El Beta

Pollo Y Helado

Días después ~

POV KONG'S

Sentía que todo se estaba derrumbando ante mí, y no había nada que yo pudiera hacer. Siento impotencia, mi respiración es lenta y agitada, mientras la cabeza me dolía por intentar contener todas mis emociones.

—Kong — me llamó Mew con entusiasmo, sonreía agitando sus exámenes de un lado al otro.

Estaba feliz, no había duda de eso.

— ¿Kong? — su expresión cambió al verme —¿Qué pasa?

—Esto debe ser un error —susurré, apretando con fuerza el pedazo de papel. —Solo un error…

—¿Qué es un error?

No quería ni pronunciar la palabra, si lo hacía daba por hecho que era verdad.
Sin embargo, necesitaba desahogarme y Mew es la única persona en la que confío.

—Vamos a mi casa.

—Está bien. Vayamos.

Había ignorado el hecho de que no podía dar ni un paso, sentía que en cualquier momento mis piernas iban a fallar y caería al suelo.

— Todo estará bien, Kong. Todo — el cálido abrazo de Mew me dio la fuerza y la seguridad que necesitaba. ¿Cómo podría vivir sin él? Respuesta; no puedo, lo necesito. Es mi mejor amigo y lo amo, sé que su amistad durará para siempre. Mew es especial y único para mí.

🌼

Residencia Suthiluck ~

—Ya dime lo que pasa, Kong.

Mew estaba sentado en medio de la cama con una almohada entre sus brazos, sé que él estaba muy ansioso porque desde que llegamos no he dicho nada.
No sabía cómo empezar.

— Kong, sabes que puedes confiar en mí. — Sentí la suave caricia de su mano en mi mejilla, sus brillantes ojos cafés me daban seguridad. Sin darme cuenta estaba sonriendo ante su cálido gesto.

— En mis exámenes… —no podía decirlo —Ten — estiré mi mano y le entregué aquel papel que tenía hecho una bola, estaba todo arrugado, no me importa.

Mew se acomodó a mi lado, apoyándose en la cabecera. Al abrir aquella hoja, su mirada examinaba cada detalle sin pronunciar palabra alguna.

— Tal vez sea un error —susurró, mirándome con pena.

—Verdad que si, eso no puede… —me quebré, no soportaba más, me permití llorar.  —No puedo ser b-bet…

Los brazos de Mew me sostuvieron, una vez más, él es el salvavidas de mi tormentoso océano.

—Kong, cálmate, encontraremos una solución.

—¿Cuál solución? —suspiré tratando de mantener la calma, el dolor de cabeza, así como el ardor en mis ojos eran claras señales que había pasado un largo tiempo llorando.

—Te haremos otro examen.

—Y si sale el mismo resultado, ¿qué hago?

—No seas pesimista, todo saldrá bien.

—Gracias Mew, no sé que haría sin ti. — lo abracé con fuerza, si él tenía esperanzas yo también.

—Hey ¿escuchaste eso? — murmuró alejándose de mi cuerpo.

—Creo que mi padre volvió.

—Ve a bañarte — dijo de repente.

—¿Bañarme? ¿Por qué?