¡Sunshine! ¡Sunshine! | Hoseok Little space

🧸; prologo;

La primera vez que Hoseok regresó, no fue muy especial. Era un lunes nublado, estaba estresado, su comeback estaba pisándole los talones. Tenía que aprender coreografías nuevas y filmar MV ir a entrevistas y hacer promociones para su nuevo álbum.

En ese momento estaba en el estudio, se quedó viendo sus figuras detenidamente y cuando despertó las figuras estaban regadas en el suelo, tenía las mejillas rojas y húmedas. Desde ese día, cada que iba al estudio entraba en aquel raro trance y cuando despertaba lo hacía con rastros de llanto.

Así, se pasaron tres meses en los que Hoseok se negaba a ir al estudio y se estresaba demasiado, meses en los que Hoseok se dio cuenta de su condición. Cierto día el manager del grupo, Sejin, les mando llamar a los mayores sin Hoseok; estando allí les hizo saber sobre el extraño comportamiento del primer menor  de la hyung line.

— Me preocupa, esta comportándose raro, esta...callado y cuando le llamo la atención empieza a llorar.

El líder miró al manager, perplejo. — ¿Llorar?

—Solo les pido que si lo notan así indaguen en su comportamiento.

YoonGi quien estaba callado habló, tal vez más para si mismo que para alguien más.— Ahora que lo menciona...oí a Seok llorar en su habitación.— dijo.

— ¿lo hiciste?— YoonGi asintió a la pregunta de Jin.

— Sin embargo, yo creí que sería un error pues, más que Hoseok sonaba como un niño.

allí termino la discusión, regresaron a casa con la promesa de averiguar que le sucedía al rapero.

Un día después de su plática y ya con vacaciones, los Maknaes se fueron con su familia y los demás  se quedaron en casa aprovechando este momento para sacarle información a Hoseok.

Por su parte Hoseok había aceptado su "Yo Niño" como él me llamaba, sin embargo a él le avergonzaba dejarlo salir, le avergonzaba ser descubierto; su yo niño hizo muchas cosas en un par de meses, la más reciente, por ejemplo. Fue comprar overoles a montones. Tenía un solo chupete y su fiel compañero un peluche de Mang. Hoseok no entendía que prohibiéndose a sí mismo pequeños placeres que harían a su niño feliz se dañaría.

Al pequeño Hobi de cuatro años le encantaba jugar con peluches y figuras, bailar y saltar;pero también era muy sensible. Aquel día que salió por primera vez por ejemplo, que Sejin le regaño por no estar con su habitual energía y además no trabajar como debería.

—Pe-pero...¿trabajo? Yo quiero...yo quería jugar

respondió el pequeño, pero su manager no escucho y al contrario cada que lo veía le exigía el doble, a Hobie no le gustaba ser regañado o castigado, tampoco le gustaba estar solo, pero Hoseok le daba vergüenza que lo viesen en ese estado, así que no lo dejaba salir.

Era de noche y SeokJin y YoonGi habían ido por la despensa, Hoseok y Namjoon se quedaron en casa. Hoseok hizo un extraño pedido.

— Hyung...puede comprar leche de fresa por favor.

Pidió antes de que se fueran, el Seok mayor acato su orden extrañado, pero feliz de que Hoseok se sienta más calmado y relajado.

Al volver se dirige a la habitación del menor para indicarle que habían vuelto, tal como lo hizo con Namjoon, cuando toca la puerta escucha un grito leve, como si se hubiese agarrado a Hobi en una travesura.