Y me inclino perdido en mi propia obsesión.
Y bajo la guardia si otro se encarga de mi voz.
Y me sumo en el mar que lucirá más de un error
si hoy se percibe cuánto se reciben golpes de timón
ante la barra que ahoga mis penas en este bar.
Como si fuera a caer en la acera en esta ocasión
no habiendo salido nunca malherido del recital
donde le canto al tiempo perdido que hay que esperar.Ojalá no fuese a desperdiciar este vacío
y rinda frutos, ¡qué salga otro verso mío!
que antes me muero entre el desapego y el olvido
a dejarme en blanco una hoja y darle desperdicio,
¡qué va! Primero me como yo la sal
a dejar sin prosperar mi calidad
que se cosecha entre lo semántico de mi ideal
y no pienso dejar caer a un decadente vicio.
Aunque, puede, y sólo puede en un quizá,
que el vicio lo guarde de imprevisto yo por acá
y lo resguarde en botellas de coraje y ansiedad
guarecida en la ácida vida de un cuadro a negar
que está, que existe, que entre versos se desviste
y sólo se trasviste de excusa al querer mejorar.
Y allí están, las dos caras de un paisaje a cambiar
que sin importar el viaje tomado siempre estarán.Deja que me abra paso entre el gentío de tu ciudad
y vea cómo prosperas ante la adversidad,
tratando de darle piezas a un rompecabezas
cuando parece que no cuece y que no queda más.
Anda, ve y cántate un jazz al estilo del rap,
¿no quieres? Pues no me pidas a mí que deje de cantar,
que los imposibles sólo son visibles si tu realidad
dice que a veces te rindes y te sueles justificar,
¡¿me oyes, Iván?! Mírame cuando te hablo,
agradece que yo si hago algo para intentar cambiar,
¿no te parece extraño? Pues a mí más,
hasta ayer escribías frases de ultraje y ahora parece que vas
a cambiar la sonoridad cortando líneas a medio terminar,
y es más, independientemente de si el cambio es positivo
déjame te digo que al final está en tu mano si te decides adaptar.Ahora relájate y suelta tus manos de mí,
aprende a confiar los secretos al viento,
no te los guardes sólo en los adentros
de un soliloquio imperfecto y gris.
En un templo de soliloquios, paredes de cuerpos
y suelos de densa espuma infeliz,
hay estrellas de fuego que pueden y te van a herir
si no las apagas y das tu valía a cambio del cielo
que siempre estuvo allí para ti.Ya has sacado del vacío tantos secretos sombríos
que precipitan a la luz de la exposición
que parce un chiste mal digerido o referido a un ciervo herido
que nunca consigue apaciguar la pena en su voz
el que no puedas romper la copa que te agota
y que a la vez te mantiene vivo en distimia y difusión,
culpa a tu baja tu autoestima de exigirte una salida
firme ante el concepto, claramente inconexo, del amor,
sabes mejor que nadie que esas son mentiras,
y me lo has expresado en estas doce poesías,
sólo te falta el valor.
Lo sabes mejor que nadie, y es notorio tu agobio
cuando te adelantas y desde antes entierras el corazón,
cuando tomas la pala y remueves las rimas
y al salir tus latidos se encuentran en confusión
ante la atrofiante situación a la que tiritas
presa de lo frágil que eres ahora en comparación,
pero aunque no lo digas y nunca seas dócil,
sabes cuando quedas con el silencio en tu habitación,
cuando la soledad se embarca en la noche
hacia los reproches resaltantes en tu dirección,
que esos cuentos eróticos de un loco a su neurosis
no son más que el reflejo de tu negación,
que los defectos que tanto repudias hoy te ayudan,
pues son el auspicio de este intento de canción.Ahora relájate y suelta tus manos de mí,
aprende a confiar los secretos al viento,
no te los guardes sólo en los adentros
de un soliloquio imperfecto y gris.
Hoy es el momento para deshacerte del sufrimiento
de ser preso de tu ilógico sentir,
sólo necesitas tenerte un poco de aprecio, si, a ti,
tal vez ya desprecias demasiado al resto
por la inmadurez que cargas y te impide ser feliz.(Hey, tú, el que está leyendo,
¡Gracias por haber llegado hasta aquí!)
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Palabras Suicidas
Poesía«He cambiado aquella escena; el doblaje es ordinario; también, he mejorado la versión original. Hay veces que te pierdo en desiertos y, en cambio, en laberintos te encuentro; podría gritar viendo series de humor y luego reírme en la peor...