Harry Potter y Los Sucesores De La Oscuridad.©

¿Negociar?

La luna ya había salido, su brillo era opaco y las nubes cubrían casi todo el cielo que en otras noches solía ser estrellado; a lo lejos se alzaba, aunque los muggles no pudieran verla, una casa grande de dos pisos , con apariencia de no haber sido habitada desde hace mucho; pero que en sus mejores tiempos habría sido un hogar majestuoso; aun que ahora la decadencia y el deterioro del tiempo se hacían notorios; las habitaciones eran muy espaciosas con muebles de lujo, todos cubiertos por una fina capa de polvo; los techos eran altos y los vidrios de las ventanas eran tan opacos que apenas y podía pasar la luz del exterior, en el gran salón un candelabro de cristal, colgaba en el centro del techo y en las paredes se exponían retratos familiares, pero también objetos que parecían pertenecer al mago más tenebroso que alguien se pudiera imaginar; pero la casa no estaba completamente abandonada...

- después de todo no ha sido tan difícil ¿verdad Potter?- dijo Yaxley, soltando a Harry haciendo que este cayera al suelo.

Harry no dijo nada, se quedo cayado, ¿Qué podía decir? estaba en lugar que no conocía, sin su varita y sin una forma posible de escapar.

- ¿bien qué haremos contigo? podríamos matarte, claro ;pero eso seria acelerar las cosas. ¿no crees?... prefiero esto - dijo Dolohov apretando los dientas y alzando su varita apuntando hacia Harry- !Crucio¡

en ese momento Harry sintió como si un montón de cuchillos candentes le cercenaran la piel, grito y grito, grito como nunca lo había hecho en su vida, el dolor era tan intenso que pensó que incluso la muerte era mejor a seguir soportándolo.

- Dolohov, recuerda que lo necesitamos vivo- le dijo Yaxley a su compañero con cierta indiferencia.

y el dolor ceso, estaba temblando en el suelo frio de aquel espantoso lugar.

- bien Potter ahora que ya estas más... tranquilo -dijo Yaxley con burla- veremos que tanto les importas a tus amigos, tendrán que hacernos un pequeño favor, si quieren volver a verte con vida.

-¿qué clase de favor?- pregunto Harry con voz ronca y un poco débil.

- oh no, todavía no, todo a su tiempo- indico Yaxley y con un movimiento de su varita unas cuerdas aparecieron y sujetaron a Harry .

su compañero agarro a Harry y lo levanto del suelo, este forcejeo y el mortífagos le hiso un corte en el brazo con un simple movimiento, de su varita, en señal de que le convenía más quedarse quieto; y se lo llevo a rastras, mientras eso pasaba Harry pudo distinguir un escudo en un marco el cual identifico cómo el escudo de la familia Lestrange, el mortífagos lo llevo a una habitación que parecía ser el sótano de aquella vivienda, aquel lugar estaba casi vacío, a excepción de un foco que colgaba en el medio, el cual tenia una iluminación tan débil que más parecía estar de decoración, Dolohov aventó a Harry, hiso un floritura con la varita quitándole así las cuerdas y cerro la puerta con un hechizo, dejando a Harry solo.

Harry se incorporo rápidamente y con sus manos empezó a palpar las paredes en busca de una salida, aquel lugar era muy oscuro y húmedo, parecía ser la parte más abandonada de la casa, tenia un peculiar olor a viejo y padrino que emanaba de cada rincón, en las paredes había marcas de rasguños y  sangre seca, y del techo colgaban una cadenas bastante oxidadas, que parecían haber sido usadas para torturar personas hace ya muchos años. 

Su situación no podía ser peor, estaba solo, desprotegido, sin su varita y sin ninguna posibilidad de escapar, su cabeza era un remolino de pensamientos, con frustración se sentó en el piso apoyando su cabeza y sus brazos en sus rodillas, sentía un dolor punzante en su brazo, el cual seguía sangrando, debido al corte que le habían hecho Dolohov. No podía parar de pensar en que seria aquel favor que pedirían a cambio; En el piso de arribo Yaxley ya había enviado una carta rumbo al ministerio de magia, para pedir por el rescate de su prisionero.