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⚘🌈Leer la nota del final.

Luego de comer Jungkook tuvo que irse pues aún debía ir al trabajo. Se vistió con las pocas cosas que tenía y salió de la habitación.

- Tae. Debo ir al trabajo. Llegaré por la noche, tal vez a las ocho y media. Tengo que reemplazar a mi compañero. - Jungkook iba saliendo cuando Taehyung se le acercó.

-Y-yo... Kookie.

- Dime. - Este salió del departamento volteandose para mirar a Tae.

- Yo... - Tae se arrepintió de lo que iba a decir así que cambió de tema. - Ten cuidado. - Dijo para luego cerrar la puerta en la cara dejándo a su amigo confundido.

- Gracias supongo. - Susurró un tanto atónito. Volteó nuevamente para ahora si, ir a su trabajo, pero nuevamente su amigo abrió la puerta. - Que-

Tae interrumpió sus palabras tirándose encima de él para luego unir sus labios en un corto beso. Las mejillas del menor se tiñeron de un furioso rosado, al igual que las del peligris.
El mayor se separó de él rápidamente, se adentró a su departamento y cerró la puerta torpemente.

Jungkook no podía estar más avergonzado, el color rosa estaba en todo su cuerpo y podía asegurar que estaba ardiendo. Millones de emociones pasaban por el y elefantes estaban en su estómago. Por un lado estaba enfadado con Tae por haberle cerrado la puerta en la cara luego de lo que hizo, pero por otro lado sentía que podía morir en aquel instante.

Había estado un minuto congelado cuando se dio cuenta de que si no se apuraba llegaría tarde. Subió al ascensor para luego apretar el botón del primer piso.

"Tal vez solo te está usando. ¿Quién querría besarte? Mira lo asqueroso que eres. Gay de mierda."

El pensamiento de que Tae sólo estaba jugando con él le aterraba. Pero no, el no era así. Llegó al primer piso cuando una notificación en el celular que sus padres le habían comprado antes de lo sucedido, llegó. Este mensaje decía que al final su compañero asistiría al trabajo, por lo tanto el solo tendría que ir a un sólo turno.

Salió del edificio y caminando llegó hasta su trabajo. Por suerte no estaba a más de diez minutos. En todo el camino pensaba en como vería a la cara a su mejor amigo. ¿Qué había sido eso? Se preguntó. Nuevamente un color rosado apareció en sus mejillas. Definitivamente no se lo esperaba.

Llegó a su trabajo con torpes pasos. Su supervisor, muy apuesto y amable lo recibió con una sonrisa como siempre hacía. El lo había ayudado en momentos donde se sintió inservible. Lo ayudó cuando su situación económica se fue por la borda. Tenía mucho que agradecerle a aquel hombre. Además de darle trabajo cuando nadie más lo hizo por el simple hecho de ser muy joven.

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- Jin hyung... - Llamó Jungkook a su supervisor.

- Dime Kookie. - Este era siempre tan meloso con el. Lo trataba como si un hermano fuera.

- Yo... ¿U-usted ha b-besado a alguien? - Habló con mucho nerviosismo. SeokJin abrió los ojos bastante sorprendido queriendo indagar más sobre el tema, pero para no incomodar a su menor decidió solo contestar.

- Sí. - Dijo seguro y con aires de grandeza. Pues estaba orgulloso de haber dado su primer beso con el que ahora es su pareja y ya van a cumplir dos años. - ¿Quieres saber cómo fue?

- ¡Sí! - Gritó y luego al darse cuenta de lo hecho se sonrojó. - D-digo... S-si usted quiere decirme. -Se corrigió.

- Claro. - Se sentó en una silla para luego empezar a hablar. - Fue hace unos dos años. Sí, lo sé, era algo viejo para dar mi primer beso, pero quería guardarlo para la persona correcta. - Comentó. - Era mi cumpleaños y yo había invitado a varios amigos, incluyendo al que ahora es mi pareja... Kim NamJoon.

SeokJin contó todo con lujo de detalles, Jungkook escucho cada palabra mencionada por su hyung. "En ese momento sentí como si millones de elefantes y dinosaurios jugaran en mi estómago. Y fue ahí cuando supe que NamJoon me gustaba." Esa frase golpeaba su cabeza a cada segundo. ¿Será que me gusta Taheyung? Se preguntó. Trataba de negarlo, pero estaba más que obvio que sí.

Continuó haciendo su trabajo en aquella cafetería hasta que su turno terminó. El reloj marcaba las cinco y media de la tarde. Tomó sus cosas y comenzó a caminar pensando en qué haría cuando llegara a la casa.
Los minutos pasaron hasta que se encontraba parado en frente de la entrada del edificio. Tomó el valor suficiente para entrar, subir hasta el piso del ahora su departamento.

Tocó la puerta pero nada se escuchó. Pensó que Tae había salido por algo de comer. Así que con nerviosismo sacó las llaves y abrió la puerta. Todo estaba en orden.
Se dirigió a la habitación que había compartido con Tae y sorprendentemente la puerta estaba cerrada. Tocó nuevamente y nadie respondió por lo que decidió abrirla.

Allí se encontraba su mejor amigo hecho completamente una bolita tapado hasta la cabeza con las sábanas de su cama. Su cuerpo daba espasmos por lo que Jungkook rápidamente supo que estaba llorando.

- ¿TaeHyung? - Lentamente se acercó a él moviéndolo un poco. - ¿Qué sucede? -Por un momento olvidó todo lo que había pasado horas atrás.

- Taehyung no está aquí. Está en Azúcarlandia. - Jungkook río por el comentario de su amigo. Habían inventado aquel lugar el año anterior y hace mucho no lo decían.

- Pues dile a TaeTae que vuelva. Quiero saber que le sucede.

Las sabanas se deslizaron lentamente hasta dejar al descubierto la cara roja del mayor.

- L-lo siento...

- ¿Por qué te disculpas? - Realmente había olvidado todo.

- Por b-besar-

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Holaaa. En serio lamento tanto la tardanza. Pero es que las fiestas y demás me tenían ocupada.

Espero que este nuevo año sea mejor para todos, que se cumplan sus metas y deseos. Todo va a estar bien, no se preocupen.
Espero que hayan recibido lindos regalitos y la hayan pasado muy bien.
Gracias por todo el apoyo, los amo💜

ゃ 𝘂𝗻𝗱𝗲𝗿𝘸𝘢𝘵𝘦𝘳 ⑅ ( 𝗍𝖺𝖾𝗄𝗈𝗈𝗄 ) ֶָ 🍒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora