¿No te pasó algo como que de pronto te vuelves un cantante famoso, ganas incontables premios, tienes muchos amigos y luego caes en lo más profundo de la soledad donde ya nadie te soporta y lo único que quieres es volver a tu pueblo con tus gallinas...
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Punto de vista de Queen Bee.
queen bee 🐝 @queenbeerb
hola, mutuals. voy a estar inactiva un tiempo. Los quiero.
Escribí luego de colgar la llamada con Nick. O Julien. Ya no sabía cómo llamarlo.
Me encontraba llorando frente a la pantalla de mi ordenador. Me sentía la persona más patética del mundo por segunda vez en el año.
La lista de reproducción en aleatorio me puso Plastic Love y resoplé.
No podía ser posible.
Podía imaginar que, si mi vida fuese un libro, tendría al autor riéndose de lo que sucedía mientras escribía.
¿Estás feliz, autor de mi libro?
Probablemente respondería que sí, porque lo que estaba pasando era irrisorio.
Negué con la cabeza y abrí el documento para escribir.
Solo necesitaba depositar mi enojo en el lugar que no fuese ningún ser querido o no querido —no culpable—. Así que decidí escribir.
Me concentré en que la hoja en blanco estuviese llena de letras con sentido; me sumergí tanto en lo que narraba, que cuando terminé, me sentí libre de cualquier carga.
—Creo que me pasé un poco —dije mirando la pantalla. Me encogí de hombros y decidí a ir a dormir. Ya consultaría con la almohada si el final de «Destinados a ser», me parecía adecuado.
Y pasaron los días, pensé en escribirle y batallé mucho en hacerlo o no. Finalmente me decidí por escribirle «bien, hablemos», pero no obtuve respuesta.
Para el quinto día, me sentía fatal. Publiqué el capítulo final sin decir nada. Tenía varios lectores esperándolo.
Las respuestas fueron buenas, dentro de todo, pero yo no me sentía feliz.
Recostada en mi cama, un gran recipiente de helado de Finn's, películas de acción a las que no le prestaba atención, y recurrir a mi teléfono por algún mensaje que no llegaba. Mi día resumido.
Billy
«Abeja reina, estoy yendo a tu casa. No es una pregunta. Adiós» 14:46
Bueno, llegó un mensaje de Billy.
Suspiré. No había forma de deshacerme de él. Se había convertido en mi mejor amigo sin siquiera buscarlo. Él solo decidió adoptarme en cuanto nos conocimos.
No tardó en mucho en llegar, abrí la puerta cuando envió un mensaje pidiendo que lo deje entrar. Lo escribió en mayúsculas, era su forma de gritarme mediante un mensaje de texto.
