencias pasadas a su lado, como me llevaba a viajes astrales, viajes en los que parecía que estabamos solo nosotros dos, viajes hermosísimas a ríos de sabidurías, praderas de aprendizajes y montañas de placeres. Todo suena tan inalcanzable, lo sé, pero ahora mismo y sólo viéndole suspirar puedo agradecer al ser exterior que nos observa por tremendo oro que fue plantado frente a mi con tanto esfuerzo, tiempo, delicadeza y pasión.

Un suspiro entrecortado salió de sus labios ahora húmedos, negando varias veces con su cabeza y levantándose finalmente de la cama.──Eh... Ya nos vamos, ¿no?──cuestionó de pronto, queriendo romper el hielo que los envolvía y sacar esos pensamientos de su ser. España lo miró al terminar de ponerse la camisa, asintiendo.──Si, aunque tenemos que desayunar primero. Nos espera un largo viaje y probablemente un día pesado.──dejó salir un bufido prolongado. Tenía razón, y el italiano comprendía aquellas palabras. Estar en el territorio de los coreanos, especialmente de la zona que actualmente dirigía el del sur, sería una pesadilla. Se maldecía de no haber hecho más para que su difunto novio no provocara tanto mal. Sin embargo, eso nunca y en ningún mundo tenía chance de efectividad.

──Entiendo. Entonces vamos ya, porque si va a ser como anoche...──recordó el antiguo principe romano, sintiendo como un escalofrío le recorría el cuerpo por el simple hecho de imaginarse nuevamente entre tantas personas. España asintió una vez más, notando que al parecer a Reino Italia no le agradaba mucho eso de estar entre mucha gente.──Si quieres puedes esperar fuera mientras yo hago la fila, no me gustaría que te de dolor de cabeza antes de llegar. Sé que será muy difícil estar en el territorio de esos dos.──dijo al acercarse a él, levantándole el mentón con sus dedos pulgar e índice con sumo cuidado para poder verlo mejor.──¿Has dormido bien? Te ves cansado aún.

Le fue imposible al italiano esconder el sonrojo que se formó en sus mejillas, ¿cómo demonios es que España le hablaba con tanta normalidad luego de lo que acababan de hacer? Bajó su vista una vez más con nervios, pero fue elevado al instante por el contrario. Sus rostros estaban más juntos ahora, sus narices rozaban al ser casi de la misma altura.──¿Te has quedado con ganas de más...?──susurró el español muy cerca de sus labios, haciéndolos rozar intensamente. Reino Italia tragó saliva por eso, sin poder creerse que estaba prácticamente congelado frente a ese hombre.

España rió pequeño a los pocos segundos, separándose sin unirlos al final.──Venga, vamos.──le tomó la mano al mayor, dándole un tierno beso en esta. Tomó las cosas que tenían y se adelantó para que ambos pudieran salir de allí. Una vez que tuvo al italiano detrás de él fue que pudo relajar su ceño y sonrojarse a más no poder, cayendo en cuenta de todo lo que acababa de hacer. Era como si un balde de agua fría le hubiera caído en la cabeza, estaba mucho más nervioso de lo que podía parecer. El italiano fue caminando detrás suyo, sin decir ni una palabra más luego de eso.

𝐀𝐠𝐠𝐢𝐮𝐬𝐭𝐚𝐦𝐢  ᯽ EspañaxItaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora